Juan Luis Cebrián, presidente ejecutivo del grupo de comunicación español, destaca el empeño en restaurar la rentabilidad y hacer frente al desafío tecnológico
Por: Ramón Muñoz
Juan Luis Cebrián, presidente ejecutivo de PRISA, grupo editor de El País, se ha mostrado convencido en la junta de accionistas celebrada este viernes en Madrid de que el grupo liderará el proceso de consolidación que van a experimentar las empresas de medios en un futuro próximo, para lo que será preciso seguir saneando las cuentas y mantener una estructura sólida de capital.
“Vamos a vivir también en el futuro próximo un proceso de consolidación de las empresas de medios, y queremos, no solo estar presentes en él, sino capitanearlo en lo posible. Requisito indispensable es por lo mismo equilibrar el balance y estabilizar el accionariado”, indicó Cebrián durante la celebración de la junta general, en la que se ha anunciado el nombramiento de Manuel Mirat como consejero delegado de PRISA a partir de septiembre, en sustitución de José Luis Sainz.
Cebrián destacó el firme empeño del equipo de gestión en “restaurar la rentabilidad” de la empresa, todavía con un importante endeudamiento, y necesitada de hacer frente a un “desafío tecnológico de magnitudes gigantescas, comparables al que supuso la invención de la imprenta o la de la máquina de vapor”.
“Desinversiones necesarias”
Por ello, reiteró la decisión del grupo de proceder “a las desinversiones necesarias, y a cuantas operaciones de otro género sean precisas”, para hacer frente a las obligaciones crediticias, “siempre y cuando contemos con la complicidad y ayuda de nuestros propios acreedores”. “Estos no pueden de ninguna forma mostrarse insensibles al historial de cumplimiento que la compañía atesora, ni a los esfuerzos de accionistas, gestores, empleados y trabajadores de la empresa por restaurar el equilibrio de nuestro balance”.
En este sentido, el máximo ejecutivo de PRISA recordó que el grupo ha amortizado deuda en los últimos ocho años por valor de 3.435 millones de euros, abonando 1.194 millones de intereses y gastos a sus acreedores; se han vendido activos por 2.743 millones; se procedió a una ampliación de capital en 1.120 millones y a una reducción del gasto corriente en cerca de 400 millones, si se compara el año 2016 con 2009.
“En resumen, siempre hemos cumplido, y seguiremos haciéndolo, con nuestras obligaciones crediticias, incluso acortando el plazo de los vencimientos establecidos, como lo hemos hecho hasta ahora. La única condición para ello es que los gestores y el consejo de administración puedan trabajar con tranquilidad y confianza”, aseguró.
Reducción de remuneraciones del consejo
El máximo directivo de PRISA aseguró que para aumentar la rentabilidad del grupo será “inevitable” también reducir su perímetro, y modificar una estructura de costes fruto de un pasado imposible de mantener en la nueva economía digital.
En este sentido, anunció que tanto él como el consejo han decidido ajustar la remuneración de sus miembros a las circunstancias de la propia empresa. Recordó que los consejeros ejecutivos ya renunciaron al 30% de su incentivo variable anual en 2016 y lo hicieron en el 2012 en su totalidad.
“Estos no son hechos aislados ni coyunturales, deben entenderse como un signo del porvenir en este y los próximos ejercicios. Pretendemos revisar igualmente la política salarial de la alta dirección. En cualquier caso hay que saber ajustarse a las condiciones generales del mercado y a las particulares de la compañía, es preciso insistir en que hay que remunerar el talento y la responsabilidad como es debido”, precisó en su discurso a los accionistas.
Crecimiento en un año difícil
Cebrián indicó que 2016 fue un año difícil, en el que la recuperación económica en España no se ha visto compensada por un incremento de la inversión publicitaria, que supone el 35% de los ingresos consolidados, mientras que América Latina ha sufrido una severa crisis, con depreciación de las monedas, que ha afectado a los negocios del grupo.
Pese a ese entorno adverso, el beneficio bruto operativo del grupo (Ebitda) alcanzó los 281 millones de euros, pero debido a las nuevas normas impositivas y contables aprobadas por el Gobierno, se tradujo en unas pérdidas consolidadas de 68 millones de euros. De haberse aplicado la anterior legislación fiscal, PRISA habría obtenido al cierre del año pasado un beneficio neto de 17 millones de euros. Por eso, Cebrián criticó la “arbitraria y errática” política fiscal del Gobierno que ha llevado a muchas empresas pequeñas y medianas a pérdidas.
El presidente de PRISA lamentó la depreciación que ha sufrido la acción en lo que va de este ejercicio, pese a la considerable mejora de las cuentas en el primer trimestre. Resaltó que en los dos últimos meses, se ha desplomado la cotización con un volumen de negociación que multiplica por siete la media del año anterior y una volatilidad originada por la existencia de un porcentaje muy escaso de acciones de libre disposición, pues el 85% del capital de la compañía se haya concentrado de manera estable en pocas manos.
Regulación y transparencia
“Titulares falsos o tendenciosos en los llamados confidenciales, a veces reproducidos con increíble falta de rigor profesional por medios supuestamente independientes, y teorizaciones infundadas sobre escenarios muy peyorativos, han provocado una desconfianza hacia la empresa, tan grande como injustificada”, indicó Cebrián.
Por ello, pidió a las autoridades que regulan el mercado que defiendan la transparencia sobre todo en empresas claves para el sistema financiero, pero también en aquellas que resultan cruciales para la formación de una opinión pública independiente y en libertad, sin las que nuestro sistema político no podrá funcionar.
Cebrián pidió "la ayuda y complicidad" a los acreedores
La junta de accionistas aprobó todos los puntos del orden del día con más del 92% de la aprobación de los accionistas. Al término de la Junta, Cebrián aclaró, a preguntas de los periodistas, que no había ninguna variación en su contrato con el grupo, en el que ejercerá como presidente ejecutivo hasta finales de 2018, y como presidente hasta el 31 de diciembre de 2020.
Rentabilidad de todas las divisiones
Por su parte, el consejero delegado, José Luis Sainz, indicó que PRISA ha aprovechado la última década de crisis profunda para reestructurar sus negocios, reducir sus gastos, y no repetir errores del pasado, “pero también para consolidar un modelo de crecimiento sobre dos palancas fundamentales, liderazgo en la creación y distribución de contenidos digitales, y la expansión internacional”.
Resaltó que todas las divisiones de PRISA ganan dinero y han recuperado los niveles de rentabilidad previos a la crisis, y que gracias a la fortaleza de las marcas y productos del grupo está gestionando las dificultades en mejores condiciones que sus competidores.
El consejero delegado señaló que para llevar a cabo el proceso de transformación, PRISA "requiere un accionariado robusto y alineado, sin fisuras, capaz de liderar el proceso, y un equipo de gestión suficientemente respaldado y con margen de maniobra para realizar su trabajo".
Fotos: Samuel Sanchéz
Fuente: Diario El País