El año 2009 comenzó con nuevas señales sobre una posible apertura a las telefónicas en el negocio de TV paga, mediante una nueva legislación en el sector. A las declaraciones de la Presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, asegurando que el país debe dar el salto tecnológico, se suman un entorno político y económico favorable al cambio. Los cableoperadores, en tanto, multiplican las ofertas triple play, incrementando la presión competitiva sobre las telefónicas. Existen señales positivas al cambio. Aunque desde el plano político se espera que “madure el debate”, en lo económico la apertura podría liberar nuevas inversiones, un aspecto importante para el país en el contexto de crisis mundial.
No es la primera vez que se menciona que la apertura del mercado de televisión paga podría estar cerca en Argentina. En varias oportunidades, en el último tiempo, hubo indicios importantes de que la decisión política que permitirá la entrada de las telefónicas al negocio de la TV estaba por llegar. Una de las últimas veces que el cambio sonó fuerte fue cuando Gabriel Mariotto asumió como interventor del Comité Federal de Radiodifusión (ComFeR). Pero también se esperaba el cambio en la regulación cuando las telefónicas interpusieron una demanda contra el Estado argentino en el Centro Internacional de Arreglos y Diferencias sobre Inversiones (CIADI) -parece que finalmente los operadores decidieron que una confrontación directa no era la estrategia más efectiva-, llegando finalmente a una suspensión del arbitraje. También se pensó que la apertura llegaría entre medio de las últimas negociaciones de los operadores –principalmente Telefónica- con el Poder Ejecutivo, pero la principal preocupación de la compañía, según trascendió, era la descongelación de las tarifas.
Ahora, de nuevo pareciera que la actual Ley de Radiodifusión –principal escollo para las telefónicas- tiene los días contados. Incluso la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner reconoció, en un reportaje televisivo, que el país debe “abordar el cambio tecnológico, dar ese salto”. Señaló que el proceso debe hacerse “maduramente, consensuado con todos los sectores de la sociedad y todos los actores que tienen parte en el negocio”.
De hecho, existe un proyecto para una nueva Ley, pero su envío al Congreso está demorado. Hace algunos días, el mismo Mariotto aseguró que el proyecto no se iba a cajonear, sino que se enviará “cuando la discusión política esté madura”. En este sentido, el ComFeR viene realizando una serie de debates en todo el país.
A partir de este año, la presión competitiva de los cableoperadores va a comenzar a sentirse. Si bien Cablecentro ya ofrece triple play en la ciudad de Buenos Aires, su cobertura con este servicio no abarca toda la geografía de la urbe. Pero se espera que a partir de marzo, Cablevisión/Multicanal (Grupo Clarín) comience a ofrecer paquetes con el servicio de telefonía, lo que representaría el desembarco a gran escala del triple play desde el lado de la TV por cable. Y esta semana, el diario argentino Cronista publicó que Supercanal, que ya contaba con una oferta empaquetada en la provincia de Mendoza, en marzo la extenderá hacia las provincias de San Juan y Tucumán.
Sin embargo, el camino de los cableros hacia el triple play no está libre de obstáculos, afirman los ejecutivos de estas empresas. Los operadores de TV por cable vienen denunciando hace tiempo que las telefónicas, que controlan la mayor parte de las redes de transporte, demoran en exceso la interconexión de datos con los cableros en el interior del país. Por ello, entre otras cosas, es que Cablevisión/Multicanal comenzó la construcción de una red de transporte alternativa a la de las telefónicas.
Los operadores telefónicos, demás está decirlo, sólo están esperando la señal de la bandera de largada para atacar el mercado de servicios convergentes.
Por otro lado, el contexto de crisis podría ser favorable a la apertura. La oportunidad de ingresar a ese negocio, muy ambicionado por las telefónicas, les significaría destrabar inversiones muy importantes en sus redes. Y en tiempos de crisis, las inversiones son más que bienvenidas.
También es preciso tener en cuenta el entorno político, que parece ser el factor de mayor peso para la evolución del mercado de telecomunicaciones hacia la convergencia de servicios. Justamente, el diario argentino La Nación informó esta semana que el Ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, se reunió con directivos de Telefónica en Madrid, y que el tema que predominó en el encuentro fue el plan de inversiones del operador en Argentina. Y además, se analizó una posible ampliación de espectro radioeléctrico para los servicios de banda ancha móvil sobre la red UMTS/HSPA.
El Gobierno argentino enfrenta duras negociaciones con el grupo español Marsans, por la estatización de Aerolíneas Argentinas. Este conflicto incluso llevó al Presidente español José Luis Rodríguez Zapatero a ofrecerse como mediador en el caso. En este contexto, permitirle a Telefónica ingresar al negocio de televisión paga podría ser utilizado por el Gobierno argentino para enviar una señal positiva hacia los inversores españoles e internacionales.
En resumen, parece existir un marco alentador para la marcha del mercado hacia la plena competencia en el mercado de servicios convergentes, una realidad ya en casi toda la región, a excepción de Argentina y México –en Brasil, con algunas trabas que parecen en vía de superación, el mercado de triple play está bastante más avanzado que en estas dos naciones-. Lo que aún no se percibe claramente es si el cambio en la regulación vendrá con la prisa de atraer inversiones, o con el ritmo pausado que se intenta imponer desde el plano político.
Fuente: Telesemana