Sí yo sé que ahora hay quienes dicen que fuimos unos hijos de puta por lo que hicimos con el viejo Casale, yo sé. Nunca falta gente así. Pero ahora es fácil decirlo, ahora es fácil. Pero habla que estar esos días en Rosario para entender el fato, mi viejo, que hablar al pedo ahora habla cualquiera.
Lo seguís leyendo acá...
NdR: Hoy por la mañana en las Señales pasamos el relato que Alejandro Apo hizo de este cuento años atrás en su programa de radio, lamentablemente cambió u omitió las malas palabras.