Por Roberto Aguirre*
Trabajadores del gremio de prensa de
Actualmente, los medios de comunicación de Bolivia se encuentran en manos de familias tradicionales vinculadas al campo, así como de grupos políticos vinculados a la derecha santacruceña. Así lo denunció en reiteradas oportunidades el presidente Evo Morales, víctima de numerosas campañas de prensa desde que asumió su cargo.
Según
El secretario ejecutivo de
La actual Constitución de Bolivia no hace mención alguna sobre el monopolio, por lo que
Desde la asunción de Evo Morales, un sector compacto de la prensa se ha dedicado sistemáticamente a boicotear cuanto proceso de cambio se ha gestado. Esto quedó cabalmente demostrado en un estudio que el Observatorio de Medios de APM, realizó en los meses de octubre y noviembre de 2006.
El trabajo se titula “La gestión de Evo Morales en la prensa boliviana”, y analiza con rigurosidad académica la cobertura periodística que cuatro diarios de ese país (Los Tiempos,
Las conclusiones determinaron, que “en general, las notas se tornaron agresivas, apuntando contra las políticas de gobierno de Morales desde varios ángulos: intereses de las empresas privadas, mal funcionamiento de las compañías adquiridas e incapacidad estatal para administrar los recursos nacionalizados, debilidad de Morales ante la “influencia” de los presidentes Hugo Chávez y Fidel Castro, poco diálogo con la oposición, cierto grado de “autoritarismo”, entre otros”.
Asimismo se determinó que, en la mayoría de los casos, las críticas se debían a intereses corporativos de los multimedios, como en el caso del Grupo PRISA (dueño de los diarios
El fenómeno de los monopolios mediáticos es un tema recurrente en toda América Latina, donde grandes empresarios estadounidenses y europeos son dueños de gran parte de las publicaciones gráficas, radios, televisión y sitios de Internet. En este sentido, se espera que la discusión al interior de
* Agencia Periodística del Mercosur, raguirre@prensamercosur.com.ar
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La Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz presentó la propuesta "Del régimen especial para una política comunicacional, propiedad de medios y recurso de ‘Habeas data en Bolivia’" para que sea tratada en la Asamblea Constituyente.
El documento destaca la necesidad de que Bolivia sea rediseñada, refundada e informada, pero esta vez en función de los intereses de las mayorías postergadas, para lo que se precisa la recuperación de las riquezas naturales, la independencia económica, la soberanía y la dignidad con miras a un sistema socialista y democrático de derecho.
La FTPLP reconoce al periodismo y a la comunicación social como instrumentos de lucha política e ideológica para marchar hacia un Estado gobernado por el pueblo y para el pueblo, en los marcos de la equidad, solidaridad, justicia y respeto a los derechos humanos.
"La línea política y de información de los medios de comunicación obedece a los intereses de los propietarios de los mismos y no a los trabajadores de la prensa y que mientras la comunicación e información son de importancia estratégica para la sociedad, la libertad de expresión es un patrimonio social del pueblo y no solamente de los profesionales del periodismo ni del usufructo de los propietarios de los medios de comunicación".
Propiedad de los medios
En el tema referido a la propiedad de los medios de comunicación en el país, el documento da cuenta que en la actualidad tienen carácter indefinido para los empresarios que hacen uso y abuso de los mismos con miras a preservar sus intereses de clase.
"El Estado tiene dominio original del espectro radiomagnético en su ámbito territorial y ejerce la potestad de otorgar concesiones a particulares (de orden individual o colectivo), o revertirlas de acuerdo a ley. Para este efecto el Estado reconoce y garantiza el control social", indica uno de los artículos.
"No es permitido el monopolio en los medios de comunicación, así como tampoco la vinculación especulativa de empresarios mediáticos con negocios de otra naturaleza que tengan evidente influencia y colusión de intereses", dice el documento.