El presidente de Boca, Daniel Angelici, blanqueó ayer su condición de lobbysta del conglomerado norteamericano Turner, al organizar una reunión en la AFA con dos directivos de ese holding, que quiere quedarse con la transmisión de los partidos de fútbol
La movida tendría un visto bueno de la Casa Rosada y habría tomado impulso tras el paso por el país del presidente Barack Obama, lo que enturbió las relaciones de Mauricio Macri con el grupo Clarín, también interesado en quedarse con el negocio.
With Richardson y Víctor Roldán, enviados de Turner, ingresaron ayer a la histórica sede de Viamonte 1366 de la mano de Angelici. Esta firma, que entre decenas de señales tiene la propiedad de la cadena CNN, quiere quedarse con los derechos de televisación del fútbol argentino que hoy tiene el programa estatal Fútbol Para Todos y además pretende lanzar un canal de deportes y la señal CNN Argentina, una vidriera ideal para el proyecto de Macri de reinsertar a la Argentina en el mundo.
Turner fue la cadena más cercana a Obama durante sus presidencias y coincidente con el viaje del presidente de Estados Unidos a la Argentina, sus directivos se reunieron con Marcos Peña para comentarle su plan de expansión en el país.
El encuentro de ayer no salió como se esperaba. Angelici sintió en carne propia las tensiones que la pelea por el negocio del fútbol está generando al interior de la AFA. Se suponía que todos los directivos de la institución escucharían a los enviados de Turner, pero el ala moyanista y otros pesos pesados le hicieron el vacío al presidente de Boca.
Sólo estuvieron el presidente Luis Segura; el secretario Adjunto, Damián Dupelliet y el presidente de Racing, Víctor Blanco, que como reveló LPO se alineó con el Gobierno que lo tentó con la posibilidad de respaldarlo para que reemplace a Segura.
Hugo Moyano, “Chiqui” Tapia y Nicolás Russo brillaron por su ausencia, al igual que el tesorero Matías Lammens, de viaje con San Lorenzo por la Copa Libertadores.
Este grupo resiste el intento de la Casa Rosada por definir cuanto antes quien se queda con el fútbol, para sacarse de encima un costo fiscal de 1500 millones. El moyanismo sostiene que primero hay que elegir al nuevo presidente de la AFA en las elecciones del 30 de junio y después convocar a una licitación abierta de los derechos del fútbol.
El gobierno convocó a los clubes a una reunión para el lunes, en la que Fernando Marín y Fernando de Andreis quieren bajarle el martillo a la situación y definir si licita el Gobierno o se espera que haya elecciones en la AFA. Necesitan resolverlo ya, para poder adjudicar a mitad de año.
Como sea, ayer Moyano mostró los dientes y pegó el faltazo. Adujo que la reunión que tuvo con las otras centrales sindicales con Macri, le restó tiempo. Su yerno Tapia, presidente de Barracas Central, dijo que tenía que viajar a Río por el sorteo de los Juegos Olímpicos y Russo ya con las excusas agotadas, optó por apelar al clásico e indefinido inconveniente de los “problemas personales”.
Ante una audiencia menguada, los enviados de Turner se limitaron a dar un panorama general de su proyecto, pero sin hablar de números.
Los otros candidatos
Fuentes de la AFA confirmaron a LPO que enviados del Grupo Clarín también tuvieron contactos con las autoridades de la AFA y se espera la definición de la cadena árabe Al-Jazeera, que llega de la mano del empresario uruguayo Paco Casal, socio de Enzo Francescolli, secretario técnico de River.
Pero aquí también hay un tema a tener en cuenta: a muchos dirigentes no les gusta que varios de sus colegas aparezcan con carpetas bajo el brazo. Así como a Angelici le enrostran a Turner, en el caso de Al-Jazeera señalan a Rodolfo D'Onofrio, presidente de River, como su operador.
D´Onofrio impulsa a Al-Jazeera para que se quede con el negocio del fútbol. La cadena árabe llegó de la mano del empresario Paco Casal, socio de Enzo Francescolli, secretario técnico de River.
Se suma a esto otro gran problema: Macri quiere garantizar el fútbol gratis hasta 2019, cuando se vence el contrato del FPT, para no pagar un costo político elevado. Por eso hoy Segura ratificó que seguirá siendo gratis, pero hay dudas que las cadenas paguen los miles de millones que necesita el fútbol, para no cobrar por la visualización de los partidos. Se sabe que sólo con la publicidad no alcanza a financiarse.
Sin embargo, fuentes del Gobierno confirmaron a LPO que tanto Al Jazeera como Turner están dispuestos a poner 200 millones de dólares por los próximos tres años y recién empezar a cobrar en el 2019. Claro que en ese caso, quieren los derechos hasta el 2030, para garantizarse el recupero de la inversión. También plantean la comercialización desde ahora de los contenidos en la web, teléfonos y en el exterior.
En ese contexto, Segura y su entorno hoy manejan tres chances: que el Gobierno licite por su cuenta los tres años que le quedan de contrato y siga pagando (poco probable), que las dos partes se pongan de acuerdo para hacerlo, o que de común acuerdo se rescinda el convenio para que los derechos vuelvan a la AFA y ésta los licite por su cuenta.
Claro, ninguna de estas chances está avalada por el ala mayonista, que insiste con dejar todo como está hasta fin de junio para luego mover las piezas. La tensión es tal que el núcleo más duro del moyanismo amenaza con pegarse otro faltazo en la reunión del lunes.
Foto: DyN
Fuente: La Politica Online