La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó hoy el secuestro del periodista francés Roméo Langlois, ocurrido el pasado 28 de abril en una zona de conflicto en territorio colombiano, presuntamente a manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y exigió su liberación.
Langlois había viajado a ese lugar como corresponsal de la cadena de televisión France 24 junto a un contingente militar y policial que se había movilizado por vía aérea para una operación antidroga.
Al parecer, el periodista se separó de las tropas y se dirigió hacia la parte en la que estaban los insurgentes.
Precisamente hoy, un mensaje telefónico de una supuesta rebelde atribuyó a las FARC la retención como "prisionero de guerra" de Langlois.
"Esta organización ilegal se había comprometido a no volver a cometer secuestros. La Relatoría Especial considera fundamental que la vida, integridad y libertad del periodista sea respetada de manera irrestricta y exige que sea liberado de manera inmediata", dijo la Relatoría en un comunicado.
La CIDH ha especificado que los periodistas independientes que cubren situaciones de conflicto armado, pese a exponerse a riesgos derivados del conflicto, no pierden por ello su condición de civiles, y por lo mismo continúan amparados por las garantías aplicables del derecho internacional de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario.
El caso del periodista francés ha cuestionado si los rebeldes incumplen la decisión de su mando central de proscribir el secuestro de civiles con fines económicos.
El Secretariado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lo hizo saber así a finales de febrero, cuando también anunció su decisión de poner en libertad de una vez a los últimos diez militares y policías que seguían en sus manos como rehenes.
Los entonces cautivos, que llevaban entre trece y catorce años secuestrados, fueron entregados el 2 de abril a una misión humanitaria coordinada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y con apoyo logístico del Gobierno de Brasil.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a fin de estimular la defensa hemisférica del derecho a la libertad de pensamiento y expresión, considerando su papel fundamental en la consolidación y el desarrollo del sistema democrático.