En el Olimpo de los inmortales de la literatura, en el que solo están los que sobrevivieron a su propia muerte, solo un colombiano tiene asiento: Gabo.
No se trata de una afirmación llena de parroquialismo, ni un intento de megalomanía en un país donde abunda el complejo de inferioridad. Este hombre, que el próximo 6 de marzo cumplirá 80 años de haber nacido en Aracataca, es el único colombiano que los niños de Pakistán, Rumania, Italia o Estados Unidos son capaces de citar.
Sus propios colegas no temen ponerlo al lado de William Shakespeare, Marcel Proust, el propio Miguel de Cervantes o James Joyce. Un reciente sondeo de algunos diarios europeos en busca de los escritos -incluía poesía y cuento- más importantes de la historia ubicó en el lugar
La estatura literaria de Gabo parece un espejo de sus libros. Un inmortal caminando por las calles de Zipaquirá. Un hombre que fue capaz de elevarse, como Remedios
García Márquez extiende su sombra por todo el país y en todos los planos: la poesía, el cine, la televisión, la política, la música. Nombrarlo deja bien librados a todos, inclusive a las reinas de belleza que suelen invocar su obra para quedar bien con el jurado.
No es gratuito, por tanto, que
Ahora, como Gabo no es un patrimonio exclusivamente de estirpe hispanoamericana, el mundo también se une a este homenaje. No es casualidad que Hollywood, con toda su parafernalia, se fije en la obra de este colombiano y designe a un director como Mike Newell, director de taquillazos como 'Cuatro bodas y un funeral' y 'Harry Potter y el cáliz de fuego' para hacer un filme sobre su obra. Ellos, que conocen como nadie los alcances de la cultura global, saben que el sello de Gabo es garantía en cualquier parte del mundo.
Por eso, es una oportunidad invaluable, de realismo mágico, poder celebrar el cumpleaños 80, los 60 años de su primer cuento, los 25 del premio Nobel y los 40 de publicación de Cien años de soledad a este colombiano universal. Un cumpleaños múltiple, que solo alguien como Gabo pudo inventar.
Así celebra Aracataca los ochenta años del Nobel Gabriel García Márquez
El regalo que le deja el cumpleaños de Gabo a su pueblo es la reconstrucción de la casa natal del escritor por parte del Ministerio de Cultura.
La fiesta comenzó el sábado. Ese día, Emiro Camargo, después de 12 días de trabajo sin descanso, le dio los últimos toques a un mural de
Desde entonces, una programación folclórica y cultural, parecida a la misma fiesta patronal, tiene en alto el entusiamo del pueblo. No faltan los voladores, serenatas, presentación de agrupaciones musicales, conferencias, festival del retorno, torta, desfiles militares y hasta misas.
A unas dos cuadras de donde se encuentra Emiro está Nazario Enrique Rodríguez, el único voceador de periódicos que tiene Aracataca. Dice que la noticia grande es el tema de la 'parapolítica', pero en el pueblo la bomba es el cumpleaños de Gabo. "Apenas salga se venden por lo menos 500 periódicos".
Y es que en el municipio no se habla de otra cosa que no sea el cumpleaños del escritor. "Llevamos 27 años esperando el regreso de Gabo. Es más importante que cualquier presidente", asegura.
Aracataca ya no es la aldea polvorienta llena de silencio y de muertos que describió Gabo. Ahora es un pueblo ruidoso y alegre, donde las notas de acordeones salen de los patios de la casas, y al que después de cien años de soledad comienzan a llegarle las obras.
Para el alcalde, Pedro Sánchez, la frase mágica que le ha abierto muchas puertas es cuando dice: "Soy el alcalde del único municipio que ha parido un Nobel". Esto le ha servido para que desde el presidente Álvaro Uribe para abajo le ayuden en su administración.
Es así como acudiendo al nombre de Gabo, como él mismo lo dice, el gobierno le ayudó con 3.600 millones de pesos para la construcción del acueducto y por fin los cataqueros puedan tomar agua potable. En convenio con México se construye el camellón de Los Almendros. Y dentro de poco se iniciarán los arreglos de la casa materna. La vieja construcción de zinc y paredes de madera fue adquirida en 1910 por su abuelo materno, el coronel Nicolás Márquez Mejía, quien llegó a Aracataca a ejercer el cargo de recaudador de impuestos. En 1983 fue adquirida por el gobierno de Belisario Betancur y, luego, declarada monumento nacional.
Desde ese tiempo solo ha tenido una reparación. Hoy, el comején y las grietas en el piso, producidas por las raíces de un árbol, amenazan con tirarla abajo.
Al son de la fiesta
Hoy Aracataca despertará con 80 cañonazos para celebrar el cumpleaños 80 de Gabo.
A las 5 de la madrugada, con una serenata de mariachis y una alborada con papayera, comienza el día cívico.
En los establecimientos públicos solo se podrá escuchar música alusiva al escritor.
Para que el festejo dure hasta el amanecer del miércoles, se levantó 'la hora zanahoria'.
Fuente: Diario El Tiempo, Foto DW.