Siendo visibles y haciendo visibles las posibilidades de accesibilidad. La Secretaría de Discapacidad de la CTA estuvo ahí.
Por Juliana Ramírez*
Pasadas las 18.00 el auditorio del ND Ateneo ya casi tenía todas sus butacas y pasillos ocupados. A un costado, la murga de los Rengos del Bajo aportaba color y tambores. En el escenario, los locutores de la Colifata, Hugo López y Ofelia y representantes de la Comisión Nacional Asesora para la Integración de Personas con Discapacidad (CoNaDis), de la Secretaría de Medios de Comunicación de la Nación, del Comité Federal de Radiodifusión (ComFeR) y de la Comisión de Discapacidad de la Cámara de Diputados, entre otros, se preparaban para empezar. Había expectativa.
“La organización de este encuentro estuvo en manos de las organizaciones” abrió Néstor Piccone, secretario de Medios de la Nación, destacando la realización de foros en todo el país donde se discuten y se reciben aportes a las modificaciones del ante proyecto de ley que propone dejar atrás la Ley de Radiodifusión de la Dictadura. Y celebró el encuentro como el inicio de un espacio de construcción. En este sentido, Alfredo Bértola, asesor del ComFeR y uno de los organizadores del encuentro, resaltó la importancia de que las personas con discapacidad sean parte de esta Ley. “Aplaudo la decisión política de llevarla adelante y el trabajo de las personas y de las organizaciones sociales que vienen luchando hace años para conseguir esto. Estamos casi todos representados y espero que esto siente precedente para continuar la lucha que estamos llevando adelante”, afirmó.
En referencia al artículo de la nueva Ley que vincula los medios y la discapacidad, Bértola, especificó “hace unos años resultaba desconocido hablar de audio descripción y ahora estamos a instancias de que se concrete. Lo mismo pasa con el subtitulado oculto (close caption) que estamos discutiendo la cantidad de horas al aire”.
El subtitulado oculto y la audio descripción son los puntos que plantea el Artículo Nº 57, argumentando que “tiende a satisfacer las necesidades comunicacionales de personas con discapacidades auditivas que no solamente pueden ser atendidas con lenguaje de señas, ya que en programas con ambientación ellas resultan evidentemente insuficientes”. Por ejemplo, habría que subtitular si se escucha un trueno, si hay personas que están hablando fuera de cámara, si oyen la radio, etc, así como poder diferenciar el subtitulado con colores según quién hable. En el mismo sentido, la audio descripción apunta a satisfacer las necesidades de comunicación a las personas con discapacidad visual. Todas las formas de aplicación tienen normas y pueden ser muy variadas. También cabe considerar la que plantea adaptar los contenidos para las personas con discapacidad mental, considerando su situación de adultos.
En representación de la Comisión de Discapacidad de la Cámara de Diputados, estuvo Claudio Morgado, quien dejó en claro que estos puntos además de ser parte de esta nueva Ley, están impulsados y avalados por la Convención Nacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que nuestro país ratificó por Ley 26.378 el 6 de junio de 2008. Y destacó el lugar que allí ocupa la comunicación que “incluirá los lenguajes, la visualización de textos, el Braille, la comunicación táctil, los macrotipos, los dispositivos multimedia de fácil acceso, así como el lenguaje escrito, los sistemas auditivos, el lenguaje sencillo, los medios de voz digitalizada y otros modos, medios y formatos aumentativos o alternativos de comunicación, incluida la tecnología de la información y las comunicaciones de fácil acceso. Por “lenguaje” se entenderá tanto el lenguaje oral como la lengua de señas y otras formas de comunicación no verbal”.
También nombró el artículo Nº 30 que plantea el acceso a programas de televisión, películas, teatro y otras actividades culturales en formatos accesibles.
Las barreras
La iniciativa para que se utilizara el subtitulado oculto por todos los canales de aire del país, ya la había tomado la Cámara de Diputados y fue emitida por resolución del ComFeR. Sin embargo, como explicó Morgado “fue muy complicado que esto se pudiera ejecutar porque enseguida hubo entidades relacionadas con los medios privados que se opusieron terminantemente por los costos”. A lo que respondió que dicho valor no representa ni el 1 por ciento de la facturación de un programa medianamente comercial, “en realidad estamos hablando de que nadie quiere hacerse cargo” y además recordó que “la resolución 953 de 1999 exime impositivamente a toda compra de material tecnológico que tenga que ver con discapacidad. Entonces habría que preguntarles a estas personas que representan medios privados, si cumplen con el 4 por ciento del cupo para personas con discapacidad porque el espectro radioeléctrico es público ¿Alguno cumple? En canal 13 no lo ví, en Telefe menos”.
Cabe considerar que tanto la aplicación del close caption como de la audio descripción no requiere de alta tecnológica. Desde 1999 hasta ahora todos los equipos están equipados para tener estos sistemas.
La CTA estuvo presente
Con la firma de Juan Carlos Giuliani, secretario de Comunicación y de Carlos Ferreres, secretario de Discapacidad, la CTA adhirió al encuentro considerando que:
- Hay que garantizar el acceso de las personas con discapacidad a los medios de comunicación en un marco de igualdad de posibilidades y oportunidades, atendiendo a las condiciones necesarias para una efectiva integración.
- La integración de las personas con discapacidad a los medios de comunicación debe producirse de manera transversal. La temática de la discapacidad no debe reducirse a programas, segmentos o columnas “especiales”. Este tipo de división genera un grupo aislado que trata la problemática como exclusiva pudiendo provocar rechazo, o sea reproducir la invisibilidad.
- Porque de nada sirve hablar o reivindicar la Igualdad si no se la practica, porque la discapacidad no es un tema ó un problema que sólo debe preocupar a estas personas, sino al conjunto del pueblo, es que celebramos esta convocatoria y bregamos por un nueva Ley de Radiodifusión que integre y afirme el derecho a ser parte en igualad de condiciones.
