Desde "La Hendija" se realizará un viaje por todo el país. |
En cuanto a la propuesta, los integrantes de Arriba la Luna manifestaron que, “El movimiento Arriba la Luna está formado por comunicadores y artistas que buscamos integrar nuestras prácticas coordinando en este emprendimiento la producción audiovisual, radial y gráfica, la investigación militante, el arte y la educación popular. Desde hace más de un año, cuando iniciamos la radio, nos dedicamos a registrar estos movimientos sociales. En esta etapa, dada la importancia del momento que vivimos y la necesidad de aprender de otras experiencias culturales, hemos diseñado un mapa de las comunidades indígenas de Argentina, de los conflictos ambientales en todo el país y sus resistencias civiles, y de espacios de resistencia cultural, como algunas coordenadas posibles para comenzar esta comunicación nómada.
Para esta primera etapa de encuentros, enviamos nuestra iniciativa al aire y nos respondieron movimientos de diferentes lugares. Con estas primeras comunicaciones, junto a nuestra propia investigación y las preguntas que llevamos con nosotros, diseñamos un mapa de los puntos más importantes de este viaje:
Ongamira, Valle de Punilla, Córdoba: En Ongamira, y en toda la zona del Valle, las empresas trasnacionales están haciendo pruebas y exploraciones mineras. Allí se encuentran pepas de oro del tamaño de una pelota de fútbol, pero debajo de las montañas, lo que obliga, como en tantos lugares del país, a “volarlas” y arrojar a los ríos grandes cantidades de cianuro y otros elementos altamente contaminantes. Habitantes de esta región se han organizado en asambleas, tomando el aprendizaje de muchas experiencias desde el 2002. En esta ruta de la cordillera y precordillera, se encuentran tantas exploraciones como resistencias de las poblaciones y los movimientos campesinos.
Junín de los Andes, Neuquén: En el río incansable de las noticias diarias, necesitamos crear algunos puentes, mirar algunas insistencias. Esta pequeña localidad aparece muchas veces: la creación de una escuela autónoma mapuche, encuentros de comunidades, recuperaciones de tierras, medios de comunicación mapuche, y una radio comunitaria de FARCo, la Che Comunitaria que nos hizo la invitación para compartir las experiencias.
Esquel, Chubut: Aquí nació, tal vez, la nacionalización de las asambleas ambientales. La asamblea ciudadana de Esquel logró frenar un emprendimiento minero de gran escala con la lucha de su población, incluyendo una consulta popular que confirmó el rechazo del pueblo de Esquel hacia el negocio del oro a costa de su salud y el despojo. Es, además, un lugar central para intercambiar con otras comunidades indígenas, resistencias civiles y recuperaciones de tierras.
La crisis social, política y económica ha ido dejando un espacio vacío. Sea porque el Estado y los empresarios han dejado a su suerte a distintos sectores de la población y ésta ha tenido que apañársela por sus propios medios. O porque la crisis de legitimidad ha llevado a cada vez más amplios sectores de la población a cuestionar fuertemente las instituciones vigentes.
Simultáneamente, en los últimos 10 años se han desarrollado en el país un heterogéneo y amplio número de movimientos sociales “autónomos”. Esta autonomía comprende dos aspectos centrales:
- Cuestionamiento de las instituciones que históricamente han manipulado sus intereses.
- Surgimiento de prácticas autogestivas y autoorganizativas que permiten desarrollar sus propias capacidades de acción autónoma.
Este doble proceso de crisis por arriba y cuestionamiento por abajo tuvo su máxima expresión en el período 2001-2002. Allí fue total la crisis social, política y económica. Y por otro lado, se extendieron fuertemente los movimientos sociales.
Esto no es menor, porque pese a lo trágico de la situación, la emergencia de nuevos actores ha permitido un cambio en la correlación de fuerzas del país, evitando una salida fuertemente represiva y, por el contrario, instalando en la agenda del gobierno emergente cuestiones que han sido reivindicadas por décadas por movimientos civiles y de derechos humanos.
Luego de ese período, se dio un proceso de recomposición política y económica que tiene ciertas características particulares:
- En lo económico-social se ha logrado una reactivación, que si bien ha mejorado relativamente la situación económica de los sectores populares en relación a lo peor de la crisis, no ha revertido la situación social vigente del modelo neoliberal. Los distintos indicadores sociales siguen dando cifras tristes; la pobreza, la indigencia, siguen siendo generalizadas. Por el contrario, los grandes ganadores de la reactivación han sido los sectores más concentrados, lo cual puede evidenciarse en la ampliación de la brecha entre el sector más rico y el más pobre de la población.
- El panorama con respecto a la sustentabilidad de este modelo es cuestionable, en tanto se asienta básicamente en un contexto de altos precios de las materias primas agrícola-ganaderas.
- El modelo de crecimiento tiende a reactivar la conflictividad social en el mediano plazo: en tanto la inflación está generando, y generará aún más, conflictos laborales; y, en tanto, la expansión de la explotación de recursos naturales a cualquier precio genera fuertes procesos de resistencia de poblaciones de campesinos e indígenas expulsados de sus tierras por la agroindustria, por la minería, avalados por la indiferencia y la desinformación de grandes mayorías.
- En lo político la recomposición ha reconcentrado el poder en los mismos grupos políticos que habían sido cuestionados por el conjunto de la población. El gobierno ha sabido cooptar a determinados sectores incorporándolos como funcionarios, pero con escaso margen de maniobra para realizar políticas sociales alternativas y afectar el rumbo de la política en general que sigue en manos de los sectores más poderosos. Simultáneamente, el gobierno ha operado para dividir, aislar, reducir y reprimir a los sectores que buscan sostener una construcción autónoma.
La existencia de movimientos sociales autónomos es fundamental para el desarrollo y el sostenimiento de la democracia, a nivel político y social. Así mismo, las organizaciones de base son fundamentales para la democratización de los medios de comunicación.
Es importante en este contexto señalar el rol que ha tenido el campo comunicacional. Los grandes medios de comunicación fueron una de las instituciones fuertemente cuestionadas en la crisis de 2001. Jugaron un rol de estigmatización de los movimientos sociales incluso participando de episodios de represión orquestados por el gobierno (ver caso 26 de junio). Cabe destacar que no es menor su rol siendo que son uno de los grupos económicos más poderosos del país, con intereses específicos. La comunicación en Argentina está fuertemente concentrada y cumple un rol regresivo.
Algunos movimientos sociales desarrollaron en ese momento distintas herramientas comunicativas alternativas que han sido vitales para su desarrollo. Sin embargo, cabe destacar que estas herramientas no están en manos de todos los grupos, pese a lo fundamental que son en el contexto señalado. Dadas las características esenciales de los movimientos autónomos –su surgimiento espontáneo, disperso y alejado de fuentes de financiamiento y de formación-, estos, al surgir, no cuentan con visibilidad. El objetivo no sería incorporar estos movimientos al Estado, sino promover la autonomía de estos movimientos haciéndolos cada vez menos dependientes.
Nuestro propósito es aprender juntos, compartir este viaje como una búsqueda colectiva y abierta. Por esto, queremos lanzar esta campaña para la financiación de transporte, insumos técnicos para el registro audiovisual y gastos de producción. Esperamos que se comuniquen con nosotros para encontrar la manera de hacer llegar su colaboración”.
Para esto estará a disposición el teléfono móvil 3 de la radio para comunicarse con los programas o con estas comunidades: 0343-156 204035. Además, está disponible la página de la radio para escribir y ver imágenes y videos, escuchar los audios y participar; en el estudio habrá atención también para las salidas en vivo.
El equipo que viajará esta formado por Federico Fumiato, Cecilia Solíz, Fernando Ponce, Laura De Bernárdez, Sergio Sánchez, Fernando Katz, El Pinchadiscos, Ana María Raiet Parvert y Germán Vicentín.
Para colaborar escribir a: arribaluna@gmail.com, o llamar al tel: 0343 4228906 - 156 204035