martes, 12 de julio de 2016

Importante victoria de los trabajadores de prensa de Clarín - AGEA

El viernes terminaron por fin los 104 días de espera de Alejandro. Ese día, volvió a reintegrarse a su trabajo. Ese día, los trabajadores le ganamos una batalla a los sectores autoritarios y represivos de la empresa
El 31 de marzo, Clarín había decidido dejar de llamar a trabajar a Alejandro Ontivero tras 11 años ininterrumpidos. Es que acababa de ser elegido delegado de sus compañeros en una elección realizada por el Sindicato de Prensa Buenos Aires (SiPreBA). Un evidente caso de persecución gremial.

A la empresa se le ofreció incesantemente una negociación, pero sus representantes de RRHH decidieron que lo mejor para lidiar con el normal derecho de organización de sus trabajadores es reprimirlo. Claro, Alejandro, además de representante gremial, es un padre de familia con 9 hijos.

Nada de eso importa cuando se defiende el privilegio de someter a la esclavitud a sus propios trabajadores, a través de 12 años de contratos diarios, sin efectivizarlos.

Sin embargo, gracias al apoyo de muchos compañeros y una asamblea organizada logramos dar difusión a la situación, ejecutamos medidas de protesta y con colectas ayudamos a sostener la lucha de Alejandro, que es la de todos.

También fuimos a la Justicia. El 3 de mayo, el Juzgado de Trabajo Nº 4 dictó una cautelar de reinstalación. Como el diario no la cumplió, estableció una multa diaria de $5.000 hasta que se hiciera efectiva. Acorralada, la empresa debió someterse a los derechos constitucionales.
Agradecemos el apoyo del SiPreBA, tanto para sostener financieramente al compañero, como por el aporte del excelente abogado Guillermo Gianibelli, a quien le estamos por siempre agradecidos.

La lucha continúa ahora y los objetivos son claros: la efectivización y el respeto de los fueros de Alejandro como lo que es, un delegado de sus compañeros. Luego, el fin del trabajo esclavo en la planta de impresión.
Comisión Interna de AGEA-Clarín
De la FATPren
La Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPren) saluda a la Comisión Interna de Clarín/AGEA y a todos los trabajadores, por la incansable lucha que vienen llevando a cabo ante semejante patronal autoritaria y represiva. El pasado viernes 8 de julio, tras 104 días, lograron la reincorporación del trabajador Alejandro Ontivero, del sector de expedición; ahora seguirán luchando por la plena efectivización.

A fines de marzo, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) realizó las primeras elecciones de delegados en la planta impresora de Clarín –ubicada en Zepita 3220, CABA-, donde fueron elegidos Alejandro Ontivero y Diego Bruschini. Desde el primer momento la empresa trató de impedir las elecciones: no cedió lugar ni padrón, y hasta amenazó a los trabajadores con represalias; tal como lo quiso implementar contra Alejandro, dejándolo de llamar a trabajar tras 11 años ininterrumpidos.
Los trabajadores además fueron a la Justicia, acompañados por el abogado Guillermo Gianibelli. El 3 de mayo, el Juzgado de Trabajo Nº 4 dictaminó una cautelar de reinstalación, sin embargo la imprenta decidió desconocer la resolución, y no dejar entrar al trabajador elegido recientemente delegado lo cual deja establecido la persecución gremial dentro de la empresa. Según informó la Comisión Interna, “Como el diario no la cumplió, -el Juzgado- estableció una multa diaria de $5.000 hasta que se hiciera efectiva. Acorralada, la empresa debió someterse a los derechos constitucionales”.

“Gracias al apoyo de muchos compañeros y una asamblea organizada logramos dar difusión a la situación, ejecutamos medidas de protesta y con colectas ayudamos a sostener la lucha de Alejandro, que es la de todos”, afirmaron.

Y concluyeron: “La lucha continúa ahora y los objetivos son claros: la efectivización y el respeto de los fueros de Alejandro como lo que es, un delegado de sus compañeros. Luego, el fin del trabajo esclavo en la planta de impresión”. La FATPren se solidariza y acompaña la lucha de las y los trabajadores de Clarín, y exige a la patronal efectivizar a los trabajadores de la planta impresora tal como lo establece el Estatuto del Empleado Administrativo de Empresas Periodísticas (Ley 12.921).