martes, 3 de mayo de 2016

Día Mundial de la Libertad de Prensa: Sin democracia informativa

Cada 3 de mayo se renueva el compromiso internacional con la libertad de prensa. Este año el lema es atender al Acceso a la Información y a las Libertades Fundamentales
Ante un nuevo 3 de Mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, el Sindicato de Prensa Rosario considera importante señalar el difícil momento por el que atraviesa la Argentina en materia de democracia informativa y de las posibilidades de acceso a los medios de comunicación por parte de amplísimos sectores de la sociedad.

Hoy, más que nunca, el llamado anual que la UNESCO hace para que los países miembros reflexionen en esta fecha sobre los temas relacionados con el periodismo, la información y la comunicación, resulta una convocatoria casi estéril en el contexto de feroces guerras mediáticas como las que viven los pueblos latinoamericanos y caribeños, como otros tantos del mundo.

La información es un derecho humano y un bien social. Cuando los distintos sectores y actores sociales que conforman la vida y la esencia del país pueden apropiarse de la información, ese acto se transforma en recursos para los habitantes, en conocimientos para elaborar opiniones, realizar elecciones, tomar el timón de la propia vida y decidir hacia qué futuro se quiere ir. Cuando por el contrario la información está en manos de comerciantes que le dan a este derecho el valor de una mercancía, esos mismos sectores y actores sociales terminan desinformados y carecen de los datos, del relato de los hechos con apego a la realidad que les permitirían construirse a sí mismos con un profundo espíritu crítico. Para achicar la distancia entre esas dos situaciones, que siempre perjudican a quienes no tienen el poder económico para poseer medios de comunicación, el Congreso de la Nación aprobó en 2009 la Ley de Servicios de Comunicación  Audiovisual (LSCA), que ponía un cierto límite al monopolio en materia de comunicaciones y permitía el desarrollo de medios comunitarios, sociales cooperativos, provinciales, municipales y en manos de universidades, posibilidades que acercaban el desarrollo de comunicaciones populares y con el sentido de profundo servicio social. Por eso la ley despertó gran interés en la sociedad que participó, como nunca antes lo había hecho en la discusión  de una norma jurídica y en el enriquecimiento de su texto que, además, receptó todos los pactos internacionales y continentales en materia de derechos humanos.

La LSCA nunca pudo ser aplicada en todos sus términos, justamente por las trabas judiciales que las corporaciones de medios instrumentaron de manera abusiva para sostener sus privilegios. Esta misma ley se transformó en coto de caza, en uno de los logros que debían anularse según la concepción del gobierno que accedió a la Presidencia nacional a partir del 10 de diciembre pasado: entonces no era buena la legislación a favor de que la sociedad estuviera más informada. De allí que al día siguiente de su asunción, el Presidente Mauricio Macri fue por la LSCA y a través de un decreto de necesidad y urgencia desarmó  el núcleo duro de la norma y re legitimó el poder del  monopolio. A partir de ahí las acciones y expectativas llevadas adelante por la Autoridad  Federal de Servicios de Comunicación  Audiovisual (AFSCA), en la búsqueda del avance hacia la pluralidad de voces, quedaron paralizadas.

En el último mes, el Poder Ejecutivo Nacional envió para su tratamiento en el Congreso, un proyecto de ley de Acceso a la Información pública –un reclamo antiguo del Sindicato de Prensa Rosario. Ese proyecto,  representa más una formalidad que una vocación por la transparencia: la persona encargada de velar porque los preceptos de esa transparencia se cumplan será designado, de transformarse en ley, únicamente por el PEN, negando en definitiva el ejercicio efectivo del derecho que pretende legislar.

Por eso en este 3 de Mayo, el SPR habla de falta de democracia informativa y expresa que es imprescindible sostener las conquistas que la LSCA contuvo en su texto original, para que la información constituya un medio que permita el crecimiento y la profundización de la democracia, para que todos los derechos, en  esencia y alcance, puedan ser conocidos y ejercidos en cualquier rincón del país, y cada vez más voces puedan ser escuchadas. No es este día una jornada para festejar, sí para reclamar porque la libertad de expresión y el derecho a la información no pueden invocarse vaciadas de contenido y cuando existen tantas voces acalladas.
Comisión de Libertad de Expresión y Formación Profesional
Sindicato de Prensa Rosario
Federación de Trabajadores de la Cultura y la Comunicación (FeTraCCom)