martes, 17 de febrero de 2015

Telefónica se queda con los derechos televisivos del Barça por 180 millones de euros

El club vende sus derechos televisivos por 140 millones a Telefónica, que se convierte en nuevo socio en Latinoamérica
Por: Carles Ruipérez
La junta directiva del Barcelona deshojó una de las margaritas que le quedaban esta temporada, antes de las elecciones anticipadas.
El Barça decidió cambiar de operador televisivo y vender las retransmisiones a Telefónica para la temporada que viene a razón de 140 millones, la misma cantidad que ha cobrado las dos últimas campañas de su anterior proveedor, Mediapro. La decisión no es baladí pues el contrato por los derechos televisivos del Barcelona supone la mayor fuente de ingresos del club por parte de un único socio, muy por encima de lo que el Barcelona obtiene de Nike por ser el patrocinador deportivo y de Qatar Airways por la publicidad en la camiseta, cuyas aportaciones rondan ambas los 30 millones por año. Para la temporada 2015-16 ese socio ya no será Mediapro, compañero de viaje en los últimos siete años, sino Telefónica, que desde la obertura de Movistar TV ha desembarcado ya en los Mundiales de motociclismo y de la fórmula 1.
El contrato es sólo por un año ya que en 2016 debería entrar en vigor un decreto que está preparando el Gobierno. La nueva ley acabará con los pactos individuales y obligará a la Liga Nacional de Fútbol Profesional (LFP) a una negociación centralizada de los derechos de explotación con un reparto más equitativo, como ocurre en la Premier. Sin ir más lejos, la liga inglesa cerró la semana pasada un paquete por 6.900 millones por tres temporadas, por repartir entre todos.
Por el curso que viene, el Barcelona cobrará 140 millones, que es el máximo permitido por la LFP. Ya que todo lo que supere ese montante debe ir a parar a un fondo común y repartirse entre el resto de los equipos de Primera.
Por eso, las ofertas de los dos operadores en liza eran similares económicamente en el ámbito televisivo, según fuentes que han intervenido directamente en la negociación.
Llegados a ese punto, la motivación del Barça para decantarse por Telefónica ha sido estratégica pues al club le ha interesado asociarse con la tercera empresa de telecomunicación del mundo.
“Es una cuestión de marketing y de mercado”, explicaron a este diario desde la entidad blaugrana. En ese sentido, en la reunión de la junta también se acordó otro contrato para que Telefónica sea patrocinador oficial en toda América Latina, desde México hasta Argentina. La alianza tiene una duración de tres años, en los que el Barça cobrará 13,3 millones cada ejercicio. Además, el acuerdo podría ampliarse a dos temporadas más.
La introducción en Latinoamérica completa la expansión del Barcelona en un continente en el que el club, que sí ha entrado en Europa, Asia y África, apenas ha trabajado hasta la fecha, más allá de tener dos socios puntuales en México y Brasil. Gracias al pacto, Telefónica, y sus filiales Movistar y Vivo, podrá rodar anuncios en los que participen los jugadores sudamericanos del primer equipo, como los tres delanteros Leo Messi, Neymar y Luis Suárez, o el portero Claudio Bravo.
“El presidente me ha llamado para anunciarme su decisión y se ha escudado en que no nos perjudica mucho porque sólo es por un año”, explicó en 8 al día Jaume Roures, presidente de Mediapro, que no perdió la esperanza de seguir siendo el operador hasta el final. Incluso el pasado domingo 8 de febrero viajó a Bilbao con el avión de la expedición del equipo blaugrana para departir con el presidente, Josep Maria Bartomeu, y el vicepresidente económico, Javier Faus. “Nuestra oferta era económicamente superior y también desde el punto de vista de la expansión internacional”, aseguró el propio Roures.
De hecho, los contratos se apalabraron con Rosell y el pasado septiembre incluso estaban redactados. Sólo hacía falta fijar una fecha para la firma. Pero entonces Bartomeu recibió una llamada de Telefónica y decidió que quería escuchar a todas las partes. Han sido Fausyel antiguo director general, Antoni Rossich –que con esta misión termina su vínculo con el club–, los que han pilotado la negociación de los derechos televisivos.
Por el contrato, el vicepresidente Manel Arroyo no intervino en la toma de decisión final al tener negocios personales con Telefónica.
Después de retocar el organigrama de ejecutivos del club y de intervenir en el área deportiva, donde rescindió el contrato del director deportivo (Zubizarreta), creó una comisión técnica (Rexach, Braida, Mestre y Bordas) y destituyó al entrenador del filial (Eusebio), el presidente agita el apartado económico con la búsqueda de un nuevo gran socio como Telefónica. Con esta decisión, Bartomeu también rompe con el pasado, pues fue Laporta en 2006 quien firmó el primer gran contrato con la compañía de Roures, por 1.000 millones en siete años. Ese acuerdo se mejoró en 2010, antes de las elecciones, y se renovó en 2011 con Rosell ya en la presidencia. Entonces, una de las contrapartidas fue la externalización de Barça TV.
Con el nuevo acuerdo, la gestión técnica y la producción de contenidos del canal oficial del Barcelona también cambia de manos y pasa de Mediapro a Telefónica, que ha aceptado hacerse cargo de los gastos de la televisión.
El club blaugrana era el único equipo que faltaba por posicionarse en la nueva pugna por los derechos del fútbol. Con su elección, Movistar TV, además del Barça, tendrá los partidos del Espanyol, el Celta y la Real Sociedad, mientras que Mediapro controla 16 equipos de Primera, entre ellos el Madrid y el Atlético. No deja de sorprender que los dos clubs barceloneses hayan firmado con la empresa no catalana.

Las presiones de Qatar
El acuerdo para la venta de los derechos televisivos del Barça abarca formalmente una sola temporada pero su trascendencia va más allá, tiene un carácter estratégico, como han puesto de manifiesto las intensas negociaciones mantenidas con los dos operadores interesados.
El que ha quedado descartado, Mediapro, ha contado con el apoyo incondicional de la empresa qatarí especializada en inversiones en el ámbito deportivo internacional, Qatar Sports Investments (QSI).
Los más altos responsables de la firma, presidida por Nasser Ghanim Al-Khelaifi, han expresado a lo largo de las conversaciones en numerosas ocasiones a los directivos del Barça su preferencia por Mediapro. A través de QSI el Barça alcanzó el acuerdo de esponsorización de la camiseta por la Qatar Foundation.
Esto se ha producido mientras los responsables del área económica de la junta comenzaban las negociaciones previas para la renovación del patrocinio de la camiseta y, también, la posible financiación de la remodelación del Camp Nou, con la incorporación del nombre.
Y en la recta final, estos dos últimos días, los directivos qataríes han reforzado su presencia.
Ayer mismo, durante la celebración de la junta directiva en la que se formalizó la elección de la oferta de Telefónica, el presidente del club, Josep Maria Bartomeu, recibió nuevas llamadas de los responsables de QSI, que posee también el 100% del París Saint-Germain, club que preside Nasser Ghanim Al-Khelaifi.
Fuentes: La Vanguardia, Sport