viernes, 3 de enero de 2014

Despido en La Voz del Interior: “Si no me quieren, todo bien; pero paguen lo que corresponde y no ensucien a la gente”

Hugo Caric, recientemente despedido de La Voz del Interior, escribe su verdad sobre el hecho. Necesita que todos conozcan la cronología de una discusión que derivó en su despido, primero “con causa”, pero que ahora la empresa morigeró comunicándole que “pensara una solución que “nos convenga a las dos partes”
La duda que queda que flotando es: ¿A Caric le inventaron una causa para despedirlo? Todos los indicios así lo indican por lo tanto es “un antecedente gravísimo para todos”, como muy bien lo explica el compañero en la nota.
Ante todo, el deseo de un muy feliz 2014 para todos. En mi caso, envuelto en una situación que todavía no alcanzo a entender, y que paso a contarles para ver si puedo encontrarle alguna respuesta lógica y satisfactoria.
El 14/12 mantuve una discusión laboral con el subencargado de la sección Deportes de La Voz del Interior (dos personas discutieron, dos personas se levantaron la voz, una persona -Yo- ofreció disculpas, una persona -otra vez yo- fue insultada a viva voz y en forma reiterada).
El 15/12 mantengo una charla con el encargado de la sección Deportes de La Voz Del Interior acerca del incidente y le manifiesto mi preocupación por los modos en que su segundo pretende ejercer la función de administrar un grupo de trabajo; la respuesta: “ya voy a hablar con todos para que nos tranquilicemos y terminemos bien el año”.
El 20/12 un empleado de una escribanía llega a mi domicilio con una notificación de despido “con causa”. El escrito está firmado por el jefe de personal de La Voz del Interior, quien nunca habló conmigo sobre el incidente.
Luego de iniciar las acciones legales y gremiales correspondientes gestioné una entrevista personal con el gerente general de la empresa, quien el 24/12, en una tardía concesión al derecho de defensa, reconoce ante mí una falla grave de procedimiento y varias veces menciona el término “desproporcionado” en alusión a a relación entre el incidente anteriormente citado y la consecuencia.
También se manifiesta especialmente preocupado por aclarar que nada tiene que ver en la decisión una nota con mi firma publicada en el anuario del diario acerca de la distinción de la Unicameral a la barrabrava de Talleres y las vinculaciones políticas y dirigenciales con la facción denominada La Fiel.
Se compromete a “revisar el caso” aunque aclara que “el informe es contundente” (¿qué informe? ¿de quién? ¿del sub encargado de Deportes que me insultó? ¿del encargado de Deportes que trató de poner paños fríos?).
Le aclaro que el despido habla de “redactar noticias contrarias a las encomendadas” (como el jefe de personal no habló conmigo supongo que tomó esos argumentos del citado “informe”) y que la página por la que se generó la discusión se publicó tal cuál yo la había entregado en propias manos del sub encargado de Deportes (¿o no estaba tan mal o alguien más se fue y no me enteré?); eso es contundente.
Mientras tanto, me entero por terceros que el encargado de Deportes, con quien estuvimos coordinando labores hasta la noche del 19/12, manifiesta no haber pedido el despido y también haberse enterado el mismo 20/12 de la decisión empresarial.
Dos días después de la reunión con Salas recibo una comunicación del jefe de personal, quien me pide una reunión en la que sostiene que “por pedido del gerente general” y en virtud de la charla que yo había tenido con aquella persona, él venía a proponerme que pensara “una solución que conviniera a las dos partes”, ya que la empresa estaba dispuesta a modificar los términos del despido.
Le respondí que mi conveniencia era seguir trabajando y que puesto a pensar también en la conveniencia de la empresa me parecía que lo más apropiada era que me pagaran por realizar mi trabajo de periodista.
En medio de la charla le dije: “che, vos sos un kamikaze, firmaste cualquier verdura en un documento de valor legal”, a lo que el jefe de personal respondió: “Y bueno… total después va a juicio”.
A ver: ¿entendí mal o me dijo en mi propia cara que me inventaron una causa y me condenaron en un juicio sumario? Un antecedente gravísimo para todos. Se lo dije al gerente general y al jefe de personal: la empresa es dueña de elegir con quien trabaja pero no tiene derecho a ensuciar gratuitamente a gente que acredita una trayectoria que trasciende a la presencia en un determinado medio: si no me quieren, todo bien; pero paguen lo que corresponde y no ensucien a la gente.
En resumen, la seguimos peleando en todos los frentes posibles, pero necesito del acompañamiento de ustedes. Estamos avanzando en las vías legales y gremiales, y seguimos pidiendo la reincorporación.
Motiva la difusión de este caso la preocupación de mucha gente que todavía no se enteró del asunto o de sus detalles, y la necesidad de contrarrestar acciones individuales y/o corporativas tendientes a justificar la decisión del despido, así como conductas tendientes a obstaculizar mi reinserción laboral futura. Un abrazo para todos. Compartan esto con sus contactos. Y que me ayuden a interpretar todo este sainete. Gracias y abrazos.
Fuente: prensared.org
Ver antrerior: Repudian el despido de un periodista de La Voz del Interior