domingo, 31 de enero de 2010

Venezuela "zona de desastre para la libertad de expresión"

Tres gremios de la prensa de Venezuela declararon hoy al país "zona de desastre" para la libertad de expresión y para el ejercicio libre del periodismo y denunciaron lo que llamaron "persecución gubernamental" contra dos comunicadores.
El Colegio Nacional de Periodistas, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa y el Círculo de Reporteros Gráficos emitieron un comunicado en el que se indica que "no es tiempo de cobardes" sino "de ejercer nuestra ciudadanía con integridad y dignidad".
Ello, tras remarcar que no fomentan ni auspician la violencia porque "no creemos en agendas conspirativas ni creemos necesaria la confrontación fratricida para que nuestros sueños se hagan realidad", algo de lo cual el Gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, ha achacado en las últimas horas a dos comunicadores.
Los gremios expresan "total solidaridad y respaldo" a Miguel Ángel Rodríguez y Laureano Márquez, acusados por el Gobierno de efectuar llamamientos a la violencia a través de la emisora de televisión y el diario en los que trabajan, respectivamente.
Aunque en su comunicado los tres gremios llaman al Gobierno "a reflexionar y rectificar", lo acusan de pretender "desaparecer o ahorcar a los medios con posturas críticas (a la gestión de Chávez), cortar las fuentes de trabajo y perseguir judicialmente, con argumentos amañados, a colegas y compañeros".
Agrega que los medios de comunicación del país "han servido a través de los periodistas como testigos y voceros de la ciudadanía para denunciar problemas que afectan las condiciones de vida de todos", lo que constituye "un deber al que no vamos a renunciar".
"Preocupados por el estado de derecho y el cumplimiento de la ley, condenamos enérgicamente la represión contra los estudiantes, las universidades autónomas, los empresarios, los periodistas y los medios de comunicación, el cerco sistemático existente en Venezuela a todo lo que no vista de rojo, a través de la institucionalización de la violencia selectiva fomentada desde el poder", añade.
El presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CoNaTel), Diosdado Cabello, dijo el pasado 21 de enero que entregó en la Fiscalía un vídeo del programa televisivo de Rodríguez en el cual, junto al presidente de la Federación de Cámaras Empresariales (FedeCámaras), Noel Álvarez, usan "un juego de palabras para llamar a que la solución en Venezuela debe ser militar", sostuvo.
"Que el entrevistado y el entrevistador respondan por sus acciones, nosotros cumplimos con nuestra responsabilidad pidiendo la investigación penal", señaló ese día Cabello, que también es ministro de Infraestructura y Obras Públicas.
Adicionalmente, la estatal agencia de noticias ABN dio cuenta de que el ministerio de Comunicación e Información emitió un comunicado para anunciar que pedirá a la Fiscalía sancionar al opositor diario caraqueño Tal Cual por un texto de humor de su editorialista Laureano Márquez que ocupó su portada de este viernes.
Valiéndose de fotografías de incidentes callejeros, del presidente cubano, Fidel Castro; del nicaragüense, Daniel Ortega, y otras, y bajo el titular "Venezuela sin Esteban (en alusión a Chávez)" y evidenciando un "clásico libreto fascista", según el ministerio, Márquez reseñó imaginariamente un país post Chávez.

Comunicado de los gremios de prensa
Los comunicadores sociales somos gente de palabra y conocemos el valor y su poder. No fomentamos ni auspiciamos la violencia; no creemos en agendas conspirativas, no creemos necesaria la confrontación fratricida para que nuestros sueños se hagan realidad.
El mensaje que emana de esta asamblea es un rotundo voto de censura quienes pretenden desaparecer o ahorcar a los medios con posturas críticas, cortar las fuentes de trabajo, perseguir judicialmente, con argumentos amañados, a colegas y compañeros.
Los medios de comunicación venezolanos: radio, prensa, televisión, páginas web han servido a través de los periodistas como testigos y voceros de la ciudadanía para denunciar problemas y que afectan las condiciones de vida de todos: la emergencia eléctrica, la ausencia de justicia, la escasez de agua, la devaluación, la caída de los salario, el aumento de los precios de bienes y servicios y la inseguridad. Ese es nuestro trabajo y nuestro deber. Un deber al que no vamos a renunciar.
Preocupados por el estado de derecho y el complimiento de la ley, condenamos enérgicamente la represión contra los estudiantes, las universidades autónomas, los empresarios, los periodistas y los medios de comunicación, el cerco sistemático existente en Venezuela a todo lo que no vista de rojo, a través de la institucionalización de la violencia selectiva fomentada desde el poder. Rojos y no rojos formamos parte del mismo país.
Dentro de nuestra lucha, irrevocablemente pacífica, reiteramos que estamos resteados con la defensa de la Constitución Nacional. Dentro de ella, los valores inscritos en el ámbito de nuestros deberes profesionales: la libertad de información, la libertad de protesta, el espíritu critico la pluralidad de pensamiento; así como el derecho sagrado al trabajo.
Valores irrespetados por el Ejecutivo a través del cierre de radios, televisoras y amenazas directas hacia los medios impresos. Condenamos las leyes manipuladas, los cierres de emisoras, las agresiones a nuestros colegas en las calles.
No es tiempo de cobardes. Es tiempo de ejercer nuestra ciudadanía con integridad y dignidad. Llamamos al gobierno a reflexionar y rectificar. Con todo lo dicho, el CNP, el SNTP y el CREV, junto a sus seccionales existentes en todo el país, expresan su total solidaridad y respaldo a favor de nuestros colegas Miguel Angel Rodríguez y Laureano Márquez.

Fuente: Agencia EFE