jueves, 15 de octubre de 2009

Video anónimo: De la exhibición en la TV pública a la investigación judicial

La productora del programa que emitió el video justificó la emisión por una denuncia que se presentó al día siguiente. Tanto el video que se mostró en Canal 7 como la denuncia en la que se amparó la emisión son anónimos. El periodista involucrado, Carlos Pagni, y la empresa mencionada, Repsol, se presentaron ante la Justicia para que investigue el origen.
Canal 7 volvió a pasar ayer el video anónimo, y editado, en el que se pretende involucrar a un periodista del diario La Nación, Carlos Pagni, en una operación periodística espuria para perjudicar a la empresa Repsol-YPF. El programa en el que se difundieron las imágenes es el mismo que las había pasado un día antes, 6, 7, 8, conducido por María Julia Oliván y producido por Diego Gvirtz. Desde su productora dejaron trascender ayer que la decisión de poner al aire esa cámara oculta se tomó el martes por la tarde, cuando supieron que existía una investigación judicial sobre el tema. Es un argumento falso. Según pudo saber Crítica de la Argentina, la primera denuncia para dilucidar el contenido del video llegó a Tribunales un día después de que la televisión pública, a cargo a Tristán Bauer, la transmitiera en el prime time.
La presentó un anónimo a la división de Apoyo de Tecnología de la Policía Federal. Esa fuerza la puso en conocimiento del juez de turno, Marcelo Martínez Giorgi, quien a su vez le corrió vista al fiscal Patricio Evers.
La cinta, subida al sitio de internet YouTube a inicios de la semana, muestra a un grupo no identificado de supuestos empresarios, con sus rostros pixelados, en diferentes diálogos con el experto en comunicación Fabián Falco, en los que supuestamente llegan a un acuerdo económico para que Pagni publique información negativa para Repsol-YPF.
Falco tuvo a cargo las relaciones institucionales de la petrolera, pero luego se desvinculó. Fue cuando ingresó en la compañía el empresario Enrique Eskenazi, cercano al matrimonio de Néstor y Cristina Kirchner.
Los artículos de Pagni sobre Repsol-YPF, a los que se hace alusión en el video, fueron publicados a lo largo de este año y jamás fueron desmentidos. Según fuentes involucradas en el expediente judicial iniciado ayer, en el video no aparecía delito federal alguno.
Carlos Pagni, el principal involucrado en el tema, se autodenunció en la Cámara en lo Criminal y Correcional. La causa quedó radicada en el Juzgado en lo Criminal de Instrucción Nº 20 de la Capital Federal. Sus representantes legales pertenecen al estudio Fontán Balestra. “La denuncia fue realizada por la falsedad de las imágenes –en lo que a mí se refiere–, ya que fueron editadas y/o manipuladas para perjudicarme”, explicó Pagni en declaraciones al sitio lanacion.com. Crítica de la Argentina intentó ayer comunicarse con el periodista pero no obtuvo respuesta.
La otra gran protagonista del video, la empresa YPF, emitió un comunicado donde dejó asentado que defiende el “pleno ejercicio de la libertad de expresión y la confianza en el periodismo independiente, especialmente en estos días de intenso debate sobre este tema”. En otro párrafo destaca que “a lo largo de toda su historia la empresa ha mantenido y mantiene una fluida y respetuosa relación con todos los periodistas y medios de comunicación de la Argentina”. La compañía informó que, igual que Pagni, se presentó en la Justicia: “En virtud a la gravedad de los hechos que reproducen los videos, YPF ha decidido presentarse a la Justicia para que se investigue profundamente el origen de las filmaciones y la veracidad del contenido de las mismas en las que se perjudica directamente a la compañía”.
Más allá del contenido del video, Pagni ya había sido víctima de una operación de espionaje: su correo electrónico fue violado. El contenido de distintos mensajes que intercambió con el dirigente de Unión-PRO Francisco De Narváez llegó (otra vez de forma anónima) al despacho del juez Federico Faggionatto Márquez, quien involucró al diputado del peronismo disidente con el tráfico de efedrina. Pagni admitió ante la Justicia que aquellos correos eran suyos. Esta semana descubrió que una de sus reuniones había sido filmada por una cámara oculta, una imagen que fue amplificada dos días seguidos por la televisión pública. Ayer, después de volver a pasar esa cinta, que afecta a la imagen del matutino La Nación, el programa 6, 7, 8 puso al aire un informe que describió la investigación judicial que busca determinar si los hijos de Ernestina Herrera de Noble, dueña de Clarín, son en realidad hijos de desaparecidos.

Fuente: Crítica de la Argentina

6, 7, 8 puso al aire otra vez el video. La reincidencia del 7
El programa que más defendió la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual desde el Canal 7, 6,7,8, dio un paso en falso al poner en el aire un video anónimo levantado del sitio YouTube, destrozando todas y cada una de las reglas de la información.
Desde los despachos más altos de la productora PPT, de Diego Gvirtz, le aseguraron a Crítica de la Argentina que cuando recibieron el video pusieron en duda la veracidad del material. Afirmaron que chequearon que la Justicia estuviera al tanto y que se hubiera abierto una causa y finalmente decidieron que, si las imágenes circulaban públicamente por internet, se podían poner al aire siempre que se aclarara que eran anónimas y dando la posibilidad de que los panelistas dieran su opinión.
“Sabíamos que estaba mal la forma porque se trataba de un video anónimo, pero nosotros no avalamos el video en sí sino que lo pusimos al aire y dijimos que era anónimo. Nos parecía que estaba bien que el público viera algo que estaba circulando pero que los demás medios no levantaban. Y que el espectador decidiera”, indicaron.
El invitado del día, Carlos Heller, dijo que no iba a opinar sobre algo anónimo que no llevaba una firma editorial, discurso al que se sumaron Orlando Barone y Luciano Galende, que, de todos modos, apuntó que para hacer semejante movida había que tener recursos. En el día de ayer, la conductora del programa, María Julia Oliván, hizo una especie de mea culpa, aunque el video fue puesto nuevamente al aire por el canal oficial. Lo que la Presidenta podría definir como un “fusilamiento mediático”.

Fuente:
Crítica de la Argentina


Un anticipo de la nueva era mediática
El kirchnerismo utiliza las herramientas del Estado para desactivar opositores. El papel del canal oficial en la reproducción de operaciones.
Por: Susana Viau
Canal 7 y el periódico santacruceño Austral, propiedad de Lázaro Báez, se apresuraron a replicar la hedionda filmación subida a YouTube y destinada a comprometer a un importante columnista político. La cobertura no hizo sino evidenciar de qué basurales habían salido el material y el dinero para financiarlo. También reveló que la estructura del Estado no es para Néstor Kirchner sino una herramienta para desactivar opositores. El Consejo de la Magistratura, la ONCCA, la AFIP, la SIDE y hasta un puñado de comunicadores de los “medios públicos” forman parte de esa formidable plataforma de acoso y derribo. Ricardo Echegaray, Guillermo Moreno, Héctor Icazuriaga o Francisco Larcher se emplean a fondo. Se entiende: no existirían sin Kirchner y no lo sobrevivirán cuando su mujer se aleje del poder.
Más extraño resulta que directores de cine o periodistas asuman tareas subalternas, rifando la credibilidad que les permite ejercer sus profesiones. Los integrantes del programa que emitió el video simularon enfurruñarse con el anonimato de la denuncia. Nadaban y salvaban la ropa. Disentían con el procedimiento pero difundían el producto. Al día siguiente (ayer) repitieron el mecanismo que, suponen mal, los pone a salvo de consideraciones morales. Una corazonada, o la experiencia, indica que con esta operación ha comenzado la era de la Ley de Servicios Audiovisuales. También ha generado, aseguran, enormes malestares al otro lado del océano. La española Repsol no ve con agrado que su nombre quede involucrado en un bastorro pase de facturas.
Pero al kirchnerismo le importa poco la escena internacional. Hace pocos días la Presidenta envió a un emisario a Tegucigalpa con la orden de evaluar la situación de Manuel Zelaya y la embajada de Brasil. En la frontera, el comisionado presentó un pasaporte diplomático. De inmediato acudió a interrogarlo un oficial de inteligencia, porque los diplomáticos no caen del cielo, se acreditan. Luego de unas horas fue devuelto a Buenos Aires. Tampoco asistió nadie a principios de mes al Palacio Balcarce, donde el ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim, presentó el Plan Estratégico de Brasil. En el acto organizado por la revista DEF, propiedad del ex montonero Mario Montoto, no estuvo la ministra Nilda Garré y los jefes de las fuerzas armadas tampoco fueron autorizados a concurrir. Es verdad que Jobim no había informado de su llegada. Era una devolución de cortesías: a mediados de septiembre cinco embarcaciones de la flota brasileña que participaban en maniobras conjuntas debieron regresar a Río de Janeiro porque las naves argentinas pegaron el faltazo. La venia para que las tropas salieran del país no había sido tratada por la Cámara de Diputados.
Anoche, en la Rural, el ex vicepresidente norteamericano Al Gore sostuvo ante un grupo selecto de interlocutores que Hugo Chávez es más respetuoso de la ley que el matrimonio Kirchner y hubiera alegrado a Elisa Carrió cuando mencionó que los niveles de corrupción argentinos le recuerdan a la Rumania de Ceaucescu. Gore agregó que los vuelos de Southern Winds entre Córdoba y Tacna son un antecedente del escándalo de la efedrina. Lo más significativo resultó, no obstante, su afirmación de que el santacruceño aporta a la política una novedad absoluta y peligrosa: la usurpación del poder mediante el manejo de su mujer.

Fuente:
Crítica de la Argentina


Denuncia judicial por el video anónimo contra un columnista
Pagni pidió que se identifique a los autores de la grabación; Repsol YPF presentó su propia denuncia
El columnista de La Nación Carlos Pagni presentó ayer una denuncia judicial para que se investigue a los responsables de un video anónimo, filmado con cámaras ocultas, en el que se lo vinculó con una supuesta operación para publicar información falsa en este diario en perjuicio de la empresa Repsol YPF.
El video fue difundido por Canal 7 en el programa 6, 7, 8, que anteayer dedicó casi 17 minutos de su programación a reproducirlo y ayer volvió a emitirlo. Horas antes había sido subido a un sitio de Internet y publicado en diversos portales y blogs ultrakirchneristas.
Con placas impresas y una voz en off, el video hace graves acusaciones contra el columnista. Las imágenes de las cámaras ocultas (cortadas y editadas) no demuestran en ningún caso que esas acusaciones sean ciertas. Las notas de La Nación a las que hace referencia el video anónimo publicadas en enero, junio y julio de este año no fueron desmentidas.
"Cada vez el Gobierno tiene más dificultades para ocultar la realidad. Es probable que la etapa que venga sea ésta: la de la delación y el apriete. Fue un mensaje para políticos y periodistas, que debemos resistir", sostuvo el presidente del bloque de diputados de la UCR, Oscar Aguad.
En su presentación de ayer ante la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal, Pagni y su abogado, José María Figuerero, afirmaron que se trata de un video "falso o manipulado" y denunciaron dos delitos: estafa y falsificación de documento privado. Como la grabación es anónima, la denuncia es contra "NN".
Por sorteo, la causa quedó radicada en el Juzgado Criminal de Instrucción Número 20, a cargo de la jueza subrogante Elizabeth Paisan.

Repsol YPF
Mientras tanto, Repsol YPF anunció que presentará su propia denuncia judicial. En un comunicado sostuvo que "en virtud de la gravedad de los hechos que reproducen los videos" había decidido recurrir a la Justicia "para que se investiguen profundamente el origen de las filmaciones y la veracidad del contenido de las mismas en las que se perjudica directamente a la compañía".
La empresa dijo que siempre mantuvo "una fluida y respetuosa relación con todos los periodistas y medios de comunicación" de la Argentina, y declaró: "YPF desea reafirmar una vez más su compromiso con las instituciones democráticas, el pleno ejercicio de la libertad de expresión y la confianza en el periodismo independiente, especialmente en estos días de intenso debate sobre este tema".
El Gobierno no hizo comentarios sobre la emisión de la filmación anónima en Canal 7.
La Nación intentó comunicarse ayer con el titular del Sistema Nacional de Medios, Tristán Bauer, responsable del canal estatal; con el vocero del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; con el interventor en el Comité Federal de Radiodifusión (ComFeR), Gabriel Mariotto, y con el secretario de Medios, Enrique Albistur, pero ninguno de ellos respondió las llamadas.
Sin embargo, mereció críticas unánimes de la oposición. "Se trata de un montaje destinado a desacreditar a un periodista muy crítico del Gobierno, sobre todo en la ley de medios", afirmó Silvana Giúdici (UCR), titular de la Comisión de Libertad de Expresión de la Cámara baja. "Fue una burda maniobra. Me indignó que el canal oficial esté a cargo de ella", sostuvo Paula Bertol, de Pro.
La diputada de Pro Lidia Satragno, Pinky, aludida en la filmación por la presentación de un pedido de informes sobre el sector petrolero, dijo: "El video es trucho, tiene olor a service de segunda. Se ve que mi pedido molestó a alguien", afirmó la famosa conductora televisiva.

Fuente:
Diario La Nación