domingo, 5 de agosto de 2007

Rosario cumple 155 años como ciudad

Ana María Bertolini
Rosario, la mayor urbe de la provincia de Santa Fe, segunda en el orden nacional y una de las más pujantes de Sudamérica, cumple hoy 155 años de vida como ciudad.
Nacida en el siglo XVIII como una pequeña aldea rural del Pago de los Arroyos, se convirtió en Villa del Rosario en 1823 y adquirió, por oficio de un agradecido Justo José de Urquiza, el rango de ciudad, por ley provincial del 3 de agosto de 1852, lo que la catapultó como centro político y económico.
Pudo haber sido la capital del país: el Congreso Nacional votó tres veces su federalización, pero no lo consiguió debido a los vetos de los presidentes Bartolomé Mitre y Domingo F. Sarmiento.
Posicionamiento. Rosario se hizo de a poco, no fue fundada en el marco de una política de población o de defensa estratégica; su condición ribereña, su ubicación y su riqueza contribuyeron a su despegue.
También, la devoción por la Virgen del Rosario, que se veneraba en la modesta capilla, sirvió para agrupar a los pobladores del Pago de los Arroyos. Pero lo que la transformó en ciudad, fue su posicionamiento frente a la batalla de Caseros.
El 1º de mayo de 1851, Urquiza se pronunció contra Juan Manuel de Rosas, gobernador de Buenos Aires y encargado de las Relaciones Exteriores de las provincias.
Bajo la promesa de hacer efectiva la libre navegación de los ríos que Rosas les negaba, Corrientes, Brasil y Uruguay se aliaron a Urquiza y conformaron con los entrerrianos el Ejército Grande que marchó a Buenos Aires.
En Rosario se sumaron dos batallones comandados por Juan Fernández y Dalmaso Centeno, con más de mil hombres y dos mil quinientas cabezas de ganado, para alimentar a los combatientes.
Un decreto de Rosas, fechado en enero de 1841, había cerrado el puerto de Villa del Rosario a los buques extranjeros, y eso era algo que sus habitantes no estaban dispuestos a perdonarle.
Rosas fue derrocado en Caseros el 3 de febrero de 1852 con el decidido apoyo de los rosarinos y esto llevó a que unos meses después, un Urquiza agradecido, le pidiera al gobernador de Santa Fe, Domingo Crespo, que hiciera eregir la villa en ciudad.
Su papel en el Confederación. La “ciudadanía” de Rosario se sancionó el 3 de agosto de 1852 “atendiendo a los merecimientos de la villa y a las muy atendibles y preferentes solicitudes del Excelentísimo señor Director Provisorio de la Confederación, ilustre general Don Justo José de Urquiza y del actual gobierno de la provincia”, decía la ley.
Ungida en baluarte del gobierno de la Confederación Argentina, Rosario recibió más buenas nuevas: el 28 de agosto Urquiza abrió los ríos a la navegación universal y el 3 de octubre autorizó el acceso directo de los buques de ultramar a Rosario y otros puertos, sin obligación de escala previa.
El 11 de septiembre de 1852, al separarse la provincia de Buenos Aires del resto del país, Rosario pasó a ser el centro de las actividades económicas y una década más tarde, potencial candidata a capital política.
En julio de 1862, el Congreso Nacional comenzó a debatir el tema y se plantearon dos opciones: federalizar la provincia de Buenos Aires o establecer la capital fuera de la ciudad portuaria.
“El Diario”, en su edición del 29 de junio, lo planteó con claridad: “Las provincias no quieren la capital en Buenos Aires. Buenos Aires no la quiere en Rosario ni en Santa Fe”.
Y se preguntó: “¿La República Argentina, se organizará por el sistema federal o unitario? Si lo primero, conviene la capital en el Rosario. Si lo segundo, Buenos Aires debe ser la capital”.
El 1º de julio de 1867, por iniciativa del diputado Manuel Quintana, el Congreso declaró a Rosario capital de la República, pero el 25 de septiembre Mitre vetó la ley.
El 8 de mayo de 1869 se sancionó otra vez la federalización de Rosario, pero el 14 de julio Sarmiento vetó la ley.
El 8 de mayo de 1870 se reactivó la cuestión y el 16 de septiembre de 1873 el Congreso dispuso por tercera vez la instalación de la Capital Federal en Rosario. Pero el 20, Sarmiento volvió a decir no.
Lo que nunca nadie podrá quitarle a la ciudad de Rosario es su condición de cuna de la Bandera Nacional. Y eso, pese a que el Triunvirato retó a Manuel Belgrano y le ordenó destruirla.

Fuente: El Diario. Paraná
Pd:
Ningún diario de la ciudad publicó algo relativo al aniversario. Solo hubo avisos institucionales de la Municipalidad, pagos por supuesto!