Desde la Red Nacional de Medios Alternativos repudiamos la represión policial que se desató hoy, luego de la masiva movilización convocada por la CGT, las dos CTA, el sindicalismo combativo, la Unidad Piquetera y personas no agrupadas, en la que al menos 6 personas fueron detenidas, entre ellas un trabajador de prensa.
Este mediodía, organizaciones marcharon hacia el Palacio de Justicia en CABA para expresar su rechazo al DNU 70/2023 impulsado por el presidente Javier Milei, que ordena una desregulación de la economía y deroga leyes que protegen derechos laborales y constitucionales. La movilización también expresó su repudio al protocolo antipiquetes de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.
Pese a los anuncios de aplicación del protocolo por parte de la ministra y del vocero presidencial Manuel Adorni, en horas previas a la marcha, la movilización nuevamente fue masiva. Esto se da en el marco de jornadas de lucha como la del pasado 20 y los cacerolazos que se organizan diariamente en distintos puntos del país contra las medidas anunciadas por el reciente gobierno que afecta a trabajadores, jubilades, discapacitades, disidencias, desocupades y estudiantes.
Sin embargo en la desconcentración de la marcha, por la calle Corrientes a la altura de Talcahuano, un desmedido operativo policial cortó la circulación y agredió a manifestantes y personas que estaban en el lugar, llevándose 6 detenidos.
Repudiamos otra vez la represión que apuntó también hacia quienes estaban registrando los abusos y agresiones policiales como Martín Brunas, trabajador de prensa y dirigente de la CTA Autónoma, uno de los detenidos.
La violencia hacia quienes están en la calle comunicando no es un hecho aislado ni casual. El pasado 21 también un trabajador de prensa del medio Enfant Terrible fue detenido junto a otras 4 personas más en un cacerolazo en la ciudad de Córdoba.
Ante esto desde la Red Nacional de Medios Alternativos exigimos la liberación inmediata de los 6 detenidos que se encuentran en la comisaría 1B de San Telmo ( Tacuarí 770) y repudiamos la represión hacia quienes ejercen el derecho legítimo a la protesta y hacia aquellos que con cámara en mano arriesgan su integridad física y su libertad en pos de la tarea de informar las luchas y acciones colectivas.
La comunicación popular, comunitaria, alternativa resulta hoy indispensable ante el avance de un feroz ataque a los derechos del pueblo trabajador.