martes, 31 de mayo de 2022

Paro en Clarín y Olé: La empresa se victimiza, la asamblea dice basta

Otra paritaria a espaldas de la asamblea, igual o peor que las anteriores, agitó la indignación. Con un mail institucional en el que no se explican con claridad los alcances de una recomposición tan insuficiente como humillante, arrancó la jornada de lucha con paro de 24hs en Clarín, Olé, revistas y publicaciones de AGEA.

Ante la victimización de la empresa, que por un lado invierte más de 300 millones de pesos en acciones de otras compañías, y, por el otro, sostiene a 6 de cada 10 de sus redactores y redactoras con salarios por debajo de la canasta básica, la respuesta fue unánime: ¡Basta!

No se puede responsabilizar a la empresa de la crisis económica del país, pero sin dudas AGEA es responsable de la gravísima situación económica que atraviesa el sector de prensa escrita: comandan la cámara AEDBA que año tras año firma paritarias con un gremio trucho que no tiene afiliados ni afiliadas en ninguno de los principales medios periodísticos. Y lo hace sistemáticamente por debajo de la inflación, para financiar sus negocios con la miseria de nosotros, las trabajadoras y los trabajadores, al punto que muchos necesitamos pedir dinero prestado para cuestiones tan básicas como pagar el alquiler o comprar pañales para hijas e hijos.
Esta situación límite, además, tiene otros afluentes: la precarización laboral, el aumento de la cantidad y complejidad de trabajo, la permanente falta de proyecto, la incertidumbre como moneda corriente, los destratos y las condiciones en las que realizamos nuestras tareas generan un cóctel explosivo. Un simple ejemplo, las periodistas y los periodistas de AGEA absorben el costo de la televisión cable, del teléfono y de la conexión a Internet en sus domicilios, siendo que la empresa es la principal proveedora del servicio en el país. Situación que se agudizó durante la pandemia.

Estamos hartos y hartas. Porque lo padecemos, sabemos del #PeriodismoEnEmergencia. Las condiciones de trabajo y la depreciación de nuestros salarios atentan contra el libre ejercicio de nuestra tarea. Nos arrastran al pluriempleo y condicionan la libertad de expresión cuando el negocio de los jefes son los canjes y la pauta publicitaria para espacios por fuera de la redacción. Queremos hacer el mejor periodismo posible, producir contenidos de calidad para todas las plataformas. Nos capacitamos a costa de nuestros precarizados bolsillos y a pesar de las limitaciones que nos imponen todos los días. Para eso necesitamos salarios dignos, porque garantizar el derecho al trabajo es, únicamente, con sueldos a la altura.
Asamblea Clarín/AGEA - SiPreBA