domingo, 16 de mayo de 2021

Respuesta a un pirulo de patas cortas (que no publicará PáginaI12)

Víctor Santa María sondea hoy a lxs lectorxs de PáginaI12 (ver abajo), sobre su derecho como patrón a descontar los días de huelga a lxs trabajadorxs que no aceptamos la destrucción de nuestros salarios ni la negativa al diálogo por parte del Grupo Octubre.

Lo más significativo de su pirulo de tapa dominical no es lo que informa sino lo que tergiversa y, peor aún, lo que oculta “A los lectores”, a quienes no se cansa de subestimar.

Entre las omisiones se destaca la negativa por parte del Grupo Octubre a recibir a la Comisión Gremial Interna del SiPreBa y entablar un diálogo que permita destrabar el conflicto. La última vez que la empresa aceptó recibir a los representantes de lxs trabajadorxs fue el 26 de agosto de 2020, hace casi nueve meses.

El otro dato central que omite es la pérdida de poder adquisitivo durante el lustro de gestión Santa María. Un sueldo promedio que cinco años atrás estaba 42 puntos arriba de la canasta básica hoy está 18 puntos abajo. Traducido: quien araña un sueldo de 45.000 pesos (con la línea de pobreza en 60.800) debería cobrar 86.000 para recuperar el poder adquisitivo anterior a la era Santa María.

Que el Grupo Octubre generó nuevos puestos en PáginaI12 es una verdad de patas cortas. En el mejor de los escenarios compensa los que se perdieron por “retiros voluntarios”. Lo que Santa María omite es que la mayor parte de quienes se sumaron al diario fueron contratados por fuera del convenio de prensa y bajo otras razones sociales para no reconocerles los mismos derechos que a sus compañerxs, consagrados en el Estatuto del Periodista Profesional. Adicionalmente, estos compañerxs fueron afiliados compulsiva e inconsultamente al sindicato UTEDYC, que no pertenece al gremio de prensa.

Omite también que en las escasas excepciones en que un/a trabajador/a es tomado bajo la razón social de PáginaI12 se lo obliga a aceptar previamente, como condición innegociable para ser contratado, el compromiso a dar la espalda a la Asamblea de Trabajadorxs y a no adherir a las medidas de fuerza votadas por sus compañerxs.

Las presuntas grandes concesiones (herramientas de trabajo como silla y computadora, bono para compensar gastos, protocolo de violencia laboral y de género, etc.) fueron conquistas obtenidas por perseverar en la lucha; las “medidas sanitarias” puertas adentro, por ejemplo, se implementaron tras el anuncio de un paro por tiempo indeterminado ante la ausencia de protocolo sanitario.

Respecto del bono por teletrabajo al que hace referencia la empresa, lo empezamos a recibir hace dos meses y por un importe de 720 pesos brutos, que con los descuentos no alcanza a 600 pesos, cifra claramente insuficiente para compensar los gastos hogareños (electricidad, teléfono, internet) derivados del teletrabajo.

Respecto a que “se mantuvo el pago de refrigerio correspondientes al trabajo presencial”, Santa María omite informar que el adicional por ese rubro era un derecho adquirido hasta su llegada y que nunca aceptó negociarlo, por lo que se congeló en octubre de 2015 en 32,77 pesos diarios (¿Un tercio de café?) y nunca más se actualizó.

Las trabajadoras y trabajadores que hacemos el diario desde mucho antes del desembarco del Grupo Octubre en PáginaI12 seguiremos defendiendo nuestros derechos y luchando para recuperar el terreno perdido. Nos sobran los motivos.
Comisión Interna PáginaI12
Carta de Víctor Santa María a los lectores de Página
Desde hace más de un año, todo el país sufre el terrible impacto de la pandemia, que se suma a la catastrófica situación producida por las políticas económicas y sociales del macrismo. Por supuesto, los medios de comunicación no están ajenos a esa situación.

PáginaI12 intentó morigerar ese daño desde el principio, afrontando las medidas sanitarias correspondientes. Se realizó un gran esfuerzo para que las tareas que habitualmente se realizaban en las oficinas del diario continuaran desde los domicilios particulares. 

Se entregaron sillas y computadoras a los que lo solicitaron, se solucionaron los problemas técnicos surgidos por el teletrabajo y se mantuvo el pago de los refrigerios correspondientes al trabajo presencial. Además se incorporó un bono en concepto de teletrabajo para todos los que optaron por esa modalidad laboral y se establecieron pautas especiales y medidas sanitarias para aquellos que mantuvieron algún tipo de concurrencia. 

El Grupo Octubre, al que se sumó en el año 2016 PáginaI12, también avanzó en estos meses en todo lo concerniente a la igualdad de género. 

Se creó un Protocolo común para encarar los casos de violencia laboral y cualquier tipo de discriminación basada en el género o la orientación sexual. También se extendió la licencia por paternidad a 14 días y se abrió un espacio pedagógico de primera infancia para los hijos e hijas del personal de entre 2 meses y dos años. 

En el campo del sostenimiento de las fuentes de trabajo, en medio de la tremenda contracción provocada por la pandemia de coronavirus, el diario no solo no realizó ningún despido, sino que también generó nuevos puestos que se sumaron a los más de 200 ya existentes. A ello se sumó el pase a planta de trabajadores que revistaban como “colaboradores permanentes” o pasantes.

Tampoco se generaron restricciones en el campo salarial. A lo largo de toda la pandemia los trabajadores y trabajadoras recibieron el pago completo de sus sueldos en tiempo y forma, con las subas correspondientes a lo pautado para el sector. A fines de 2020, se hizo efectivo un aumento que para gran parte del personal fue por encima de lo acordado en las paritarias del gremio. En marzo de este año, se sumó un bono de 5.000 pesos por hijo o hija en edad escolar. 

El diario arrastra desde hace años un conflicto con un sector del personal, que realiza numerosos paros y medidas de fuerza desde los difíciles tiempos del macrismo, en que estuvo seriamente en juego su sobrevivencia por la discriminación económica y la persecución judicial a los que lo sometió el Gobierno de Cambiemos. También en esos agobiantes años el Grupo Octubre garantizó la continuidad de la fuente de trabajo y el cobro de los sueldos de todo el personal. 

El conflicto se extendió en estos largos meses de pandemia, con la única diferencia de que ese sector de los empleados profundizó sus medidas de fuerza. Desde noviembre del año pasado decidieron reducir su jornada laboral y ahora solo trabajan 3 de las 6 horas diarias que establece el convenio. A eso se sumaron 30 días de paro completo en jornadas de 24, 48, 72 y una semana, recargando en sus compañeros toda la carga laboral y la responsabilidad de seguir garantizando la aparición del diario en cualquiera de sus formatos. Cabe aclarar que, a pesar del evidente riesgo que implica esa actitud para la continuidad del diario, el Grupo Octubre no aplicó ningún descuento en sus  salarios.

Además de agradecer a los lectores su constante apoyo y pedir disculpas por los problemas que haya podido generar esta situación, PáginaI12 espera que quede atrás este escenario y pueda garantizarse la presencia de la otra mirada en todos los formatos desarrollados a lo largo de sus 34 años de vida.
Editorial La Página