Sacar fotos no es delito. Repudiamos la detención del reportero gráfico Walter Mansilla, a quien unos 30 policías de la fuerza de choque provincial le allanaron su casa. Delante de su familia destrozaron el domicilio, lo golpearon violentamente, le sustrajeron su cámara y su equipo de trabajo y se lo llevaron. Mansilla registra fotográficamente las actividades de la asamblea El Algarrobo desde hace muchos años. Idéntica suerte sufrió, Enzo Brizuela, comunicador de la Radio El Algarrobo, medio comunitario integrante de la RNMA, Red Nacional de Medios Alternativos.
A ambos los imputan por delitos de hurto, invasión a la propiedad privada y estrago doloso (incendio), este último no excarcelable. La Justicia, aliada con la Policía, brinda un andamiaje argumental que en la practica es una violación a la libertad de prensa. Ponemos este atropello en conocimiento de la Federación Internacional de Periodistas, a la que apelamos para visibilizar la situación y abogar en conjunto por una inmediata solución.
Informar no es delito. Protestar tampoco. Repudiamos igualmente el arbitrario y selectivo accionar de las fuerzas de seguridad del Estado catamarqueño contra un grupo de vecinos y ambientalistas que ejercen su derecho a reclamar por un lugar limpio y sano donde vivir. No los van a silenciar ni amedrentar.
Lo ocurrido en Andalgalá es un atentado contra el ejercicio de los valores democráticos. Respaldamos a aquellos que, con toda legitimidad, cuidan de sus recursos naturales y de su buen vivir.
FATPren - ARGRA