Marta Maders, en el centro de la foto, junto a Norma Ríos y Carlos Del Frade
En la madrugada del 6 de septiembre de 1991, el senador radical Regino Maders llegaba a su casa, en la ciudad de Córdoba. Como demoraba su ingreso la familia salió a buscarlo. Estaba caído en el umbral, con dos impactos de bala que fueron mortales. El crimen conmocionó a Córdoba. Regino era un legislador trabajador y honesto, estaba denunciando negociados con la Empresa Provincial de Energía de Córdoba, el narcotráfico y la venta de bebés, como contó Carlos Del Frade en una investigación. Regino tenía un cargo jerárquico en la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC). También fue docente de la Facultad Regional de la Universidad Tecnológica Nacional, de la que fue decano.
El autor de los disparos fue Hugo Síntora, un expolicía que, en un juicio realizado catorce años después del hecho, fue condenado a reclusión perpetua en lo que se considera un asesinato por encargo, aunque nunca se individualizó a los autores intelectuales del mismo.
Su familia no cesó en buscar justicia. Una de sus hermanas, Marta Maders, se radicó en Rosario y siguió luchando por justicia, contra el olvido y la impunidad. Muchos sábados en las Señales contó los avances de la causa. Marta falleció el lunes 26 de octubre y en Señales la recordamos.
Marta, fue una incansable luchadora de la causa de su hermano. Era una mujer comprometida con lo social y la lucha por la justicia social, así la recuerda María de los Ángeles "Chiqui" González, ex ministra de Cultura de Santa Fe, que la conoció como docente: "yo era una adolescente en un colegio de monjas y la tuve a Marta Maders como profesora. Una persona sutil y cristalina que comenzó a producirme una atención muy particular por el otro. Junto a ella tuve la sensación de que tenía que dedicar mi vida a los otros, y en especial a los niños. Estamos obligados a poner los ojos en los otros". La Chiqui remarcó: "Marta me permitió descubrir la idea que está anclada aquí, que el único sentido de la vida es el otro, poner los ojos en el otro, en lo colectivo. Yo aprendí de vos que la lucha era el único camino".
Un oyente nos acerca este mensaje que recibió: "La noticia del fallecimiento de Marta conmovió no solo a familiares y amigos, sino a la sociedad que revive con el apellido la memoria de un asesinato casi impune, lleno de misterios sin resolver".
"El asesinato de Regino Maders sigue impune y la muerte de su hermana presagia que seguirá así, en esta Córdoba de las complicidades", se leyó en varios perfiles de Facebook. Sin autor/a conocido la publicación seguía: "Hace 2 días murió Marta Maders, hermana de Regino Maders, ex legislador cordobés asesinado por investigar la mafia de la UCR Cordobesa..." y remarcan: "Ningún medio de comunicación de Córdoba se hizo eco de la noticia... esta es la muestra que la muerte de Regino y la lucha de su hermana buscando Justicia, debe ser ocultada y olvidada de la memoria de los cordobeses".
En La Voz solo un aviso fúnebre de un familiar.
Del archivo de Señales rescatamos esta frase de Marta Maders, "todo lo que hemos dicho en estos años se está corroborando en el juicio, a través de los testimonios. Nosotros queremos realmente que se haga justicia por el asesinato de Regino. No una justicia regalada, sino una justicia basada en la verdad, para que tengamos la paz que no hemos podido encontrar. Hemos encontrado paz en la lucha. Ahora queremos encontrar paz en la justicia".
El Caso Maders sigue haciendo ruidoDel archivo de Señales rescatamos esta frase de Marta Maders, "todo lo que hemos dicho en estos años se está corroborando en el juicio, a través de los testimonios. Nosotros queremos realmente que se haga justicia por el asesinato de Regino. No una justicia regalada, sino una justicia basada en la verdad, para que tengamos la paz que no hemos podido encontrar. Hemos encontrado paz en la lucha. Ahora queremos encontrar paz en la justicia".
El 3 de septiembre de 2005, Marta leyó al aire esta carta que había escrito:
Un aniversario distinto, pero no tan distinto. Se cumplen 14 años del Crimen de Regino Maders...
Y debo, con las manos apretadas sobre el corazón, decir ¡Gracias! a todos los que desde ésta ciudad, que no es la de Regino han aportado a la lucha de la familia para conseguir justicia.
Este año, tenemos un logro que destacar:
Uno de sus asesinos, Oscar Hugo Síntora está preso. Se lo condenó a prisión perpetua, acusado de homicidio calificado por alevosía y precio o promesa remuneratoria, en carácter de co-autor pero la causa sigue y la investigación nos deberá llevar a otros partícipes y/o instigadores del Homicidio, lo que se encuentra en pleno trámite y en lo cual, además, se investiga la co-autoría de personas que intelectualmente habrían contribuido a la comisión del delito de asesinato en la persona de Regino Maders.
Con uno de sus asesinos preso éste aniversario es distinto... pero no tanto...Falta llegar a los personajes de siempre: los que cada vez juntan sobre sus espaldas más y más sospechas y a los que señalamos permanentemente como los que habrían necesitado que Regino saliera del medio pues les molestaba con su honestidad y valentía: Carlos Becerra, Mario Negri y Ortiz Pellegrini habrían "negociado la cabeza de Regino"; Medina Allende(actualmente con prisión domiciliaria señalado como "instigador del crimen"), habría pagado a los asesinos; Cafferata Nores (el Monge Negro) habría dado la protección intelectual y legal para el desarrollo de los hechos, y Eduardo César Angeloz, padre e hijo habrían apoyado la decisión de matar a Regino ya que necesitaban "que no denunciara," los ilícitos gracias a los cuales, todos ellos, engrosaron su patrimonio y poder político y económico... ¿por qué? Regino habría descubierto infinidad de ilícitos en EPEC, se habría opuesto terminantemente a la Ley de Juego, habría descubierto el tráfico de droga a través de la EPEC... Todo esto iba a denunciar... Lo silenciaron.
Del Juicio desarrollado entre octubre de 2004 y junio de 2005 , nos quedó como saldo, una acabada conciencia en la mayoría del pueblo cordobés y del resto del país que Angeloz (por tres veces Gobernador de Córdoba y candidato a presidente), junto a sus secuaces(actuales funcionarios a nivel nacional y provincial y "destacados" funcionarios desde la vuelta a la democracia) serían los asesinos de guantes blancos. Estamos yendo por ellos y la justicia de Córdoba deberá ponerse los pantalones largos, y dejar de lado los compromisos políticos y los intereses económicos y cumplir con su misión.
También quedó comprobado que los asesinos de Regino fueron y son miembros del famoso D2, institución criminal señalada como la más sangrienta y cruel de la década de los 70 y posteriores, de allí el terror que manifestó la mayor parte de quienes debieron testimoniar en la causa a los que la Cámara debió brindarles protección. Angeloz y quien fuera su Ministro de Gobierno en el momento del crimen, el Dr. Cafferata Nores, y los demás de la "banda" de intelectuales, se protegieron para cometer sus cuantiosos crímenes, ( no sólo Regino fue asesinado), tras un poder policial y jurídico mafioso, sin conciencia ni límites para conseguir sus objetivos.
Hemos avanzado, pero Regino no volverá... Nos quedan para imitar: sus ejemplos, su transparencia, su espíritu de lucha que nos fortalece y sus ansias de trabajar, como lo repitió en diversas oportunidades :
Regino está presente. Regino vive en las voces que los enemigos jamás podrán callar.
Por la paz, la vida y la democracia.Gracias por quien fuiste y por lo que nos dejaste.
Por Familia Maders, Marta Maders
Rodeada por el atronador silencio de los grandes medios de comunicación falleció hace unos pocos días Marta Maders, abnegada luchadora para que se hiciera Justicia con los autores intelectuales del asesinato de su hermano, Regino, senador radical acribillado a balazos en la puerta de su casa por sicarios al servicio del poder político cordobés el 6 de septiembre de 1991.
En los tiempos que corren, cuando el Gobierno Provincial -de distinto signo político al de 1991 pero también perteneciente al Partido Único Cordobés- arremete contra los derechos y conquistas de los trabajadores de Luz y Fuerza, mantiene la tarifa eléctrica más alta del país y, vía tercerizaciones y otras figuras de dudosa legalidad, impulsa la privatización aunque sea parcial de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC), una de las “joyas de la abuela” que no pudo rematar en el 2001 José Manuel De la Sota por la férrea oposición popular, fallece en Rosario Marta Maders, portadora de un apellido íntimamente ligado a esa empresa.
Consecuente denunciante de la complicidad de la superestructura política en el encubrimiento del crimen de Regino, parece oportuno reivindicar a esta “profesora de Literatura dulce y una luchadora incansable por destruir la impunidad alrededor del asesinato de su hermano”, según la define el periodista, escritor y legislador provincial santafecino Carlos del Frade quien ha investigado a fondo el Caso Maders.
En la “Isla del Cordobesismo” sacudida por el incendio de más de 300 mil hectáreas, los casos de “gatillo fácil” que se reproducen de manera sistémica y el entramado obsceno entre Política, Justicia y Policía que por acción u omisión le otorga luz verde al narcotráfico que envenena transversalmente a la sociedad, no parece casual que la comunicación hegemónica no mencione la muerte de Marta Maders, estando, como lo está, subordinada a la generosa pauta publicitaria oficial que derrama millones de pesos entre los difusores del discurso único. La misma billetera que repartía sus prebendas a los medios cordobeses durante los 12 años de gobierno radical que hubo desde el retorno de la democracia en 1983. En ese punto, como en tantos otros, el “Partido Único Cordobés” no muestra fisuras como garante de la gobernabilidad de un sistema que cada día tiene pobres más pobres y ricos más ricos.
Para Fabián Peralta, amigo de Del Frade, “Marta tomó la tarea de la denuncia acá en Rosario y en ese doloroso camino nos cruzamos. Nos acompañarnos mutuamente en distintos momentos. Ella arrastrando su dolor inmenso, presente, desgarrado. Nosotros como jóvenes idealistas o como dirigentes aferrados a esos ideales. Fue digna ante la prepotente injusticia. Nosotros la acompañamos con admiración y bronca. Conmovía verla junto a su incondicional marido, aferrada a esa carpeta donde con mucha prolijidad e inmenso dolor había recortado y pegado cada artículo que contaba el asesinato y todas las vicisitudes y manoseos que sufrió el proceso judicial”.
“Marta tenía una tenacidad que yo nunca volví a ver. Implacable en su mirada y en su anhelo de Justicia. Abrazó la causa de los DDHH con pasión. La familia siempre fue su motor y su refugio. Su razón de ser y su nostalgia.
No engendró odio, ni rencor. Solo quería Justicia. No pudo entender a los que traicionaron la amistad que Regino les había ofrecido. A cualquiera de nosotros nos hubiera pasado lo mismo. Marta fue ejemplo de lucha y de amor. Siempre estará en nuestros corazones y en el corazón de cada hombre y cada mujer que crean y pongan el cuerpo por un país con Justicia”, finaliza el retrato de Peralta.
Respecto a Regino Maders, en lo que refiere a su desempeño como ingeniero sobresale su importante papel como directivo en EPEC, cargo que desempeñaba al ser asesinado. Semanas antes, Maders había hecho una denuncia pública sobre ilícitos que habrían ocurrido en esa empresa durante el Gobierno del radical Eduardo Angeloz y también investigó sobre diferentes circuitos de narcotráfico. Era llamado por muchos “El senador del pueblo”.
En su minuciosa investigación Del Frade afirma: “La documentación que le voy a presentar a Alfonsín tiene pruebas sobre los negociados con la Empresa Provincial de Energía de Córdoba, el narcotráfico y la venta de bebés -le confesó Regino Maders a su hermano Juan dos días antes de ser cosido a balazos en la madrugada del 6 de setiembre de 1991. El ingeniero había descubierto las actividades que se desarrollaban durante la noche en la sede de la EPEC. Automóviles gemelos transportaban drogas e iban a distintos lugares de la provincia y a otros estados vecinos, como Santa Fe y Entre Ríos. Todas aquellas maniobras era conocidas, según dice Juan Maders, por el tres veces gobernador de Córdoba, Eduardo Angeloz” y por el actual Diputado Nacional Mario Negri, en ese entonces Vicegobernador de la provincia.
Este 6 de septiembre se cumplieron 29 años de su asesinato. Había descubierto el narcotráfico desde los nichos corruptos del Estado cordobés. La familia Maders, 29 años después, ya sin Marta en sus filas, sigue luchando contra el olvido y la impunidad.
*Vocal de la Comisión Ejecutiva Regional de la CTA Autónoma Río Cuarto. Congresal Nacional de la CTA-A en representación de la provincia de Córdoba
Fuente: Señales