jueves, 23 de mayo de 2019

Roberto Arias 1961 - 2019

Roberto Arias fue periodista, director de la radio FM Pocahullo, la radio más conocida de San Martín de los Andes y gran promotor de la causa mapuche. Muchos destacan su compromiso y coherencia: "Gestionar para los ricos no es hacer política, eso es hacer negocios. Hacer política es gestionar para los pobres", sostenía el comunicador popular.

"Nuestra tesis es que la radio es una herramienta de transformación social. Y no son para nosotros palabras. Lo hacemos cotidianamente, cuando damos información o cuando tenemos que poner el cuerpo junto a nuestros vecinos trabajadores o nuestros vecinos mapuches", dijo Roberto Arias.

La despedida de los compañeros y las compañeras de la Pocahullo
Compañerxs, comunicadores, radialistas, hacedores y creadores de la comunicación de los pueblos.

Con una profunda tristeza le compartimos la partida y la despedida a un Hermano, compañero, amigo, comunicador y revolucionario. El Roberto Arias. Fundador y uno de los directores de nuestra radio, la FM Pocahullo. La radio comunitaria del pueblo en San Martín de los Andes.

Se fue de nosotrxs el mas tozudo, el mas cabeza, el mas calentón, el mas rebelde.

Pero convencidxs de que tenemos un arma poderosa, que bien supimos construir, el mensaje de Roberto fué claro:
"El cambio del próximo siglo no será posible si no somos capaces de desarrollar una nueva relación con nuestros hermanos de los pueblos Originarios.

El cambio del próximo siglo, el de todas las naciones y pueblos no será posible si no somos capaces de construir una sociedad Intercultural fundada en el derecho a autodeterminación de los Pueblos"
Acá nos quedamos con la radio prendida, firme los pasos y el newen del territorio que el Roberto supo amar, defender y proyectar.
Kvme Amull pujv lamngen!
Tus compañerxs de la Pocahullo.
FM Pocahullo -La Comunitaria del Pueblo
Aquí estamos en esas despedidas que nos estrujan el corazón, Arias cabeza, te voy a extrañar viejo, pero voy a seguir desobedeciendote, apropiándome de la radio y no nos va a parar nadie. Agradecimiento y fortaleza viejo, vamo´y vamo´.
Marimari kom pu che
Roberto Arias fue uno de los referentes más importante de la Pocahullo, además de ser un militante social muy reconocido en su comunidad. “Vecinos sin techo y por una vivienda digna”, el “Barrio Intercultural” y otros proyectos contaron con su participación.

En el año 2005 el gobierno nacional otorgó una licencia para operar a una radio comunitaria indígena. La emisora funcionaba sin licencia y pertenecía a la comunidad indígena mapuche de Linares, ubicada en el paraje Aucapán, en la austral provincia de Neuquén. Roberto trabajó en la capacitación del equipo de la radio y advirtió que el reconocimiento del ComFeR no alcanzaba para garantizar el éxito del proyecto. "Las radios indígenas van a ser una realidad en breve en todo el país, pero si no tienen visibilidad los proyectos están destinados a la muerte", anunció.

Durante casi un año y medio, una vez por semana, Arias se trasladó a Aucapán para entrenar al equipo mapuche. "Lo más difícil es la administración de una radio", explicó Arias y agregó: "El ComFeR puede seguir habilitando radios para los mocovíes de Chaco o los wichíes de Salta, pero sin visibilidad la subsistencia de estos medios de comunicación, y por lo tanto el proyecto, no está asegurado", alertó Arias.

Trabajó para construir una nueva realidad, con las necesidades de las comunidades originarias: "la interculturalidad es poder mirarnos en los ojos de los otros y entendernos. Ojalá la interculturalidad nos permita construir comunidades donde el dolor no sea la constante”.

Roberto motorizo y propicio la creación de las primeras radios comunitarias Mapuche en varias zonas de Neuquén, fue parte del proyecto de la AM 800 Wajzugun en San Martín de los Andes.
Roberto Arias y la Pocahullo (del libro: El fin del periodismo y otras buenas noticias, editó La Vaca)
Es la radio más conocida de San Martín de los Andes, una FM que abre las puertas a los reclamos de los vecinos y que se ha convertido en un espacio de comunicación para el Pueblo Mapu­che."La radio comenzó siendo de cuatro personas del partid o radical que buscaban un medio para hacer campaña y ganarle al Movimiento Popular Neuquino, tradicional brazo del justicialismo en Neuquén",recuerda Arias.Pero mientras los patrones intentaban -sin suerte- su maniobra política, los trabajadores de Pocahullo comenzaron a relacionarse con la audiencia de un modo distinto: tendían lazos solidarios y abrían las puertas de la radio.

Derrotados en las elecciones del 90, los cuatro radicales quisieron venderla. Así llegó el día en que Arias dijo: "No pueden, porque esta radio que quieren vender la construimos nosotros".Y comenzó la pelea. En el ida y vuelta, los dueños ofrecieron venderles los equipos transmisores. "La pregunta era, entonces, de dónde sacábamos nosotros esa cantidad de plata ".La respuesta la ofreció la audiencia. Ciento cincuenta oyentes realizaron una colecta. Aportaron 60 pesos-dólar cada uno, y con eso adquirieron los equipos de la radio. Se deshicieron de los patrones y se organizaron como Cooperativa de Consumo y Provisión de Servicios Pocahullo. Así dieron vida, junto con los trabajadores, a la primera radio comunitaria de la zona.

La información como herramienta. La cooperativa duró poco.Una normativa nacional determinó que cada integrante de la comisión directiva debía aportar cien dólares, un imposible. Obligados a cambiar de figura jurídica,se convirtieron en la asociación civil sin fines de lucro Jaime de Nevares, en honor al obispo fallecido. Hoy la integran 150 vecinos que dan trabajo a so personas que sostienen la programación. Tres ocupan los cargos directivos, que pueden ser removidos en cualquier momento. Reciben la ayuda de pasantes de la carrera de Comunicación de la Universidad Nacional del Comahue y las decisiones de contenido se toman entre todos en asambleas semanales. Se financian con publicidades y algunos esporádicos aportes internacionales. Por ahora, decidieron que no comercializarán los espacios de la emisora. "Nuestra tesis es que la radio es una herramienta de transformación social. Y no son pal abras. Lo hacemos cotidianamente, cuando damos información o cuando tenemos que poner el cuerpo junto a nuestros vecinos trabajado res o nuestros vecinos mapuches", concluye Arias.

La dictadura militar obligó al Pueblo Mapuche de San Martín de los Andes a sufrir un prolongado y silencioso encierro. Recién a partir de la llegada de la democracia sus integrantes comenzaron, lentamente, a mostrar su cultura.

Pero en los 90, con el arribo masivo de empresas a la Patagonia, la pelea por la propiedad de las tierras provocó una batalla que perdura. En esa compleja realidad comenzó a intervenir la Pocahullo. "No solamente ponemos el grabador al funcionario. Vamos a reuniones, a cortes de ruta y a movilizaciones."

Entre las muchas ideas que llevaron adelante los periodistas de Pocahullo para apoyar la organización de los pueblos originarios resalta la coordinación de la primera emisora FM mapuche y, ahora, la organización de la primera AM. Pero el aporte más interesante fue la creación de la Red de Comunicación Rural, que consistió en instalar pequeñas cabinas de transmisión en cada paraje, capacitando a las personas que viven allí para que puedan utilizarlas. Las cabinas están comunicadas con la radio y se utilizan para llevar a cabo "misiones salvadoras" cuando nieva y queda gente aisla­da. Pero también jugaron un rol importantísimo en los dos cortes de ruta que realizó el Pueblo Mapuche en 2002. Arias duda un momento antes de comenzar a dar detalles, pero finalmente despliega un apasionante relato:

"La Red de Comunicación Rural tiene una frecuencia abierta que puede escuchar cualquiera. Cuando se desató el conflicto con las comunidad es mapuches, contaron su situación desde las cabinas.Comunicaban cuáles iban a ser las medidas de fuerza, por ejemplo. En ese momento nos empezaron a interferir.

Descubrimos que era la Brigada de Investigaciones de la Policía provincial. Lo primero que hicimos fue disimular: hacer como que no sabíamos quiénes eran. Lo segundo,fue denunciar la violación contra la libertad de expresión. Y lo tercero, aprovechar que nos escuchaban para darles información falsa. Hacíamos ir a la policía a lugares donde no pasaba nada. Así, facilitábamos la llegad a del movimiento hasta el verdadero lugar de la protesta. Les hacíamos creer que teníamos más fuerza; que había gente apostad a en diferentes lugares estratégicos que se comunicaban entre sí. En realidad , estábamos todos juntos y lo que hacíamos era pasarnos el handy uno al otro".

Por supuesto, la historia de esta batalla tiene algunos tramos menos luminosos: "Nuestra emisora fue saboteada, robada y hasta hemos recibido amenazas de muerte", asegura Arias. En 2002, alguien entró a las oficinas de Pocahullo y se llevó una computadora. Esa máquina atesoraba una grabación en la que el director de las Juntas Vecinales proponía incendiar la radio. Al día siguiente, el auto de uno de los trabajadores de la emisora apareció con una estaca clavada en el asiento y un mensaje contundente:"Te vamos a matar". Por si hacían falta las aclaraciones, dos días más tarde el secretario del intendente municipal esperó a Roberto Arias en la puerta de la radio armado con un cuchillo y un revólver. Arias logró esquivarlo y realizó la denuncia.Y, si bien nunca apareció la computadora, el director de las Juntas Vecinales debió renunciar.

Si te gusta el durazno bancate la pelusa
Por Claudia Villamayor
Si te gusta el durazno bancate la pelusa (2005). Roberto Arias es un Comunicador Popular Intercultural de la Patagonia. Fundador de FM Pocahullo de San Martín de Los Andes. Hace poquito Pablo Antonini le hizo una entrevista larga para una Investigación que hacemos junto a un equipo de investigadores e investigadoras de la economía política de la comunicación popular. Lo conocí hace 27 años (1991) cuando el movimiento de radios comunitarias argentinas ya llevaba ocho años desde la reapertura de la democracia en 1983. Roberto, de carácter duro y sensibilidad exquisita. Mas de una vez me dijo, si escribes sobre la comunicación popular o las radios comunitarias primero tenés que barrer una. yo me enojaba por eso allá por los inicios de los años noventa. y yo le decía a él -que te haces el humilde vos, asumite capo-. siempre me la tensionaba con la academia y la universidad, pero jamás nunca perdió la ternura y yo hoy recuerdo lo mucho que hablamos allá en los noventa y lo que pensábamos de los medios populares y la comunicación en la Argentina. y lo que nos reíamos!!!!. yo no olvidaré nunca aquellos abrazos. Nos poníamos de acuerdo en tres cosas: en el vino que nos tomábamos, en la justicia social y en la perspectiva intercultural. Roberto amaba el compromiso con los pueblos originarios y lo suyo no era de escritorio.Te la mandaba a guardar y te decía radicalizado siempre lo que pensaba. Te shoqueaba y después entendías, sobre todo su corazón. Acompañó y se comprometió con cuanto lucha por las tierras, el agua o todo lo que les ha sido arrebatado al pueblo mapuche. Su visión Intercultural, su vida. Yo me acuerdo, nunca me olvido. Juntos vimos nacer primero lo que se llamó la Federación Argentina de Radios Comunitarias y luego el Foro Argentino de Radios Comunitarias. yo creía en ese momento de hace 27 años y ahora también, que la comunicación popular no tiene estrellas, ni sabiondos porque lo que nace en lo colectivo tiene infinitamente más potencia que cualquier culorotismo personalista. A Roberto no le gustaban los manda parte, ni las vanguardias esclarecidas. Por eso, cuando alguien no se bancaba las decisiones de las mayorías en la red, me decía al oído: Deciles, "Si no te gusta el durazno, bancate la pelusa". Roberto se fue para siempre y yo quedé parada en la autopista ayer cuando lo supe, no pude seguir manejando, ni tampoco parar de llorar. Venia de La Plata rumbo a Buenos Aires. Me quedé a solas. Hacia unos años que no lo veía. sabia, siempre supe, pero no nos habíamos visto. Ayer, en la ruta le escribí a cuatro personas o cinco: Me duele el alma...
Con profunda tristeza y desconcierto abrazamos a FM Pocahullo que hoy despide a Roberto Arias, compañero periodista, laburante y militante de la comunicación popular de San Martín de los Andes.

De los que anduvo en los 90 construyendo la Asociación Norpatagónica de Radios Comunitarias antes de que se armara lo que hoy es FARCo

Primero trabajó en una radio comercial y después fue armando de las primeras comunitarias, FM Pocahullo y también la radio mapuche Wajzugun AM 840, promoviendo la organización Vecinxs Sin Techo, peleando por la legalidad de los medios comunitarios, siempre construyó por encontrarnos en la interculturalidad.
Hasta siempre Roberto!
Fuiste y serás siempre semilla.
#radioxradio