En un reportaje publicado en Infobae de hoy, preguntado el Jefe de Gobierno por el apaleamiento y detención arbitraria del colega Bernardino Ávila a manos de la Policía de la Ciudad, responde: “No sé, le pegó con la cámara al policía”. Sobre el origen del conflicto :
“se ve la agresión de varios de los manifestantes a policías”.
No es cierto lo que afirma el señor Rodríguez Larreta. Tal vez mirar sólo las imágenes que más le convienen a su policía lo induzca a engaño, porque si hubiera observado la realidad, y no su interesado recorte, sabría que:
- La treintena de manifestantes de la cooperativa Mady Graf no cortaron la avenida Entre Ríos, ocupaban solo dos carriles. Repartían cuadernos pacíficamente y a cara descubierta. Su objetivo era hacer visible el reclamo y no obstruir el tránsito.
- El despliegue policial de más de cincuenta efectivos cortó el tránsito y empujó a los manifestantes sobre la vereda, sin atender explicaciones ni respetar el diálogo solicitado.
- En esas circunstancias el oficial primero Germán Raña hostiga al reportero gráfico, con el objetivo de impedirle su labor, haciendo contacto físico amedrentador, e intentando sujetar el brazo con el que Ávila tomaba fotografías. Este se retira y el oficial lo persigue imprecándolo, para finalmente abalanzársele amenazándolo con su bastón. Es en esas circunstancias en las cuales el fotógrafo levanta la cámara y el oficial la golpea en su alocada embestida.
- A raíz del golpe el oficial primero pierde toda compostura y ataca con golpes de bastón y puño al fotógrafo, y a todo civil que se le cruce por delante. Lejos de contener su acceso de furia, el resto de los policías se pliega a su desborde y golpean y detienen a los dos reporteros gráficos, a un trabajador de la cooperativa y un transeúnte, que intentaron, junto con otros, impedir la enajenada golpiza.
Pese a su gravedad, lo que más nos preocupa es que no ha sido un hecho aislado. Y la cerrada defensa del Jefe de Gobierno al mal accionar policial solo nos augura su repetición.
Entre el 1 de septiembre y el 18 de diciembre de 2017 la policía de la Ciudad protagoniza una escalada de violencia contra la prensa, que dejan 23 socios de ARGRA heridos, la mayoría por balas de goma disparadas deliberadamente y a corta distancia. Entre el 14 y el 18 de diciembre hubo 54 periodistas heridos en total, contabilizando fotógrafos, periodistas y camarógrafos, 47 por balas de goma y gaseados. Las agresiones sistemáticas, los roces, empujones y malos tratos se han convertido desde entonces en el modo habitual del trato con la prensa.
Sostenemos que la policía de la Ciudad no sólo no respeta la libertad de informar y de prensa, sino que ha tomado a los trabajadores de prensa como objeto directo de su violencia.
Pedimos por tanto del señor Jefe de Gobierno de la Ciudad que ordene a su policía que actúe a derecho y respete el derecho a informar y a ser informados que les asiste a todos los ciudadanos.
Comisión Directiva ARGRA