La Comisión Gremial Interna alerta a lectores y clientes del servicio periodístico de la agencia sobre la calidad, el rigor y la consistencia de los contenidos que se emitirán en los próximos días durante la cobertura de la reunión del G20. Las posibles fallas, falencias o retrasos en la publicación de la información periodística serán consecuencia directa y exclusiva de la decisión del Directorio de afectar a dicha misión a un reducido equipo periodístico del que fueron marginados decenas de especialistas.
En cualquier parte del mundo, una cumbre de líderes mundiales de la envergadura de la que acogerá Buenos Aires, es la oportunidad para que cualquier agencia nacional se luzca y se posicione como referencia regional, sobre todo en un contexto de achicamiento del mercado de agencias de noticias. Nada de esto sucederá en los próximos días.
En una decisión inexplicable, las máximas autoridades de la agencia pública autorizaron al sub gerente periodístico Luis Sartori a tomarse vacaciones durante la semana en la que se realiza la cumbre, una decisión que dejará acéfala a la redacción periodística, considerando que el Gerente Periodístico Daniel Capalbo está de licencia por problemas de salud.
Así, de apuro y sin planificación, el medio público argentino ofrecerá una cobertura limitada y sesgada para la que la empresa eligió, salvo honrosas excepciones, a periodistas que antes que la idoneidad y la experiencia en coberturas internacionales, tienen en común haberse alineado con el Directorio durante el paro paralizó a la agencia pública durante cuatro meses. Después insisten en dar lecciones de periodismo y pluralidad de voces.
Entre la docena de periodistas acreditados a las actividades oficiales del G-20 no figura ninguno de los cronistas o editores de la sección Internacionales, que habitualmente lleva adelante la cobertura sobre la agenda que debatirán los líderes mundiales. Ninguno de ellos fue habilitado por la agencia para acceder de manera presencial a las reuniones y actividades oficiales, por lo que no tendrá contacto en tiempo real con sus protagonistas.
Un sólo periodista de la sección Economía fue acreditado para acceder a las sedes oficiales donde transcurrirán las reuniones de mandatarios que tienen entre los temas centrales de su agenda la guerra comercial que protagonizan Estados Unidos y China.
No valió siquiera que uno de los funcionarios a cargo de la cumbre diplomática sea el Coordinador del Sistema de Medios Públicos, Hernán Lombardi: a 24 horas del inicio de la cumbre, aún no está resuelto cómo trasladarán al puñado de cronistas acreditados a los puntos de acceso al perímetro restringido, ni cómo llegarán a la redacción quienes fueron convocados para trabajar desde la redacción de la avenida Belgrano.
La decisión de los funcionarios preocupa pero no sorprende. Son estas mismas autoridades las que desde la suspensión de las medidas de fuerza, el 22 de octubre pasado, son incapaces de resolver los problemas básicos y cotidianos de este medio.
Frente a este panorama, una vez más, volvemos a señalar que las posibilidades de una cobertura exitosa, a la altura del desafío que tenemos por delante como medio público, será producto del compromiso de los periodistas de TelAm con su trabajo y profesión, y no de la lastimosa y negligente actitud de los funcionarios a cargo de la agencia.
Comisión Gremial Interna TelAm - SiPreBA