lunes, 13 de marzo de 2017

Primer año del gobierno de Macri: El Grupo Clarín facturó un 48,2% más que en 2015

El Grupo Clarín reportó a sus inversores sobre los resultados financieros obtenidos a lo largo del año 2016. En el ejercicio 2016 registró ganancias por 4.179.611.186 millones
Las ventas netas alcanzaron 41.178,1 millones, esto significa un incremento del 48,2% con respecto al año 2015, principalmente debido a un crecimiento del número de suscriptores de Cablevisión - Fibertel y, en menor medida, por la consolidación de Nextel Argentina en el segmento de TV por Cable, acceso a Internet y Telefonía.

Sobre ese total Cablevisión - Fibertel aportaron 30.571,2 millones, es decir, más del 70% de sus ingresos totales. Esa facturación fue un 51,9% más alta con respecto al año 2015, cuando las ventas totalizaron 20.125,4 millones.

La cantidad total de abonados de cable básico alcanzó los 3.527.674 en diciembre 2016, aquí se nota una leve baja en comparación con los 3.532.577 reportados en la misma fecha de 2015.

Los abonados de Internet alcanzaron 2.182.598 en diciembre 2016, comparados con los 2.025.860 de diciembre 2015.

El EBITDA (Earnings Before Interests, Taxes, Depreciations and Amortizations) es un indicador que hace referencia a las ganancias de la compañía, tuvo un crecimiento de 42,3% con respecto al año 2015, alcanzando 11.896,6 millones, principalmente originado por mayores ventas en el segmento de TV por Cable, acceso a Internet y Telefonía.

El Average Revenue Per User (ARPU por su sigla en inglés) representa el ingreso promedio por usuario; es decir, el gasto que un usuario promedio dedica al servicio. En el caso de Cablevisión Fibertel alcanzó 643,5 pesos, un aumento anual del 34,8 %. En tanto el ARPU de Nextel totalizó 243 pesos. La operadora de telefonía móvil Nextel al 31 de diciembre de 2016, tenía un total de 1,1 millones de subscriptores entre los segmentos de postpago y prepago.

La ganancia del período 2016 para el Grupo fue de 4.179,6 millones, un incremento de un 43,3% con respecto a los 2.915,9 millones reportados en 2015.

La empresa recordó que el 28 de septiembre de 2016 los accionistas de Grupo Clarín aprobaron la escisión de la participación de Grupo Clarín en Clablevisión SA, la subsidiaria de Grupo Clarín que opera el segmento de Televisión por Cable, Acceso a Internet y servicios de Telefonía, en una nueva Sociedad con el nombre de Cablevisión Holding SA (“CVH”). Una vez completo el proceso de escisión, CVH será dueña directa e indirectamente del 60% de Cablevisión.

Grupo Clarín retendrá sustancialmente todos los activos y pasivos y continuará con las operaciones de los restantes segmentos que no se aloquen específicamente a CVH.
El Grupo Clarín aprovecha para hablar de la situación de AGR:
"Artes Gráficas Rioplatense Artes Gráficas Rioplatense S.A. (AGR) es una empresa de producción gráfica integral fundada en 1976.

En los últimos diez años, a partir de los enormes cambios en el consumo, derivados de las nuevas tecnologías, ha visto reducir el peso de su negocio tradicional e incrementar el de otros segmentos llamados a tener mayor proyección en el futuro, como la impresión variable o la distribución y logística.

Durante 2016, y en línea con el menor nivel de actividad que reflejó la economía en su conjunto, las entregas mostraron una caída generalizada en todas las líneas de producto. El sector gráfico tradicional viene compitiendo desde hace años con las nuevas tecnologías y vías de comunicación (plataformas digitales) por lo cual las grandes tiradas de impresión en papel van dejando lugar a publicaciones más segmentadas y específicas. Por ello, y debido a la fuerte reconfiguración que atraviesa el sector de la impresión comercial, fenómeno global del que no escapa la Argentina, a principios de 2017 AGR se vio en la necesidad de reestructurar sus actividades.

El 16 de enero anunció el cierre de su taller gráfico del barrio de Pompeya, que atendía el segmento de impresiones comerciales masivas. AGR intentó infructuosamente, durante los últimos años, explorar caminos que permitieran atenuar los efectos de la caída en la impresión comercial masiva y preservar, aunque sea parcialmente, la sustentabilidad del taller de Pompeya.

Pero lamentablemente el enorme desafío que implicaba este cambio en la industria (hoy orientada a la impresión segmentada, personalizada y distribuida) no fue acompañado por la comisión interna de delegados de ese establecimiento, que rechazó sistemáticamente todas las propuestas realizadas.

El mismo 16 de enero por la mañana, un grupo de aproximadamente 40 personas, incluidos los miembros de esa comisión interna, ingresó con violencia a la sede del mencionado taller, dañando puertas de ingreso, ventanas, muebles y cámaras de seguridad, y desalojando con agresiones al personal que se encontraba en la planta.

A la fecha de emisión de esta memoria, varios de ellos aún se encontraban en la planta, aunque la inmensa mayoría de los empleados de la misma (el 80%) ya habían acordado su desvinculación y cobrado sus indemnizaciones.