lunes, 25 de enero de 2016

A 19 años del brutal asesinato: No nos olvidamos de Cabezas

El lunes 25 de enero se cumplirá un nuevo aniversario, el número 19, del asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas en una cava de Pinamar. Cabezas trabajaba para la revista Noticias y fue muerto y quemado por la acción de mostrar, y de hacerlo con uno de los rostros desconocidos por la sociedad, el de Alfredo Yabrán, poderoso empresario que tenía lazos con el gobierno y los negocios menemistas.

Cabezas fue muerto por ser periodista, por trabajar con la información a través de la imagen y de hacer visibles aquellos hechos y rostros que formaban parte de la realidad y por la que había recibido amenazas en los meses previos a ese 25 de enero de 1997. Su asesinato tuvo como telón de fondo la disputa entre el ex presidente Carlos Menem y el ex gobernador de Buenos Aires Eduardo Duhalde, con lo que la justicia actuó con extrema lentitud y todo sirvió como mensaje mafioso, aleccionador para los trabajadores de prensa y toda la sociedad: con el poder económico, financiero, político y mediático no se juega: se puede mirar, pero no se debe ver y mucho menos entender.

Ya son muchos los años que pasaron y también las vidas ahogadas por ese mismo poder, la de la dirigente de las meretrices rosarinas, Sandra Cabrera, la de Jorge Julio López, testigo en el juicio que condenó al genocida Miguel Etchecolatz, la de Silvia Suppo, a la vez testigo y querellante en los juicios por delitos de lesa humanidad. Y es aquí que la Argentina revive un estado de pérdida de derechos, entre ellos el de la libertad de expresión y el derecho a la información.

Los poderes entrelazados no descansan, sólo simulan haber bajado la guardia y eligen cuidadosamente a quienes los representan. Por eso en el primer día de gestión del gobierno de Mauricio Macri, el 11 de diciembre, se conoció uno de los decretos de necesidad y urgencia que ya iba contra la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y desde ahí los ataques fueron cada vez más fuertes hacia la norma que nunca reguló contenidos, pero sí quiso ponerle un límite a los monopolios y concentraciones mediáticas. Esa ley, deformada ahora por decreto, era una llave hacia la expresión de las voces más plurales y la posibilidad de que los distintos sectores y actores sociales tengan voz.

Como cerraron los ojos de Cabezas, hoy se quiere tapar la capacidad de que los argentinos y argentinas construyan una visión crítica e integradora del mundo en el que se vive. Por eso la muerte de Cabezas no es sólo un recuerdo, sino que su trágico significado adquiere preocupante actualidad.
  • Por la defensa de la libertad de expresión y el derecho a la información
  • Por la plena vigencia de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual
  • Por la defensa de los puestos de trabajo
El Sindicato de Prensa Rosario convoca a las y los trabajadores de prensa y de la comunicación a concentrarse para el tradicional ‘camarazo’, hoy, lunes 25, a las 19.30, en plaza Pringles donde se encuentra la placa que se colocó en memoria de JLC.
Sindicato de Prensa Rosario

En Santa Fe
Se cumplen 19 años del asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas en una cava de Pinamar. Cabezas trabajaba para la revista Noticias y fue muerto en respuesta a la acción de hacer público el rostro del poderoso empresario Alfredo Yabrán, hasta ese momento desconocido para la mayoría de los argentinos. La Asociación de Prensa de Santa Fe y ARGRA invitan a participar del acto conmemorativo que se llevará a cabo hoy a las 10 hs, en la Plaza del Soldado.

Carta de Gladys Cabezas
"Hoy nos vemos"
¿Cómo va, José? Hace 19 años ya, 19 años desde que te fuiste. ¿Y sabés qué? Pasaron muchas cosas... Si tenés un ratito, te las cuento mediante La Garganta.

De papi, no te voy a decir nada, porque hace 4 años está con vos en una estrellita, cuidándonos a todos. Mami no anda bien, ya ni me conoce cuando la voy a ver.

De tus hijos, ni hablar... ¡Son excelentes! Agus, la mayor, es maestra como yo, salió a la tía. Y en los veranos, le gusta viajar: este año, se fue a Bolivia. En cuanto a Juan, creo que ya se amigó con vos y este año irá a tu aniversario, en Pinamar.

¿Adiviná qué? El otro día me dijo que además de ser una tía copada, ¡soy una capa de la vida! Ja, en serio, me mató de llanto el pendejo. Sí, tu hijo. Y Cande, la más chica, está en España con Cris, tu mujer. Cada vez que viene de visita, se hace un tatuaje con mi complicidad, porque a la mamá mucho no le gusta. Pero el año pasado se hizo uno con tu nombre, en el brazo. ¡Y escuchate ésta! Para el cumple de 18, le regalé el cuadro que mami y papi nos sacaron cuando éramos bebés, ése de las caritas. Quedó re copada.

Bueno, en realidad, creo que te cuento todo esto porque, como sabrás, de lo tuyo nada, hermano. Los acusados por tu asesinato, Sergio Cammaratta y Héctor Retana, ya están muertos, mientras que los otros, Gustavo Prellezo, Gregorio Ríos, Aníbal Luna, Horacio Braga, José Luis Auge y Sergio González, ya están todos libres los hijos de puta. Igual no te hagas drama, chabón, porque te juré que los voy a perseguir toda mi vida y donde estén... Donde estén, les recordaré lo que son: ¡ASESINOS!

Te quiero y hoy nos vemos, eh, en Pinamar, porque yo sé que nos estás mirando.

Cuida a papi, de mami me encargo yo.

Te amaré siempre y lucharé siempre, te lo prometo, hasta el día que nos volvamos a ver allá arriba. Esperame, espérenme, porque yo también estaré con ustedes, pero no te asustes, que todavía falta mucho.

Tu hermana,

Gladys

Pd: Voy a ser abuela nuevamente, José, tres nietos ya: estoy vieja, pero no me olvido, nadie se olvida... Acá todos decimos: Cabezas, ¡presente!