En Uruguay el fundador del diario La República, Federico Fasano, regresa a la administración del diario. Se comprometió a pagar los salarios de los trabajadores y evalúa las adquisiciones de la mayor parte del paquete accionario
El histórico propietario del diario La República, Federico Fasano, retornará a ese medio en calidad de "inversor" y buscará revertir la situación actual de los trabajadores.
Según informa El Observador, Los trabajadores de La República, del sector APU, resolvieron en la asamblea seguir trabajando luego de la intervención de Fasano en la administración.
Un vocero del diario dijo al mencionado matutino que Fasano "se hará cargo de la gestión y el pago de sueldos" por lo menos hasta el 30 de abril. En ese período se hará una auditoría para definir si recompra el 100% del paquete accionario.
Fasano, fundador de la República, se había retirado del diario a fines de 2012, cuando vendió su parte al empresario argentino Gustavo Yocca.
Los trabajadores del diario se encuentran en conflicto ante la falta del cobro de sus salarios desde el mes de octubre. En estos días realizaban una edición de emergencia, y habían dado tiempo hasta el viernes para ir a la huelga.
La asamblea de trabajadores de Asociación de Prensa del Uruguay a la opinión pública
Anoche la asamblea de trabajadores de APU resolvió por unanimidad un preacuerdo con la empresa presidida por el Esc. Gustavo Yocca a fin de realizar el máximo esfuerzo por intentar salvar al diario al tiempo de cobrar nuestros haberes
Las características y detalles del acuerdo se encuentran en vías de concreción, lo que seguramente se terminará de confirmar la semana que viene.
Sí se puede adelantar que el Dr. Federico Fasano se comprometió ante nosotros a facilitar el dinero para los sueldos de los trabajadores mientras se realiza una auditoría a fin de determinar la viabilidad del diario.
Agradecemos todo el apoyo recibido en estos días, por APU, el PIT-CNT, colegas de distintos medios, lectores, ciudadanía.
Mañana la edición del diario volverá a ser normal.
Seguimos en la lucha por defender nuestra fuente de trabajo.
Asamblea de Trabajadores de la Asociación de Prensa del Uruguay de La República
Cañón de largo alcance
Por: Dari Mendiondo Bidart
La existencia del diario La República en el escenario periodístico uruguayo, ha sido y es un factor incentivador del proceso de acumulación de fuerzas; sería impensable, en la dura confrontación de los dos modelos que emulan, compiten y luchan por ganarse la comprensión y el apoyo de los electores, no contar con el diario La República.
Desde que se incorporó a la arena periodística nacional, La República fue y es una herramienta al servicio de las fuerzas del cambio en paz, es decir, del modelo progresista antiliberal y liberador.
Ha sido y es una voz de los sin voz; objetivamente, aquí, en esta nota, no hay nada subjetivo, es la descripción de la realidad; el diario nunca fue un órgano del Frente Amplio, desde siempre defendió y nunca dejó de defender las posturas, las posiciones, no sólo del Frente, sino de los que ha sido el Primer Gobierno Departamental de Tabaré y, posteriormente, el gobierno nacional.
La nota que escribo trata de describir los hechos, duros y reales, en política, el diario plural no sólo lo ha sido, sino que se movió con comodidad y elocuencia en las tradiciones democráticas de nuestro pueblo, pero, hay que saberlo: siempre estuvo y está del lado del campo popular.
Dificultades financieras lo colocan al borde de la quiebra, con la consecuencia para sus trabajadores/as, compatriotas ansiosos de trabajo, lo mismo que ser considerados como deben cuando se les adeudan jornales, licencias y demás leyes sociales. No es mi asunto analizar las causas de tal dificultad económica de la empresa.
Soy consciente de que una empresa que en este medio no se somete al gran capital nacional o foráneo tendrá viento en contra, aislamiento, silencios y generosas cajas fuertes cerradas a cal y canto.
Me sorprende no ver (capaz que hay) mayor sensibilidad de parte de la conducción del Frente Amplio, ni que hablar de las posibilidades del Estado. Estoy convencido de que sin regalías y nada que no sea lo normal, siempre se puede. Claro está, se necesita definir una política que no tenga la prensa escrita como un adorno, sino un instrumento vital para la formación cultural de una nación que quiere ciudadanos cultos y bien informados. Qué hace falta: actuar
Fuente: Diario La República
Ver anterior: Antes de comprar La República "primero lo hablé con Néstor Kirchner"