Por: Gustavo González
Cristina Kirchner tuvo la transparencia de darle explícita continuidad a su política de medios: el decreto que firmó negándoles a los fundadores de Perfil dos canales de TV digital es el moño perfecto, explicación final e irrefutable, sobre el verdadero motivo por el cual pergeñó la Ley de Medios Audiovisuales.
Si la Presidenta hubiera querido que la norma diera origen a más pluralidad de voces y acotara a los medios con posiciones dominantes, habría que decir que el plan le salió mal, muy mal, una triste desilusión para el emotivo colectivo kirchnerista.
Pero si damos por hecho que es una líder inteligente que quiso hacer lo que salió, entonces habrá que decir que termina su mandato cumpliendo con un doble cometido:
- No abrir el universo audiovisual a nadie que no conozca de al menos una tarde en Olivos y algún negocio cercano.
- Ladrar, pero no morder, a Clarín, el coprotagonista de aquella película épica titulada La madre de todas las batallas, a quien no le restó un milímetro de penetración de sus grandes medios.
La voz que corría en los pasillos de esa línea técnica de la AFSCA (profesionalista, pero conocedora de los manejos políticos históricos del organismo) indicaba incluso que a Martín Sabbatella se le había ocurrido una idea genial: ofrecerle a Cristina que se aceptara una de las ofertas, la de Caras Tevé, y se rechazara la de Perfil TV, a la que consideraban potencialmente nociva.
Por eso los técnicos se sorprendieron cuando días antes de que se declararan desiertos los dos concursos les pidieron que aprobaran las presentaciones de Cristóbal López en una de las frecuencias, y la de Sergio Szpolski en la otra.
Se negaron a hacerlo alegando que presentaban problemas insalvables y Sabbatella instruyó a los directores oficialistas a declarar desiertas ambas licitaciones para no otorgárselas a los fundadores de Perfil.
Ya se conoce la excusa que ahora ratifica la Presidenta con su decreto: los Fontevecchia se habían olvidado de presentar sus pasivos, por lo cual no se podía conocer su real capacidad patrimonial.
Lo cierto es que Alberto Fontevecchia presentó claramente la declaración jurada de su pasivo (representa el 4,79% de su patrimonio) y Jorge Fontevecchia del suyo (un 1,22% de su patrimonio). Ambos demostraron en sus ofertas que poseían el respaldo económico necesario.
Si a Sabbatella de verdad se le ocurrió convencer a Cristina de cuidar las formas y simular pluralidad, la conoce bien poco.
Ella es coherente consigo misma, aunque algunos puedan decir que la coherencia boba es la obsesión de mentes ruines.
En Perfil creemos conocerla mejor, a ella y a su difunto marido. Por eso en su momento se decidió iniciarles un proceso judicial para que dejaran de discriminar a esta editorial con dinero que no les pertenecía. No nos imaginábamos que hubiera otra forma de que entendieran que está mal usar a su antojo los fondos y los bienes públicos.
Y fue la Justicia la que les puso límites. Tardíamente, después de años de chicanas judiciales y desobediencias a la propia Corte, pero el límite llegó y sentó para siempre jurisprudencia sobre lo que se puede y no se puede hacer con la publicidad del Estado.
En los próximos días se presentará una acción de nulidad para suspender los efectos del decreto firmado por la presidenta de la Nación.
También se exigirá que se deje sin efecto el llamado a dos nuevas licitaciones para esas frecuencias que aprobó en la reunión de ayer la mayoría kirchnerista del directorio de la AFSCA.
La intención, obvia, es que ya que no pudieron entregarles los canales a los amigos debido a errores insalvables de sus propuestas, ahora les darán algunas semanas más para corregirlas y cumplir con el objetivo de cerrar la operación antes de dejar el poder el 10 de diciembre.
La Presidenta es coherente. Perfil también.
*Director periodístico de Editorial Perfil.
AFSCA reabrió concursos de TV digital
Por: Gabriel Ziblat
La Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) reabrió ayer los dos concursos por canales de televisión digital abierta que habían sido declarados desiertos luego de que se rechazaran las dos presentaciones de Editorial Perfil.
En esa primera instancia, las propuestas de Perfil competían contra Cristóbal López y Sergio Szpolski. Ayer, luego de que el jueves se publicara el decreto de Cristina Kirchner declarando desiertos esos concursos, el directorio encabezado por Martín Sabbatella aprobó la nueva convocatoria (con el voto negativo de Gerardo Milman).
No obstante, Perfil mantiene abierta la vía judicial, al considerar injustificado el rechazo de la AFSCA.
Se fijó el 13 de noviembre como la fecha para la apertura de sobres. Así, comenzaron a surgir las especulaciones respecto de los plazos para finalizar el concurso. Fuentes del organismo consideran que el oficialismo querrá adjudicar esas licencias antes de que Cristina deje el poder, el 10 de diciembre. “Vamos a vigilar con mucho cuidado la neutralidad y la objetividad, que no fue demostrada hasta ahora”, expresó el director por la UCR, Marcelo Stubrin.
Editorial de Noticias: Otra mentira oficial
Esta semana, en el Boletín Oficial de la República Argentina se reconoce un escándalo. El Gobierno rechazó –mediante un tecnicismo falaz– las propuestas de los fundadores de Perfil para licitar dos canales de televisión digital abierta (TDA). La noticia ya era conocida, y fue explicada en detalle en la edición anterior de Noticias. No es que nos sorprenda esta arbitrariedad gubernamental, luego de doce años de aprietes y discriminación. Pero su difusión oficial en letras burocráticas impacta por la dimensión del capricho abusivo que puede ser desplegado desde el control del Estado.
La cuestión es tan simple como que una editorial con cuatro décadas de experiencia en contenidos periodísticos tiene derecho a incursionar en medios audiovisuales. Por eso los fundadores, Alberto y Jorge Fontevecchia, decidieron presentarse para la adjudicación de dos frecuencias para lanzar Perfil TV y Caras Tevé. Para eso, había que competir con amigos del Gobierno, como Sergio Szpolski y Cristóbal López, cuyas propuestas resultaron demasiado desprolijas, incluso para una licitación en la era K.
El mayor desafío para Perfil era enfrentarse a la discrecionalidad presidencial, instrumentada a través de la mano dócil del titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, que no se animó a contestar los requerimientos periodísticos de Noticias. La duda es cómo piensa explicarle a un juez que dio por “fracasados” (así dice el Boletín) ambos concursos públicos con la excusa de la falta de información patrimonial de Alberto y Jorge Fontevecchia, a pesar de que las declaraciones juradas presentadas por ambos detallaban claramente la capacidad patrimonial requerida.
Mientras se rumorea que el kirchnerismo planea una nueva licitación más a la medida de sus socios, Perfil sigue planeando crecer, para hacer más periodismo.
Fracasados. Así califican Sabbatella y Cristina los concursos por las frecuencias televisivas que busca Perfil
Fuentes: Diario Perfil y Revista Noticias