martes, 24 de febrero de 2015

La UTPBA es un cero a la izquierda

Los trabajadores de prensa ingresamos a las paritarias de este año con el salario devaluado. La suba constante de los precios y el misérrimo acuerdo salarial que firmó la burocracia de la UTPBA el año pasado han confluido para ello como en una operación de pinzas
De un lado, el alza de precios fue permanente en 2014 y de ningún modo la inflación alcanzó sólo el 23,9% que dijo el Indec. Fue muy superior. En la Ciudad de Buenos Aires alcanzó el 38% según los datos oficiales.
Del otro, el conjunto de los salarios del país subió en promedio un 33% en 2014 según el Indec. Pero los de los trabajadores de prensa lo hicieron solo en un 28% para la enorme masa del gremio cuyos salarios estaban por encima de los básicos de convenio y eran inferiores a 15000 pesos brutos al 31 de marzo de 2014.
Es decir, los salarios de los trabajadores de prensa llegan a la paritaria de 2015 con una pérdida de al menos 10 puntos porcentuales respecto de la inflación del año pasado en Buenos Aires.
En tanto, las previsiones sobre el alza del costo de vida de este año varían desde el dibujo del 15,6% del Presupuesto nacional hasta el 28% en el de la Ciudad de Buenos Aires y el 30-35% de las consultoras privadas.
La caída salarial no fue compensada con bonos de fin de año o la reapertura de paritarias 2014. La falta de una orientación precisa impidió que a fin de año el Plenario de Delegados impulsara de conjunto un reclamo por un bono compensatorio. En algunas empresas se lo obtuvo, como en el caso de PubliExpress o Tiempo Argentino, pero en la mayoría que lo reclamó, no.
En las primeras discusiones salariales de este año, las burocracias sindicales de todos los pelajes han adoptado el mismo criterio, de firmar sumas puente hasta el segundo trimestre. Con ello buscan evitar que gane espacio la discusión salarial y por condiciones de trabajo en medio de la crisis política actual. Pero este afán por dejar en manos de las patronales y de sus partidos la salida política no conlleva ningún beneficio para los trabajadores: las cuotas fijas y no remunerativas no mejoran el poder adquisitivo respecto de la suma de lo ya perdido más el costo de vida actual. En cambio, los docentes, tanto en el nivel nacional como en la provincia de Buenos Aires, están reclamando una suba salarial del 38% en la que ya es una paritaria testigo.

Vamos con el Plenario y el nuevo sindicato
El Plenario de Delegados ha llamado a votar pliegos de reivindicaciones y delegados paritarios en cada asamblea y lugar de trabajo. Este mecanismo democrático es el reaseguro de que los intereses de los trabajadores serán puestos sobre la mesa de discusión paritaria.
Ahora bien, el Plenario debe reclamar ante el Ministerio de Trabajo su lugar en la negociación y ante la casi segura negativa de Tomada a permitírsela, como el año pasado, preparar las condiciones de movilización de los trabajadores para lograrlo.
En la vereda de enfrente se encontrará la burocracia de la UTPBA, que ya se ha presentado ante Trabajo por la paritaria sin haber realizado la más mínima consulta a nadie. Ningún trabajador de prensa sabe qué es lo que esta burocracia descompuesta quiere negociar.
La burocracia cree que los acuerdos que ha anudado con el gobierno y las patronales le permitirán sobrevivir. Ha convocado a elecciones para fin de abril con el mismo padrón trucho que ya fue impugnado por la oposición. Todo con el permiso de Tomada.
Enfrentado a esta porquería, el Plenario prepara las condiciones para la presentación oficial del nuevo sindicato de trabajadores de prensa, organización que en su primera tarea deberá encabezar la pelea por los salarios.
Por eso la paritaria va a conjugar la lucha por la verdadera representación de los trabajadores de prensa.
  • Elección de paritarios y votación de pliegos en todos los lugares de trabajo.
  • Participación real de los delegados paritarios en la mesa de negociaciones.
  • 40% de aumento para 2015
Fuente: La Naranja de Prensa