jueves, 27 de noviembre de 2014

El Parlamento Europeo propone desguazar el buscador Google

Vota a favor de una resolución para instar a la Comisión, que estudia desde 2010 si el buscador abusa de su posición dominante, a que imponga a la multinacional estadounidense a disociar su motor de búsqueda del resto de sus servicios
El pleno del Parlamento Europeo instó hoy a la Comisión Europea a estudiar medidas para dividir las actividades de los motores de búsqueda en internet como Google para favorecer la competencia en la Unión Europea (UE).
Los eurodiputados aprobaron con 384 votos a favor, 174 en contra y 56 abstenciones una resolución en la que piden al Ejecutivo comunitario que imponga a los buscadores que disocien su actividad como motor de búsqueda de otros "servicios comerciales" que puedan desarrollar, informó la Eurocámara en un comunicado. Este texto, supone un mensaje político que, sin embargo, no tiene un efecto vinculante directo, ya que es la Comisión quien debe tomar la decisión final sobre Google.
Los diputados piden también al Ejecutivo comunitario que, para lograr más competencia y oferta para los consumidores, evite cualquier abuso que los buscadores puedan cometer a la hora de mostrar los resultados de las búsquedas (indexación, evaluación, presentación y ránking), lo que debe hacerse de forma "imparcial y transparente". En particular, cuando muestren resultados de "servicios interrelacionados", deben "garantizar total transparencia", afirman.
La nueva comisaria de Competencia no está preparada para actuar: "es muy importante tener una visión general del caso antes de proceder"La resolución ha sido pactada por los dos grupos mayoritarios de la Eurocámara, el Partido Popular Europeo y los Socialistas y Demócratas, y se dirige específicamente al gigante estadounidense Google. La Comisión Europea es la institución encargada de las cuestiones de Competencia a nivel europeo e inició en 2010 una investigación para esclarecer si el modelo de negocio de Google podría suponer un abuso de posición dominante que restringiera la competencia en el sector de las búsquedas y la publicidad en línea.
La Comisión ha rechazado la última oferta hecha por Google para resolver las quejas de sus competidores, por lo que ha instado a la empresa a remitirle una nueva propuesta de compromiso, que por el momento no ha sido presentada. La nueva responsable comunitaria encargada de Competencia, Margrethe Vestager, pidió recientemente margen para analizar el "dossier" y señaló que para ella "es muy importante tener una visión general del caso antes de decidir cómo proceder".

"Google aprovecha todos los resquicios para eludir responsabilidades"
La Agencia Española de Protección de Datos considera que la empresa del buscador es de las "más irresponsables" en el ámbito de la gestión de la privacidadLa Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) considera que Google es de las empresas "más irresponsables" en el ámbito de la gestión de la privacidad y critica que la compañía estadounidense aproveche todos los resquicios legales para intentar eludir sus responsabilidades en Europa. "Google es una de las empresas que actúa de manera más irresponsable, en el sentido de que aprovecha todos los resquicios del ordenamiento para intentar eludir responsabilidades. Incluso cuando el ordenamiento es claro, aprovecha todos los procedimientos para establecer recursos, para dilatar el cumplimiento", explica el director de la AEPD, José Luis Rodríguez.
El camino hacia el fallo del Tribunal de Justicia de la UE relativo al "derecho al olvido" y las sanciones impuestas a Google por el cambio en sus políticas de privacidad son dos asuntos en los que Rodríguez incide reiteradamente en la entrevista y que le llevan a decir que la empresa tecnológica es el "ejemplo negativo" de abordaje de la protección de datos en la era de internet. "No todas las empresas son iguales. Es cierto que existe una tendencia en las tecnológicas que actúan globalmente a aprovechar esa estructura, esas características de actuar en varios estados para intentar no asumir responsabilidades en ningún sitio".
Pero en esa estrategia hay grados: empresas más responsables y otras menos, si bien "ninguna ha llegado al extremo de ignorar un requerimiento formulado por 28 autoridades de la UE, como Google". "No es que las autoridades europeas tengamos una fijación con esta empresa, sino que por sus características es la que más impacto tiene y más lesión está causando", añade. "Aquí también hay un problema bastante generalizado de que muchos servicios tienen pocas alternativas y esto está afectando no sólo a la competencia, también a la protección de datos porque una empresa como Google que se siente en una posición tan fuerte al no tener competidores relevantes pues también se resiste, haciendo cálculos lógicamente, a cumplir con la normativa", defiende.
Acerca de si el tenaz posicionamiento europeo en torno a la protección de la privacidad pone de manifiesto diferencias insalvables con Estados Unidos, reconoce que en Europa hay una arraigada cultura común, pero matiza que no existen "colisiones de escala de valores". "Hay muchas veces una utilización propagandística e interesada de estos planteamientos. (...) Es un enfoque radicalmente falso que en Europa no se desarrollen nuevas tecnologías o nuevos servicios porque el nivel de exigencia de protección de datos o de la normativa de la protección de la privacidad es un obstáculo", destaca.
"Estas diferencias están siendo utilizadas por algunas compañías para localizarse en estados donde las autoridades son más débiles"
por otra parte, recalca que actualmente existen asimetrías en las potestades que tienen las distintas autoridades nacionales europeas de protección de datos. "Estas diferencias están siendo utilizadas por algunas compañías para localizarse en estados donde las autoridades son más débiles", afirma. Dado el carácter trasnacional de los flujos de datos, algunas de estas autoridades trabajan cada vez más coordinadamente. Y una de las dos novedades más relevantes del futuro reglamento europeo de protección de datos, según Rodríguez, es precisamente que otorgará a todas las mismas competencias y la capacidad de sancionar.
El segundo cambio será que la normativa europea se aplicará tanto a las empresas europeas como a las que actúan tratando datos de ciudadanos europeos aunque lo hagan fuera del territorio de la UE. "Es una cuestión que continuamente está dando lugar a conflictos, está siendo discutida por algunas compañías y eso genera desprotección para los ciudadanos porque mientras esas cuestiones se están discutiendo en los tribunales, no reciben la protección que demandan", informa. "En el caso de Google, ha estado negando la protección durante más de cinco años y los ciudadanos sufriendo las consecuencias. Hasta que al final, ya llegando a la última instancia en Europa, el Tribunal de Justicia se ha pronunciado -en referencia al derecho al olvido-", ilustra.
Rodríguez reconoce que la tramitación del reglamento europeo está resultando "demasiado lenta" debido a la complejidad de asuntos que regula, al impacto que tiene en otros ámbitos y a las "reticencias muy fuertes" que está generando en grandes corporaciones internacionales. "En Bruselas se dice que no se conoce en ningún proyecto normativo previo una actividad de 'lobbies' tan intensa como la que está teniendo este proyecto. (...) Se han presentado más de 4.000 enmiendas, esto da un poco la medida del valor que tienen los datos y la importancia que le están dando las empresas que tienen un modelo de negocio basado en obtener rendimiento de los datos personales", sostiene.
Foto: EFE
Fuente: Agencia EFE