Comunicadores de la Argentina (ComunA) expresa su honda preocupación por la falta de respeto a la labor del Poder Judicial contenida en cuestionamientos de sectores empresariales que, publicados a repetición concertada en varios medios de difusión, derivan en una presión indisimulable a la autonomía de los jueces.
Cámaras empresariales objetaron en una sucesión de pronunciamientos a la Justicia Federal de Bahía Blanca, en el proceso por las denuncias de delitos de lesa humanidad formuladas al señor Vicente Massot, director del diario La Nueva Provincia.
La defensa del acusado no fue expresada, sin embargo, como adhesión sincera a las acciones que se le atribuyen, sino enmascarada en una supuesta reivindicación de la “libertad de expresión”, principio que resulta así, una vez más, pisoteado.
Ninguna libertad se ejerce a expensas de los derechos de las personas y de la sociedad, y mucho menos a expensas del derecho a la vida. Por lo tanto, la descalificación de las medidas procesales adoptadas en torno del acusado no es otra cosa que una manipulación descarada, atribuible únicamente a quienes buscan su propia protección, aunque la presenten como una “preocupación periodística”.
La réplica automatizada de una afirmación tiene una muy previsible derivación política y social: se busca así imponer un piquete mediático para cortar el paso al Poder Judicial, cuya independencia es a menudo declamada por los mismos empresarios que en este caso quieren bloquearla.
Comunicadores de la Argentina