Salvañá y Ponce se mantenían a prudente distancia de la concentración policial. Sin embargo se acercó un hombre con el rostro encubierto que les señalaba ‘no enfoquen, tómensela’, en tono muy agresivo. Los dos periodistas ya habían hecho el gesto de retirarse unos metros más del lugar pero el hombre no se quedó conforme y tapó con su mano la cámara que portaba Ponce, por cuanto los empleados de BT optaron por retirarse y volver al Canal.
Una vez más es necesario señalar que la información no es patrimonio de ningún sector, que es lamentable que quienes deben brindar seguridad a la población sean al mismo tiempo quienes amenazan a periodistas al grito de ‘ustedes nos mataron, ustedes nos mataron’. También insistimos en el rol que corresponde a quienes dirigen el conflicto, o al menos una parte de él, en la responsabilidad de evitar agresiones y llamar a la reflexión para que no ocurran situaciones más graves que el muy mal momento que pasaron ambos trabajadores de prensa.
Comisión de Libertad de Expresión y Formación Profesional
Sindicato de Prensa de Rosario