Análisis de cómo impactará al principal multimedios del país el fallo de la Corte Suprema que lo obliga a adecuarse a la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual
La decisión de la Corte Suprema de Justicia de Argentina de declarar constitucional la llamada Ley de Medios, que regula los servicios audiovisuales del país, dejó a todos en Argentina con la misma pregunta: ¿qué pasará con el Grupo Clarín, el principal multimedios del país, que por cuatro años buscó frenar la nueva norma en la Justicia?
Según la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual -sancionada en octubre de 2009 pero paralizada hasta este martes- ningún grupo puede poseer más de diez licencias de radio y televisión abierta. Clarín tiene 12.
La norma también prohíbe a un mismo dueño tener un canal de televisión abierta y una operadora de cable en la misma localidad, lo que obligará a Clarín a tener que decidir entre su canal insignia, el Trece, y su principal fuente de ingresos: Cablevisión, en la ciudad de Buenos Aires.
En tanto, la ley también restringe a 24 localidades el alcance de la TV por cable. Cablevisión actualmente opera en 158 ciudades, por lo que tendría que dejar de brindar servicios en 134.
También el principal canal de noticias del Grupo Clarín, Todo Noticias (TN) –el más visto de Argentina-, podría estar en riesgo, ya que la ley indica que un operador de cable sólo puede tener una señal de generación propia, y Clarín tiene cinco, además de TN.
Con este panorama, está claro que la aprobación de la Ley de Medios por parte de la máxima instancia judicial de Argentina traerá aparejados grandes cambios para el principal multimedios del país, que es el más afectado por la nueva norma.
Sin embargo, hasta ahora los representantes de Clarín no han aclarado qué decisiones tomarán para adecuarse a la ley.
En un comunicado publicado en el portal online de su principal medio, el diario Clarín (que no es afectado por la polémica ley por no tratarse de un medio audiovisual), los voceros de la empresa afirmaron que el Grupo "respeta las decisiones judiciales" y "analiza las futuras derivaciones judiciales del caso, incluyendo la apelación ante tribunales internacionales".
Clarín también acusó al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner de buscar "colonizar" a la prensa a través de esta ley y "silenciar, sin justificación técnica ni competitiva alguna, medios que hoy ejercen periodismo crítico".
¿Debe deshacerse ya de sus medios?
Uno de los artículos más controvertidos de la Ley de Medios es el que establece un plazo de un año para que los grupos que se exceden en el número permitido de licencias las vendan.
Los impulsores de la ley consideran que ese plazo ya caducó. Sin embargo para algunos expertos legales ese período debería comenzar a calcularse a partir del fallo de este martes.
"La Corte no ha sido clara al respecto pero la lógica es que el plazo comienza a regir cuando el fallo queda firme", dijo a TN el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez.
A través de una conferencia de prensa, el encargado de aplicar la Ley de Medios, Martín Sabbatella, presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), dejó en claro que "los plazos están absolutamente vencidos".
"No es un triunfo sólo del gobierno, es un triunfo de la democracia, de la libertad, del pluralismo; es un triunfo de los miles de medios y trabajadores que en todo el país pujan por hacer uso de su derecho a expresarse en libertad sin que ningún gigante condicione el mercado y los silencie", afirmó el funcionario.
Para el periodista y profesor universitario Martín Becerra es probable que el Grupo Clarín cuestione el plazo de desinversión ante la Justicia, en busca de una nueva medida cautelar que vuelva a suspender su adecuación a la ley.
"Clarín buscará por todos los medios judicializar el tema, abriendo varias causas contra la aplicación de la Ley de Medios", dijo a BBC Mundo.
No obstante, el experto consideró que eventualmente el multimedios tendrá que vender algunas de sus licencias y reducir su tamaño.
En este sentido, coincide otro de los expertos consultados por BBC Mundo, todo este periodo de transición "puede tardar fácilmente dos años".
"Es posible incluso que cuando salga de la presidencia Cristina Fernández en 2015 Clarín aún tenga en sus manos esos medios", aclaró Gustavo Arballo, profesor de Derecho de la Universidad Nacional de la Pampa.
"En ese tiempo en que se tramitan los concursos Clarín tiene la obligación de explotar estas licencias para no dejar puestos de trabajo desafectados, para no dejar a las personas con cable contratado sin servicios, etc.", explicó.
¿Se acalla así a Clarín?
Según Clarín, el gobierno busca debilitarlo a través de esta norma, para dominarlo y reducir su poder de crítica.
"La ley busca medios que no sean autosustentables sino que dependan de la publicidad oficial o de negocios vinculados con el Estado", acusó a través de su comunicado, en el que también aseguró que más del 80% de los medios argentinos es controlado directa o indirectamente por el gobierno.
No obstante, en su fallo, la Corte Suprema descartó que la adecuación a la Ley de Medios afecte la sustentabilidad económica del Grupo Clarín o limite la libertad de prensa.
"La 'sustentabilidad' no puede ser equiparada a 'rentabilidad', y en este sentido, hace a la naturaleza propia de un proceso de desconcentración la posibilidad de una reducción consiguiente de los márgenes de ganancia empresaria", acotó el máximo tribunal en su sentencia.
"No resulta admisible que sólo una economía de escala, como la que posee actualmente (el Grupo Clarín), le garantiza la independencia suficiente como para constituir una voz crítica. Hay numerosos medios pequeños o medianos que ejercen una función crítica y, a la inversa, hay grandes concentraciones mediáticas que son condescendientes con los gobiernos de turno", agregó.
Los expertos consultados por BBC Mundo aseguran que, aún con la obligación de desinvertir en algunos de sus medios, Clarín seguirá siendo por ahora el principal conglomerado del país.
¿Quién se queda con los medios?
¿Quién se hará cargo de las licencias a las que tiene que renunciar el Grupo Clarín y cómo cambiará el mapa de medios del país a partir del fallo de este martes?
Todo depende de qué decida hacer Clarín con estas licencias. Una posibilidad es que transfiera sus acciones a familiares o empresarios cercanos, algo que incluso fue avalado por el propio Sabbatella.
"Es probable que Clarín intente dividir sus estructuras, separando distribución de contenidos y generación de contenidos, con empresas operando por separado y que sí se adecúen a la ley", dijo Gustavo Arballo.
Es decir, distribuirlas entre sus propios accionistas, crear grupos menores que puedan funcionar en sintonía, pero separados.
"Es lo que hizo a una escala mucho menor (el empresario presidente del Grupo UNO) Daniel Vila, también afectado por la ley, quien vendió licencias a su hija", aseguró.
No está claro todavía si otros grupos mediáticos podrán hacerse con el control de esas licencias a través de concursos públicos o si Clarín podrá ofrecer un plan para entregarlas a empresas cercanas, pero jurídicamente ajenas a Clarín.
Arballo coincidió con Becerra en que además el multimedios buscará ganar tiempo judicializando cada proceso.
"Cada licencia va a tener su propio expediente, su propio concurso. Cada una de ellas es una oportunidad de Clarín para litigar", consideró.
En cualquier caso, lo más probable es que para los argentinos poco cambie en el corto plazo a partir de este fallo.
A la larga, sin embargo, muchos esperan que Clarín pierda la posición dominante que ostentó hasta ahora.
Foto: Agencia EFE
Viñeta: Berlich, El País
Fuente: BBC Mundo