martes, 2 de abril de 2013

Restrepo: ‘El periodismo no puede aceptar la vanidad del poder’

El ejercicio del periodismo en el país, caracterizado por las dificultades que le ha impuesto el Gobierno, el clima de confrontación, los problemas económicos y la judicialización, son aspectos sobre los que el periodista colombiano Javier Darío Restrepo conversó con La Hora
Su trayectoria de 54 años y el hecho de que dirija el Consultorio Ético de la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, le permiten afirmar que los periodistas se deben exclusivamente a sus lectores y que deben perseguir llegar a las conciencias para que puedan tomar sus propias decisiones. Así, asegura que en este tiempo, el periodismo es necesario y que la única opción para los medios es hacer más periodismo de calidad.
¿Qué retos tiene el periodismo en países como Ecuador y Venezuela?
La independencia de la fuente oficial, porque está viciada por sus intereses. Buscar fuentes mucho más limpias, porque depender de las fuentes oficiales estimula la pereza del periodista, va mutilando su creatividad y, sobretodo, le está impidiendo a la población tener acceso a la realidad de lo que sucede, realidad que no la tienen ni el Presidente ni ninguno de sus ministros.
En Ecuador, el Presidente ordenó públicamente a sus ministros que no den entrevistas a la prensa independiente.
Ésa es una oportunidad para mejorar su calidad y operar todo el esfuerzo para ganar la credibilidad de la gente.
No hay que pretender entender la lógica del poder, porque ahí no hay lógica. Es natural que a quien tiene el poder en la mano, absoluto o casi absoluto, no le guste ninguna de las informaciones que se da.

Pero esto choca contra la vanidad del poder, que quiere ‘su verdad’ publicada
¿Cuál es el papel que yo cumplo? (Como periodista) ¿Simplemente ser uno de esos que entretienen al rey o ser un crítico del rey? La sociedad en sí misma tiene que ser crítica del rey. En una democracia, lo que se impone es un gobierno en urna de cristal, para que todo el mundo lo vea, aplauda o critique, según el caso.

Sin embargo, para poder criticar se necesitan garantías
Si hay leyes justas, uno tiene que actuar acogido a esas leyes, pero contra la arbitrariedad (del poder) no hay nada que hacer, sólo la insurrección. Y nosotros no estamos para promover la insurrección, sino para poner en evidencia las razones por la que la sociedad no debe aceptar pasivamente.

¿La arbitrariedad del poder puede llevar a la autocensura?
Allí es donde el periodista está poniendo a prueba su calidad periodística, que es rechazar la autocensura. En una situación así, se debe ejercer el periodismo con un cierto grado de heroísmo o no se ejerce.

¿Estamos para pintar de héroes?
Diría que sí.

¿O de temerarios?
Temerario es cuando uno se expone a un peligro por razones que no tienen sentido, pero tiene sentido la defensa del bien común. El periodismo tiene como función abrir la conciencia de la gente.
(Las decisiones electorales) nos está indicando que hay personas que no están abiertas y son insensibles a los valores democráticos. Es la oportunidad de pensar en un periodismo que tenga mayor influencia en la sociedad.

¿Cómo ejercer influencia?
El periodismo siempre tiene que librar su batalla de cada día. No imagino que un periodismo digno pueda llegar a decir a (Rafael) Correa que va a hacer un periodismo como él diga.
El poder tiene el monopolio de las leyes, del dinero, de las armas. ¿Y la población, qué tiene? Sólo la palabra. Y los medios de comunicación son los que potencian la palabra y están al servicio total de la población.

¿Qué va a pasar con los medios?
Hubo épocas de nuestros países en que luchar por la independencia significaba exponer la vida y los bienes. En este momento, estamos en una circunstancia muy parecida. Ahora es la independencia respecto de cualquier poder absolutista, totalitario o dictatorial.
La prensa ecuatoriana o vende las armas, inclina sus banderas y deja que todo siga tal cual, o busca los caminos para seguir cumpliendo su tarea, sin caer en lo temerario, pero sin abandonar la idea de que pueda haber algún sacrificio.
La prensa no puede declararse en retirada, su responsabilidad ha crecido.

¿La prensa se debe autorregular o ser regulada por ley?
Teóricamente, es correcto que las leyes estén regulando los medios de comunicación, en tanto que el gobierno defienda los derechos de la población a la información, con instituciones autónomas.
Pero, cuando las instituciones no funcionan autónomamente, esas leyes vienen a ser otro remedo de defensa del derecho de la población.
Fuente: Diario La Hora