El decreto establece las condiciones por las cuales se organiza la nueva televisión digital. El director de Telecomunicación del MIEM, Sergio De Cola, explicó que con este decreto se identificará el espacio radioeléctrico que será reservado para las tres modalidades del servicio de televisión digital abierta: espacio comercial, espacio público y espacio comunitario.
En cada espacio se realizarán llamados públicos a interesados para la asignación de canales de radiofrecuencia necesarios para la transmisión y las autorizaciones para comenzar a emitir. El procedimiento incluye la evaluación de los postulantes por un Consejo Honorario, integrado por personas destacadas. Además, se realizarán audiencias públicas para informar a la ciudadanía.
A partir de los primeros 60 días de promulgado el decreto, la URSEC lanzará el llamado a interesados para la asignación de canales digitales abiertos en Montevideo y el área metropolitana.
Los actuales titulares de televisión abierta tienen la posibilidad de continuar sus emisiones, en formato digital, y además se abrirá la posibilidad para la presentación de nuevas propuestas en este formato, agregó De Cola. Luego se realizarán los llamados para el interior, finalizó.
Las licencias actuales son de tipo “precarias y revocables”, y las actualizadas por el decreto serán a término y deberán presentar una auditoria. La ciudadanía también podrá utilizar mecanismos de control a los asignatarios, detalló el director De Cola, en el momento de la renovación del uso de la frecuencia, en función del grado de cumplimiento de lo que prometieron en su momento.
El nuevo decreto sobre televisión digital marca un cambio de importancia similar al que ocurrió con el comienzo de la televisión a color en nuestro país, afirmó el director De Cola para concluir: “Estamos hablando de hitos que ocurren en pocas ocasiones en la historia de las comunicaciones de un país”.
La televisión digital anuncia una nueva forma de transmitir y observar televisión, sostuvo De Cola, quien ejemplificó su aseveración con las posibilidades en nuevos formatos y calidad de imagen y audio, pero también con la incorporación de contenidos interactivos, con lo cual el telespectador pasa de ser un objeto pasivo a interactuar con la televisión.
También la digitalización de la señal permite un mejor uso del espectro radioeléctrico, un bien escaso cuyo patrimonio pertenece a la humanidad, agregó De Cola. Las técnicas de digitalización permiten optimizar su uso, lo que permite un mejor servicio para la sociedad, complementó.
Fuente: Coalición de la sociedad civil por una Política Democrática de Comunicación