En este sentido, destacó el cuidado autoimpuesto, plasmado inicialmente en la limitación a la publicación de fotos en el rubro 66 -correspondiente a servicios "Personales"-.
Luego, agregó una segunda restricción, vinculada a la utilización de vocablos que vinculen de cualquier modo conductas sexuales con términos alusivos a menores -tales como "bebota", "nena", "nenita", etcétera- y aquellos que aludan al sometimiento o condiciones de indignidad de la mujer -como "esclava"-, y se fijaron restricciones a los textos, excluyendo la publicación de títulos obscenos fotos o dibujos de contenido sexual.
Adicionalmente, al control del contenido de la información divulgada se fijó el requisito de que todo aquél que pretenda publicar en ese rubro 66, debe ser una persona de existencia física, mayor de edad, a quien se le requiere –previo a la publicación– acreditar la identidad mediante la exhibición del Documento Nacional de Identidad. Se extrae una fotocopia simple de ese documento y se guarda en el área administrativa, juntamente con las constancias de pago de la publicación. También se exige que se acredite que quien contrata el aviso sea titular de la linea de teléfono. En ningún caso se permite la publicación de avisos a terceros en representación de otras personas ni aquellos en que se alude a organizaciones en que se infiera que hay un capitalista o proxeneta que se aprovecha económicamente de la prostitución de otras personas.
"Río Negro" también adoptó como medida de autorregulación una serie de requisitos en el rubro 21 de los clasificados del diario -correspondiente a "Empleos. Pedidos"-, tendiente a impedir la publicación de avisos que ofrezcan empleo para desempeñar tareas en actividades relacionadas con la oferta sexual. Por ejemplo, no se admite la publicación de avisos requiriendo "Señorita para trabajo nocturno en whisquería", pub, sala VIP, sala de masajes o similar.
Con esta reglamentación se busca evitar la difusión de ofertas que pueden generar sospecha de explotación sexual en organizaciones como staff, agencias VIP, cabarets, privados, escorts, o cualquier otro eufemismo que suele encubrir a los prostíbulos.
"En conclusión, la política empresaria de ejercer la actividad de imprenta y facilitar de este modo el flujo de información entre los ciudadanos fue asumida por Editorial Río Negro con máxima responsabilidad, instaurando autocontroles tendientes a impedir la facilitación de actividades ilícitas, pero garantizando que las personas individualmente puedan ejercer libremente sus profesiones, sin padecer actos de discriminación y sin ver limitado su derecho a la libre expresión", puntualiza el amparo.
Todas estas pautas fueron adoptadas por el medio en forma voluntaria y espontánea y rigen para la contratación en todas las receptorías de avisos, sean éstas agencias propias o tercerizadas.
Fuente: Diario Río Negro
Ver anterior: El Diario "Río Negro" presenta amparo contra la prohibición de avisos de oferta sexual