viernes, 7 de enero de 2011

Radio y Televisión Española incluye a los toros en la sección “violencia con animales” de su Manual de Estilo

La coincidencia de las corridas con el horario infantil impiden su emisión, lo que no impide que se refleje la "actualidad" del mundo taurino "en la programación"
El manual de estilo de Radio y Televisión Española, que presentó en diciembre de 2010 el presidente de la corporación, Alberto Oliart, ante la Comisión de Control de RTVE, incluye los toros en la sección “violencia con animales” dentro del apartado “cuestiones sensibles” y veta las corridas en RTVE.
Concretamente, el manual establece que RTVE “no emitirá corridas de toros por su horario, generalmente coincidente con el horario protegido o de especial protección para la infancia”, el argumento que la corporación ha defendido en los últimos años para no emitir este tipo de eventos. No obstante, el manual señala que “RTVE no es indiferente a la relevancia que tiene el mundo de la tauromaquia ni a su influencia en muchos aspectos socio-culturales”, por lo que apuesta por reflejar la “actualidad” del mundo taurino “en la programación” tanto de la televisión de la radio, aunque no se emitan las corridas.
Para ello, el manual apuesta por “programas específicos en TVE y RNE” dedicados a la tauromaquia y facilitar “el seguimiento en la programación de aspectos artísticos, literarios, medioambientales y sociales relacionados con el toro de lidia y la tauromaquia”. El pasado 2 de diciembre la Comisión Mixta de Control Parlamentario de la Corporación RTVE votó en contra de una proposición no de Ley del PP en la que se pedía a TVE la emisión de al menos 10 corridas de toros cada temporada, con 19 votos a favor del PP y 21 en contra del PSOE y CiU.
TVE emitía tradicionalmente las corridas de toros de las ferias más importantes. Sin embargo, en el año 2006, se decidió dejar de retransmitirlas debido al elevado coste de estos eventos y a que coinciden con horario infantil, aunque tanto la televisión como la radio cubren los eventos taurinos en sus informativos.
En general, sobre la violencia con animales, el manual de estilo, que fue aprobado por el Consejo de Administración el pasado 2 de junio, establece que “los niños pueden ver con angustia la violencia ejercida sobre animales” por lo que aboga por “evitársela por todos los medios”. “En las escenas de caza y las de la matanza doméstica de animales para la alimentación se deben evitar los aspectos más sangrientos de manera que no se vea ni oiga el sufrimiento de los sacrificados”, señala.

No confundir “morbo” con interés social
Por otro lado, el manual recoge el comportamiento que deben tener los periodistas de RTVE ante otros temas “sensibles” como la infancia, la violencia de género, el terrorismo, el suicidio o la inmigración. Concretamente, sobre la violencia de género, el manual señala que no hay que “confundir el morbo e interés social”.
Así, se señala que “los recursos estéticos y la narrativa habitual de los reportajes de sucesos no deben utilizarse en la realización de noticias sobre violencia contra las mujeres”. Asimismo, el manual señala que “deben evitarse aquellos recursos de ocultación de las víctimas que den apariencia de criminalización”, como los efecto mosaico, tiras en ojos, disfraces o distorsiones de voz. Igualmente, el manual señala que hay que evitar la reconstrucción de los hechos que abunden en detalles escabrosos o en primeros planos que provoquen “el morbo o la conmiseración de la víctima”.
“Las reconstrucciones son útiles cuando se utilizan con afán informativo y cuando son necesarias para la comprensión de los hechos. Los detalles e imágenes escabrosas no inducen al rechazo del maltrato en sí y, en cambio, lo que hacen es dar forma al espectáculo”, subraya. Además, el manual también se refiere a los políticos imputados en juicio y apuesta por evitar “juicios paralelos”.
“Cuando el juez instructor o un tribunal implica a un cargo político en un delito, la obligación de RTVE es mantener informada a la audiencia sin alimentar un juicio paralelo”, subraya, lo que considera “compatible con el mantenimiento de un debate equilibrado y plural sobre la significación política de los datos que se van conociendo y el modo en que el partido implicado actúa antes de que se dicte sentencia”.


Fuente: Europa Press