El adjunto a la dirección de El País ha repasado en los Cursos de Verano de El Esocrial la situación del periodismo tradicional y la influencia que Internet juega en su devenir
“Es triste que desaparezca el medio de papel pero la realidad es que hay cosas contra las que no se pueden luchar. No obstante me preocupa más que sobreviva el periodismo”.
Así se ha expresado hoy el adjunto a la dirección de El País, Gumersindo Lafuente, durante la conferencia que ha ofrecido en el Curso de Verano de El Escorial organizado por la agencia Servimedia, y en la que ha repasado la situación del periodismo tradicional y la influencia que Internet juega en su devenir.
“Rigor y credibilidad son el pasaporte de vivencia del periodismo y probablemente lo hayamos traicionado”, ha dicho Lafuente, quien ha añadido que en esta crisis de los medios, “no sólo podemos echar la culpa al nuevo ecosistema generado por Internet, sino también al tipo de periodismo que estábamos haciendo”.
En este sentido, ha reconocido que “lo primero que tenemos que hacer es entender al enemigo, saber cómo funciona y utilizar la redacción para contrastar”, pero el periodista “no puede estar encerrado en su redacción”. El profesional “debe estar en la calle y cultivar las fuentes”, pero sin olvidar que “la realidad también está en la red, algo que no se puede ignorar”.
Por otro lado, y en relación al uso que los periodistas hacen de las redes sociales, Lafuente ha indicado que “tenemos que conseguir generar una diferencia para hacerlo mejor, ya que la tecnología nos ha puesto al mismo nivel”. “El periodista tiene que aportar su formación, experiencia, capacidad de filtrar”, convirtiéndose en “un administrador de flujos de información”.
En cuanto al futuro de los medios, Lafuente ha asegurado que “hoy se sigue reflexionado sobre el futuro pero sin pensar en el presente, y se hace con las mismas estructuras que en el pasado”.
Además, ha señalado que uno de los retos al que se enfrenta un medio es “la información a tiempo real, un flujo que va contando las cosas tal cual suceden y donde el periodista alimenta ese flujo, poniendo en valor, entre otros aspectos, su capacidad de análisis”.
Foto: fnpi
Fuente: Baquía