martes, 23 de marzo de 2010

Víctor Hugo Morales: “En este momento, si las elecciones fuesen ahora, le gana Cuchuflito al gobierno”

Con toda la claridad que lo ha caracterizado en los medios, el relator más reconocido del país llegó a Olavarría este lunes. Desde los estudios de Radio Olavarría hoy conducirá su programa “La Mañana”, que se emite por Radio Continental. Resignó la siesta y habló casi una hora a solas con infoeme.com. Hasta analizó un artículo periodístico de un diario capitalino con los periodistas de este Diario On Line. “Reivindico la alegría y el entusiasmo de hacer las cosas como las siento”, se pintó de cuerpo entero.
Por: Jorge Scotton / Daniel Lovano
Claro. Muy claro. Víctor Hugo Morales desenreda sus conceptos con la misma fluidez con la que se lo escucha por Radio Continental cada mañana, y eso que esta vez viene extenuado de un día de mucho trajín en Tapalqué, pero será en la despedida cuando recién anunciará: “Muchachos, les regalé la siesta”.
El regalo, intangible, fue una charla de casi una hora, a solas, con infoeme.com. Que no tiene precio, sí el valor del esfuerzo periodístico que no se puede comprar. La nota no estaba pautada, sólo hubo que esperarlo en la puerta del hotel donde se aloja.
En un tramo de la charla se metió en la política y en los medios, en la política de los medios y en los medios de la política. Relajado, frente a un café que se enfriaba lentamente en la confitería del Hotel Savoy de Olavarría. En el interior.

¿Qué siente cuando viene al interior a ciudades más pequeñas como Tapalqué u Olavarría? ¿Qué le produce venir al interior?
Desde el punto de vista afectivo, en mi sensibilidad es algo generalmente muy fuerte. Me gusta la gente que voy tratando, me encuentro algo vinculado a mi esencia personal, yo también soy de pueblo chico, mucho más chico que esto por supuesto. La gente que lleva la voz cantante en estas ciudades, hay gente que me interesa muchísimo.
Digamos que los tipos vinculados a la cultura en los pueblos estos son muy especiales. Porque tienen que remar nada menos que contra la indiferencia del resto. Esa es una pelea muy despareja, siempre tenemos que pelear pero cuando se pelea contra la indiferencia y mover los pueblos y mover la gente, eso siempre me genera que trato gente más sencilla.
También el clima político que uno trata, sabiendo que hay miserias espantosas como en todos lados, porque el ser humano es conflictivo pero hay una primera relación, una relación de piel con la que yo me llevo muy bien y encuentro una ruptura en la gran ciudad que yo vivo, que me da una paz muy particular, siempre es como meter la mano en una fuente de sosiego.
Pero además esta el país profundo que siempre es bueno conocer, las dificultades, las realizaciones...

Usted lo ha recorrido mucho.
Yo lo haría mucho más, a mi me mata mucho que no haya aviones. Las rutas para mí son una dificultad. Yo hice en el año 1982 con Ibarra (por el periodista fallecido Néstor Ibarra) un recorrido de más de 60 pueblos, nos había contratado una marca que se llamó Diporto, y ellos en una nota o charla como la de ustedes ponían el cartel atrás y ese era nuestro trabajo con Néstor (por Ibarra).
Siempre había una anécdota en el auto, que se iba para el costado, que descubrías que el que manejaba medio se dormía, hasta que un día descubrí que el que manejaba se había quedado al asado. No te puedo decir que tomó, pero yo no sé si no tomó. Pero además ese tipo que tiene que hacer 300 ó 400 tiene que estar descansado.
Y efectivamente el tipo mordió la banquina, aunque veníamos solos y después de hacer para allá y para acá, lo dominó al auto, pero manejando muy rápido. Pero bueno, esa noche cuando el tipo enderezó el auto, dije: juro por mi vida que no lo hago nunca más.
Igual ahora lo estoy haciendo de nuevo, pero ese episodio determinó eso que en ese momento no salga nunca más a las rutas.

¿Cómo vive este momento de la mañana de Continental?
Estamos muy en el ojo de la tormenta, con un país desquiciado, con muchos rencores con una sociedad que se ha ido enfermando poco a poco, de ambos lados. Entonces la equidistancia no es respetada. Lo que te gusta del gobierno y lo que no te gusta del gobierno, que hay un montón de cosas, decirlo. Pero lo que no te gusta de la oposición, por sobre todo cuando la oposición son los propios medios periodísticos, también lo tenés que decir.
En este momento decís como mienten los medios periodísticos, parece que hablás a favor del gobierno, la mera mención de estos hechos no te dejan vivir. Cuando apareció lo de la ley de medios fue terrible lo que sucedió. Yo me fui enojando con la propia gente de campo, porque no podés pasar de Gardel porque defendés la causa del campo al guitarrista o menos que eso porque apoyas la ley de medios, que por otra parte lo hice desde una convicción moral enorme y con una autoridad única en el país porque es una vieja pelea contra la mafia de Clarín y de Torneos y Competencias.
Lo dije a los gritos durante años. ¡Mirá si cuando apareció el fútbol para todos o la ley de medios iba a estar en otro lado fuera de lo que mi coherencia personal me dictaba! Y entre los que no sabían lo que yo había peleado por eso y el odio que hay por el gobierno, que lo quieren ver de rodillas en todos los temas, empezaron a jorobarme con que yo tenía una actitud oficialista.
Eso no es verdad, es una canallada, es una cuestión muy miserable. Pero al fin de cuentas me di cuenta que la gente que hace eso esta enferma de odio. Y el enfermo empieza a ser ineficaz, en el dolor que me provoco en primera instancia. Reivindico la alegría y el entusiasmo de hacer las cosas como las siento. La gente ahora al tomar partido de una manera tan obsesiva y con tanto odio acepta que le mientan, pero no sólo lo aceptan, te lo piden.
Tema jueza Sarmiento: la gente quiere que diga que el gobierno presionó a la jueza. La jueza es impresentable. La jueza dijo que ella sabía, porque ella sabía que si decía que ella sabía lo que ocurrió con el padre, automáticamente ella quedaba desautorizada. Ella debió apartarse de la causa. Ella quiso ocultarlo, además en una nota que yo le hice. Cuando vos decís esto hay gente que se pone furiosa, entonces hoy llamaban algunos oyentes diciendo, pero al gobierno tampoco le creo nada.
Ese es otro tema, tratémoslo después pero en el caso de la jueza Sarmiento ¿quien miente para el sentido común más elemental? Entonces cuando la mano viene así y vos has visto que durante todo el fin de semana el periodismo más importante ha mentido con interpretaciones aviesas y mentirosas sobre todo lo que pasa con la jueza Sarmiento, por supuesto te das cuenta que estas peleándote contra todo el establishment contra una cuestión periodística donde hay muchos intereses, ánimo destituyente, cosa que no quiere la oposición para mí. Estoy seguro que la oposición no pretende que el gobierno salte por los aires.

La oposición quiere ganarle al gobierno
La oposición quiere ganarle al gobierno, porque además saben que esta muy ganable. En este momento si la elección fuese ahora, le gana “cuchuflito” al gobierno. El único temor que tienen los medios de comunicación es que se les desinflan los candidatos.
Cobos ya se desinfló, se derrite De Narváez, Duhalde se presentó y dio risa, y le tienen miedo el año bastante positivo que el gobierno va a vivir. Dicen: “Si estos tipos tienen un buen año por ahí levantan cabeza”. Para mí es imposible. Porque de un 75 % de imagen negativa no hay retorno. Y menos de un 75 % de imagen negativa de gente que odia al gobierno.

¿Por qué se odia en esta sociedad?
Porque el conflicto del campo, es explicación y base de todo. Porque este gobierno es histérico, presenta todo la batalla final de todo lo que hay para hacer. Entonces presenta lo del campo, ve la furia, ve que hay algunos argumentos positivos, y se mantiene en la pelea como si el país fuese a ser otro si no ganaba la 125. El país iba a andar, desde el punto de vista económico para nada el país entro en una debacle.
El país fue capaz de soportar una crisis internacional como ningún otro país pudo hacerlo. Quiere decir que ellos se mentían a sí mismos y enloquecieron al país en un enfrentamiento y en una confrontación, en la cual los excesos, los gritos, los insultos, las amenazas, todo esto como un cóctel lanzado contra la gente, se convirtió en un elemento que al perder luego, fue mayor todavía el odio que se hubiesen ganado.
Porque la gente dijo: “Además no tenían razón”. Así que el estilo del gobierno se profundizo después, acto seguido vino la elección, en la elección el comportamiento fue parecido. Pero además, es un gobierno que confronta con el establishment: Iglesia, economistas ortodoxos, sociedad rural, multimedios periodísticos, etc.; forman un conglomerado de enorme poder, más poderoso que el gobierno, frente a que el gobierno no consigue por falta de hipocresía, estabilizarse en un mensaje que el resto de la gente tome positivamente.
Discurso del primero de marzo: la presidenta tiene que ser precisa como un cirujano. Esta hablando a los opositores. Le está hablando al país. En un momento en el cual tiene mucha oposición, ella tiene que estar con el colmo de la serenidad. Ella tiene que escribirse su discurso. Ya sabemos que improvisa bastante bien, ya sabemos que es una mujer con coraje. No tiene nada que demostrar.
No te vayas envalentonando porque desde las tribunas te gritan que sos la cosa más maravillosa del mundo, y en medio de esa euforia que te va generando el discurso, vas cometiendo excesos que no los hubieses dicho si lo tenías escrito.
Vos fijate lo que paso con Marcó Del Pont cuando ella se presentó en el senado. Yo estuve convencido a través de esa imagen, que para mí fue el mejor acierto de los últimos años. Yo dije no la van a echar. Porque alguien se tenía que sensibilizar ante la imagen de grosería de Gerardo Morales, y de todos, contra una mujer evidentemente decente, que merecía otro tipo de respeto y tratamiento.
Estas percepciones juegan y estas percepciones al gobierno le juegan en contra. Entonces un gobierno que va contra el establishment, porque todo el mundo habla de Bachelet, de Lula, que hicieron correctos gobiernos pero no fueron contra el establishment. No hicieron nada que fuera traumático para lo que un economista ortodoxo quiere o para lo que la sociedad económica del país quiere.
En cambio, esta gente viene a decir yo quiero tomar mayores recursos de los que más tienen para distribuirlos con la gente. Y antes de discutir si lo hacen bien o mal, ya al que le sacás esta enojado. En consecuencia hay algunos que lo aceptan porque tienen un poco de formación política y de sensibilidad, y hay otros que no lo aceptan.
Toda la gente del establishment que no lo acepta pelea de todas maneras contra el gobierno. Y el gobierno tiene un mérito. Es que gobierna, es como un tipo que está sobre un potro que en vez de levantar las espuelas porque corcovea se las clava. Eso es lo que hace el gobierno. Esta frase se as voy a regalar a los del gobierno.
Este es un dato muy interesante, esta gente no jode en cuanto a que gobierna. Esta gente gobierna desde las 7 de la mañana que se levantan hasta las 11 de la noche que se van a dormir. Ni duermen dan la sensación. Estos duermen gobernando. Lo cual genera poca obediencia a lo que les dicen los de afuera. Este tipo tomo un país en donde los economistas nos decían lo que hay que hacer, y nos llevaron al desastre total, y los políticos no se animaban a decirle a un economista “mirá, yo quiero hacer esto, y vos fijate como lo podes hacer”.
No me digas lo que se puede hacer y yo políticamente lo explico. Estos tipos cambiaron los vagones. El vagón de adelante es el vagón de la política. Y el vagón de atrás era el vagón de la economía. A diferencia de lo que ocurrió durante más de diez años. Todo esto tiene un precio, más el carácter podrido que denuncian y que demuestran provoca toda esta conmoción, pero además el gobierno se enfrenta a que todos los temas son tratados desde la mentira por los medios de comunicación.

¿Pero nos estamos dando cuenta ahora de esto o siempre fue así?
A veces se trata en comprender. Yo he sido crítico del gobierno y soy crítico. Te puedo decir muchas cosas más negativas del gobierno con total tranquilidad porque yo no le debo ni quiero deberle nada al gobierno. Yo mismo mañana puedo ser una especie de bomba de tiempo.
Pero cuando yo participe desde la vereda de enfrente con el tema de la Ley de Medios, vi el aluvión que había del otro lado, del que yo había participado por mis motivaciones periodísticas. Pero estuve mezclado con todos los intereses de una verdadera mafia periodística, estuve al lado de lo que la oposición decía con una enorme capacidad para mentir.

¿Se siente respetado cuando en el programa 678 (Canal 7) lo ponen como el emblema del periodista que la mayoría no hace?
Me pasaron dos cosas con 678, una que nota que efectivamente me respetan, segundo me han hecho mucho daño, no por lo que me pegaron en la época del campo, sino porque ellos han usado lo que les interesa de mi discurso. Y dejan lo demás afuera.
Entonces la gente que ve 678 cree que yo sólo hablo bien del gobierno. Porque no sabe el resto. Porque hay mucha gente que sólo mira 678 y no escucha mi programa.
Entonces vos me decís, este tipo esta enojado con 678 y yo les digo que no, porque los entiendo. ¿Qué es lo que entiendo?, que frente a los barcos de guerra de los multimedios 678 es un bote en el que tiran baldes de agua. Encima de todo les vas a pedir a esos tipos que tengan la nobleza de usar el discurso que no es afín a lo que quieren decir.
Los multimedios le hacen cualquier porquería al gobierno, pero le piden al gobierno que juegue limpio.
Mirá el 14 de junio, dos semanas antes de las elecciones, Clarín publica en tapa, yo vi la tapa. Y el 15 cuando llego a la radio los compañeros decían tenemos que hacer notas por lo que dice Clarín. ¿Que decía la tapa? Si Kirchner pierde las elecciones en la provincia se adelantan las elecciones del 2011. Cuando me lo proponen los productores les digo: “Esto debe ser una maniobra. No nos metamos con eso, le dije, no lo hagamos. Ese mismo día desmienten Randazzo, Aníbal Fernández, desesperados decían, “Es una locura, es una barbaridad”. Entonces ellos dicen (por Clarín): “El gobierno desmiente” la información tal, y la volvían a dar. Ese es un recurso. Vos decís: “Fulano desmiente que haya sido un corrupto”, por lo tanto vos decís si este desmiente algo tiene que ver con la corrupción. Pero además Clarín daba la fecha. Las elecciones iban a ser el 10 de marzo pasado. Qué hacés ante esa patraña periodística que, además, seguramente gravita para que pierdas la elección. Porque faltando dos semanas había un 15 % de indecisos, vos a esos indecisos les decís: que el loco de Kirchner, el imbécil de Kirchner, esta tan loco que si pierde las elecciones va a hacer dos cosas, porque además hablaba del fraude. Va a adelantar las elecciones, entonces decís, este tipo esta loco, hay que sacárselo de encima, es muy probable que muchos hayan hecho esa lectura. La patraña, la intención periodística es imposible de demostrar, pero si es posible demostrar la buena fe.

¿Alguna vez el periodismo pide disculpas?
El otro día yo dije cualquier barbaridad de Kirchner, cuando Kirchner me llamó a la radio. Por la compra de los dos millones de dólares. En la última semana de febrero me lanzo con una crítica feroz contra Kirchner. Dije cualquier cosa, barbaridad tras otra. Porque pensaba que compró los dólares para especular.
Con lo cual si lo hizo, estábamos en presencia de un enfermo que desde adentro del gobierno teniendo la posibilidad de contar con información privilegiada, compra dólares para especular como cualquier hijo de vecino. Y dale que te da a la matraca, yo decía: “Kirchner hace trizas a la pobre gente que cree en él”. Kirchner se entera, o escucha y me llama por teléfono por primera vez en la vida. Me dice: “Mire Víctor Hugo, ¿cómo le va?”, bien le digo, medio asustado. Y me dice, “yo le quiero decir a usted, me importa usted, los demás no.
“Yo compré esos dólares en el Banco Central, legalmente porque tenía un compromiso en dólares. Compré en octubre, última semana y vendí en noviembre porque tenía un compromiso en dólares. Le puedo mandar toda la documentación que avala esto. Y le digo: “No me mande nada, con su palabra alcanza”. Porque yo he sido el que cometió una infamia porque ese tipo con lo que me dice me esta convenciendo, entonces voy al micrófono y pido disculpas a la gente. La gente se enojaba, porque como yo pedía disculpas, porque como el igual había comprado dos millones de dólares y otras cosas más. Vos hablás mal de un tipo, el tipo te llama, vos le crees lo que te dice, pero le decís demuéstremelo es doblemente una porquería.
El periodismo destrata, no dice no era verdad que este loco entregaba el gobierno si perdía las elecciones en marzo de 2010. No paso nada, estos tipos están vivitos y coleando pero todo el mundo preocupado porque han mejorado en la imagen. Está bravo el asunto.

“Messi me parece el único verdadero fenómeno actual”

“Estoy empezando a tener miedo de que Messi haga en Sudáfrica un gol parecido al segundo de Maradona a los ingleses y yo no sepa que decir”. Fueron las últimas palabras de Víctor Hugo Morales, antes de perderse por los pasillos del Hotel Savoy tras casi una hora de charla, en la que abordó cuestiones vinculadas con la realidad nacional, y cómo no su afecto por el más grande de todos los tiempos, cuyo trono está cada vez más en jaque a partir de las obras de arte que muy a menudo presenta su heredero con la camiseta de Barcelona.
El Víctor Hugo encendido para referirse de las miserias del gobierno y de la oposición, tajante en sus argumentos para denunciar las maniobras espurias que le atribuye al Grupo Clarín y la crisis moral que agobia a la comunidad mediática, y contundente en esa acidez irónica que desempolva cuando le toca hablar de Julio Grondona, sacó su costado más tierno cuando llegó el momento de referirse a Diego Maradona.
Es que el “diez” dejó una impronta muy grande en su vida. No sólo por aquel insuperable relato que describió como nadie y como nunca el gol de Diego a los ingleses.
“Todo esto incide enormemente cuando a mí me toca hablar de Maradona. Yo le aclaro siempre a la gente que hablo desde la vereda del amor y de la gratitud para con Diego, en consecuencia no voy a ser crítico de Diego. Me sentiría el tipo más innoble del mundo si después de lo que he dicho de ese hombre, por las cuestiones indemostrables de si sabe o no sabe de fútbol, yo vaya a ser crítico de él”, aclaró.
“Puedo decir que me gustaría que ponga a Jonás (Gutiérrez) en lugar de Maxi (Rodríguez); puedo decir que me gustaría que el equipo se pare más adelante, o que se equivocó en la citación de un jugador, o que a lo mejor cuando arme el plantel deje afuera a dos que a mí me gusta y a él no, pero ningún elemento como para que yo sea crítico con una persona a la que le debo las mayores felicidades de mi vida en el fútbol y de mi vida profesional” admitió Víctor Hugo.
También coincidió el debut de Maradona con la casaca de Boca, el 22 de febrero de 1981, con el comienzo de su carrera en el periodismo argentino; dentro del partido aquel penal ejecutado por Diego que el gran relator que Uruguay dio al habla hispana remató diciendo que desde su zurda, Maradona “la soltó (la pelota) como una lágrima”.
Hizo una larga pausa cuando se le preguntó si esta licencia profesional se la permite sólo con Maradona.
“Estoy pensando… a lo mejor hay otro por quien yo sienta respeto desde otro lugar, pero podría ser crítico. Por ejemplo de Francescoli, en su intención de ser manager en las elecciones de River, opiné con mucha prudencia. No sé si está bien o mal eso, pero hay personas con las que uno establece mayor virulencia, porque hay personas que se equivocan y otras que son básicamente malas” respondió.
“Con éste, según el punto de vista de uno, aunque tal vez el malo sea uno, uno es un poco más duro. Con el que uno respeta o se equivoca, por ejemplo el presidente de Vélez Gámez cuando le ha tocado salir a protestar contra los árbitros, digo ‘lo respeto, pero creo que Raúl se equivoca en esta posición’. En otro caso diría ‘este desaforado, este mentiroso del fútbol encima hace culpable a los jueces de lo que ocurre’. Hay un margen de respeto, hay margen en el cual uno está prisionero del afecto, o de la subjetividad. La objetividad plena lo existe; más, yo no la quiero” completó.
Su discurso sobre Maradona se enganchó en las sensaciones que le provoca Messi, un futbolista al que cierta prensa telúrica no se cansa de atacar por los supuestos bajos rendimientos en la selección, como si el fútbol se tratase de una cuestión de resolución individual, como el tenis.
“Messi es un fenómeno; que me produce el placer estético que me producía Maradona, sucede que los medios tratan a Messi como si fuera Boca o River: vende porque es un genio o vende porque no sirve. Lo gris acá no va. Messi jugó mal, lo que se dice mal en la selección, sólo los últimos dos partidos de las eliminatorias. Pero el resto ha estado en 7 puntos, jamás debajo de 6, jamás el fracaso” enfatizó.
Víctor Hugo trazó algún paralelo entre el rosarino en la selección, y en el club catalán: “En el Barcelona le toca jugar en un equipo que domina las acciones, que por lo tanto le da más derecho al fracaso. Si vos sos un director de cine y hacés una película cada diez años, esa tiene que salir bien; si hacés diez por año, podés fracasar en seis o siete, pero va a quedar en la memoria la más importante. El no ha jugador mejor en Barcelona que en la selección en aquel partido con el Chelsea, cuando casi queda eliminado de la última Champions. Si todo hubiese terminado ahí, hoy la imagen sería exactamente la misma en la selección que en el Barcelona”.
“Resumiendo: Messi me parece un fenómeno; el único verdadero fenómeno del fútbol en este tiempo. Mucho más que Cristiano Ronaldo, porque comienza a ser –ahora más que nunca- el más eficaz de los jugadores que le dan estética al fútbol y el más estético de los eficaces. Un poco como Diego…".
“Por supuesto, todavía hay que esperar, no mucho más para que la comparación con Diego sea legítima, y si en el Mundial el equipo argentino da una respuesta parecida a la que dio frente a Alemania, el verdadero Messi va a aparecer y le va a dar a la Argentina satisfacciones inconmensurables” anticipó.
Frente a Víctor Hugo era imposible obviar un tema: el Grondonato y sus nefastas derivaciones en el fútbol argentino. ¿Cómo se sale, fue la pregunta?, y el uruguayo más famoso contestó: “Se sale por derivación natural, aunque cuesta mucho decir esas cosas. Muchas veces me he dicho si sería capaz de desearle la muerte a alguien, y me he respondido ‘no’. Además creo que Grondona ha sido un alivio para la parte de espíritu crítico que tenemos los periodistas” apuntó.
“Un hombre tan desastroso para conducir algo, como Grondona, ha sido un alimento permanente para nuestra profesión. Vamos a tener después de Grondona una continuidad grondoniana por un tiempo, hasta que el fútbol lo disponga. Creo que ustedes los más jóvenes van a ver -yo creo que también, porque no van a pasar 6 u 8 años años- cuando la Bruja Verón sea el presidente de la AFA. Y será fiel a la tradición de lo que ha sido Estudiantes de la Plata, que hasta sus dirigentes grondonianos han sido buenos dirigentes” auguró.
Para el ilustre visitante de los olavarrienses, “La Bruja” tiene “la personalidad suficiente como para no dejarse manejar por ese establishment de -no quiero decir una palabra dura, a ver si no me como un juicio a esta altura- moral grondoniana, que es también la moral de los medios que lo ampararon y lo protegieron, como Clarín, Torneos y Competencias fundamentalmente. Cuando uno ve lo que pasa en Ñuls, con ese barrabrava asesinado, sabe que ese tipo fue López durante muchos años y que López fue Grondona”.
Pero Víctor Hugo se extendió: “Lo de Grondona es como un vaso de vino que se derrama en el mesa; llega muy lejos la mancha de la moral grondoniana. Los multimedios recién descubrieron que López había hecho una tarea calamitosa en Ñuls el día después de perder las elecciones. Algo desvergonzado; no les importa tres pepinos nada. Lo único que les importa es el negocio. Grondona, López, Aguilar eran personas que le defendían el negocio desde adentro. Todos esos tenían protección porque les servían para los negocios”.

Clarín por hacer negocios ha hecho cualquier cosa
Clarín, la corporación cómplice es un tema que lo enciende. “La gran paradoja de Clarín, justamente fundado por un hombre de apellido Noble, ha sido la gran innobleza del triunfo de los que hacen negocios con el diario por encima de lo periodístico. Los periodistas porque son obsecuentes, porque no tiene personalidad, porque les conviene económicamente, porque ya están jugados y todo lo que les queda es huir para adelante, o porque algunos estarán convencidos”.
“Han permitido que su moral se convierta en la moral de los que hacen negocios y Clarín por hacer negocios ha hecho cualquier cosa: voltear gobiernos o sostenerlos, poner o sacar ministros, quedarse con todo el cable, quedarse con todo el papel, con todo el fútbol. Este es el país virtual que con toda razón clama la presidenta, entonces el mismo periodismo le toma el pelo. La pelea es muy desigual en ese sentido” remató.
En el último párrafo de la porción futbolera de la charla, Víctor Hugo enfatizó la contextualización de este fútbol dentro de las miserias que suelen pasar inadvertidas a los ojos del consumidor desprevenido de los medios.
El mismo lector, oyente o televidente que después de leer esta nota esperará que llegue Sudáfrica y el gran relator uruguayo se vuelva a inspirar con Messi como se inspiró con Diego en el Estadio Azteca.

Fotos: Mariano Valentini
Fuente: Infoeme


Entrevista de Juan Pablo Mansilla a Víctor Hugo Morales en Perfil