sábado, 23 de enero de 2010

Diego “Chavo” Fucks: “Salir de la tele me hizo bien a la cabeza”

Dentro de un mes volverá a integrar el panel de columnistas de Duro de domar, después de haberse bajado del barco del programa que produce Diego Gvirtz. Además, no descuida su trabajo de relator deportivo.
Por: Leni González
“Es mi merienda”, dice, con un trozo de kiwi en la punta del tenedor. Con ropa deportiva, llega al gimnasio pero antes de comenzar su sesión en la cinta, la moza le alcanza un plato de frutas. “Vengo casi todos los días, me conocen, ya saben lo que tengo que comer”, explica Diego “Chavo” Fucks en plan de dieta porque quiere bajar de peso antes de empezar en la tele a fines de febrero, cuando ocupará otra vez su silla de panelista en el remixado Duro de domar, versión 2010, por Canal 9, posiblemente de lunes a viernes a las 23.
Junto al Chavo, Fernanda Iglesias, Guillermo Pardini, Anabel Cherubito y Matías Castañeda, el clásico de Diego Gvirtz regresa con la conducción de Daniel Tognetti, en el lugar que ocupara fugazmente el año pasado Fabio Alberti (en los mediodías de El Trece) y antes Roberto Pettinato, desde aquel Indomables de 2004 hasta fines de 2008 cuando también Fucks se bajó del barco. “Ya no quería estar más en el programa, se había vuelto muy farandulesco y el cambio de América al Trece lo había hecho más políticamente correcto y no me gustaba. Cuando se lo digo a Gvirtz, me sale con que conduzca 6,7,8 por Canal 7, así que sin laburo no me iba a quedar”, dice el Chavo, que no acertó con su predicciones. “Después me voltearon de ese lugar. Ese chico (Martín) Bonavetti (director ejecutivo del 7), a quien no conocía, decidió que no tenía que estar. Y me habría gustado aunque algunos lo critiquen. Hay 800 programas en contra del Gobierno, hay uno a favor y dicen que es una vergüenza; me parece que se equivocan. Prefiero 6,7,8 a Mirtha o tantos otros. Pero no sé por qué no fue, supongo que creyeron que era incontrolable, que estaba muy pegado a Duro de domar o que, en realidad, ni me conocían”, arriesga.

Con Gvirtz quedaste en buenos términos. ¿Y con Pettinato?
Con Gvirtz nunca me peleé. Y con Petti, todo más que bien, aunque tuvimos un 2008 bastante áspero.

¿Te gustó Un mundo perfecto?
Me gustaba la idea original. Creo que cuando buscás el rating terminás con Guido Süller. Petti lo hace porque es un conductor de la gran puta y muy talentoso y te rema el dulce de leche, pero no sé si a la gente que sigue a Petti le interesa Jacobo Winograd. Duro de domar era él, tenía una gran impronta suya y no sé por qué dejó en algún momento de verlo así.

¿Cuáles son tus expectativas con esta reedición?
Vamos a ver qué programa hacemos. Si pretenden que Tognetti haga de Petti, duramos dos semanas. Y si lo dejan hacer lo que sabe, que es periodismo, vamos a durar. El programa debería ser distinto.

¿Y vos vas a hacer tu rol de panelista medio petardo?
Decía lo que se me antojaba. Estamos tan acostumbrados a los periodistas con compromisos, que cuando alguien se tira para un costado parece que tira bombas. ¡Yo decía lo que se me ocurría! Pero no quiero mostrar tanto, estar tan expuesto, en carne viva.

¿Por tu fama “nocturna”?
Sí. La culpa la tuve yo, pero me perjudicó en mis relaciones personales y ya no me divierte.

“Un cortadito, por favor”, pide. Gente de todo tipo, desde una rubia mamá joven hasta un señor con peluquín pasan y lo saludan y el Chavo contesta, amable. “No soy fanático de la tele. Podría vivir sin la tele. No me gusta lo que provoca en la gente, todos creen que te conocen. Agradezco el afecto pero no hay derecho a que me digan qué gordo estoy. El radioescucha (sic) es distinto y me desespera no estar en la radio”, confiesa. Después del derrape de inicios de 2009, cuando se quedó sin Duro de domar ni 6,7,8, recibió con alegría el ofrecimiento de conducir Héroes y villanos, en la mañana de radio Belgrano. Ahora, en esa franja y a partir de febrero, en la FM Mega 98.3, conducirá Ojos bien abiertos. “Me hizo bien ese parate porque había desbarrancado, había tenido problemas personales –dice en referencia a su leyenda– y fue un corte, cerré una etapa. Salir de la tele me hizo bien a la cabeza, tomé distancia, entendí en qué me había convertido y no me gustaba”.

¿Apuntás a pasar de periodista deportivo a formador de opinión, como Víctor Hugo y Nelson?
Me gustaría. Trabajé con Víctor Hugo casi 20 años y el norte sería un poco ése. Los periodistas deportivos somos maltratados, subestimados intelectualmente. Me pasó cuando estuve en Rock and Pop, era muy pichi y me fumaron en pipa (se refiere al programa con Marcelo Zlotogwiazda): terminé afuera, está clarito que fue una cama por ser periodista deportivo. En ese sentido, Duro de domar trajo cosas buenas en mi carrera y me puso en otro lugar.
Por otro lado, Fucks continuará con actividades del año pasado: los mediodías en Fox Sport, con 90 minutos de fútbol, y los comentarios de los partidos por radio del Plata, además de la escritura de su sexto libro, sobre la Selección nacional: “Confío en Maradona. Se me hace imposible no quererlo”.

Sobre TyC y Continental ¿Cómo te paraste frente al tema AFA-TyC?
Está bien que la gente pueda verlo y que los goles dejen de estar secuestrados hasta el domingo a la noche, pero se parece que se pagó más de lo que vale. El Estado tiene obligación de sostener una aerolínea de bandera o los hospitales, pero no el fútbol, que es un negocio acá y en la China.

¿Trabajar en Fox Sport (de TyC) no te hace ruido?
No. Nunca me dijeron lo que tenía que decir. Hay mucho estúpido en la web que vomita, no opina, que yo criticaba a Torneos y después fui a trabajar ahí. Víctor Hugo decía que él estaba salvado, ganaba mucha plata y tenía un respaldo económico como para decir lo que quería. Los monopolios no me gustan pero no todo lo que se hacía en Torneos estaba mal. Yo estuve siete años, me fui y volví el año pasado.

Mencionás a Víctor Hugo como ejemplo. Pero él no ha dejado de criticar a Torneos y vos estás ahí.
Con ese argumento, no trabajaría en Continental con la gente que la maneja. Estoy en juicio porque me incumplieron un contrato de 3 años. Son unos ineptos que sólo facturan, echan gente y no tienen idea de nada.

Foto: Graciela Calabrese, Diario La Nación
Fuente: Crítica de la Argentina