domingo, 3 de mayo de 2009

Tenía un canal de TV, Clarín le sacó el aire y ahora es claque del 13

El gobierno podría explotar el caso. José Galicia, el creador del “es-pec-ta-cu-lar” que inmortalizó Pettinato, tuvo una señal en la zona norte hasta que Cablevisión y Multicanal se hicieron una sola empresa y lo expulsaron de la grilla. Experiencias similares promueve el ComFeR en los foros de la Ley de Radiodifusión en su batalla contra el principal grupo de medios.
Por: Rodolfo Barros
Los organizadores de los foros participativos de consulta pública que el Gobierno utiliza para dar a conocer su proyecto de Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, que en caso de aprobarse reemplazará a la actual Ley de Radiodifusión, invitan con especial atención a periodistas, titulares de ONGs y cooperativas que plantean que la concentración de medios y la falta de obligatoriedad de crear contenidos propios, impulsaron la desaparición de programas locales.
Uno de esos casos, que no llegó a los foros, es el de José Galicia, catapultado a la fama por Roberto Pettinato hace más de dos años, cuando capturó partes de su programa de cable en Duro de domar, y resaltó su eslogan: es-pec-tacu-lar.
Ahora reidor en Duro de almorzar –que emite Canal 13– y propietario de un locutorio en San Fernando, Galicia contó haber tenido mejores días. Fue propietario de la señal NVT, que nació como televisión abierta de baja potencia antes de la llegada del cable a San Fernando. Luego, con el nacimiento de Becar Video Cable, la señal fue incorporada a la programación que aumentó su cobertura a todo el Conurbano bonaerense norte. La compañía fue vendida más tarde a Multicanal, del grupo Clarín. Hasta 2007, cuando Multicanal se fusionó con Cablevisión, en la zona norte había tres señales de contenidos locales, incluida NVT. Pero tras la unión de las empresas, se quedó con una y sacó del aire a las otras dos.
“Ni siquiera nos avisaron. Me enteré el 27 de marzo de 2007 que no estábamos en el aire porque me avisó uno de los operadores”, explicó Galicia a Perfil.
Galicia asegura que facturaba a través de su productora de contenidos unos $ 25 mil mensuales y empleaba a 6 operarios de manera directa y a unos 50 productores de manera indirecta, pero no inició acciones legales contra la compañía de cables de Clarín “porque me aseguraban que en dos meses volvíamos al aire”.
Jorge Castello, director de noticias de una radio local, recuerda con angustia los años en “que había más diversidad informativa en la zona norte”.
También perdió su espacio como conductor del noticiero local de NVT.
La fusión Cablevisión Multicanal fue aprobada por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, controlada por el ultrakirchnerista secretario de Comercio, Guillermo Moreno, días previos a que Néstor Kirchner le dejara el sillón presidencial a su esposa. Por ese final de 2007, las relaciones entre el Gobierno y Clarín eran cordiales y mediadas por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández. Pero tras el estallido del conflicto del campo y el inicio del intento gubernamental de ingresar en Telecom, las relaciones con el principal grupo de medios de la Argentina se convirtieron en sucesivas batallas.
“La madre de todas las batallas”, como define el interventor del ComFeR, Gabriel Mariotto, cada vez que habla “contra los monopolios que se oponen al proyecto” oficial para cambiar la Ley de Radiodifusión.
En el ComFeR es un secreto a voces que le están pidiendo documentación a Clarín para que explique cómo utiliza las licencias de los sucesivos cables que adquirió antes de la fusión entre Cablevisión y Multicanal. En Clarín afirman que devolvieron las licencias que no usaban y que cumplen la ley a rajatabla.
El propósito del ComFeR, afirman, es no aprobar en esa instancia la fusión que dejó afuera de la grilla a Galicia, entre otras voces.

Fuente: Diario Perfil