.En la última edición de la revista Newsweek se presenta una entrevista al recién posesionado presidente paraguayo, Fernando Lugo, quien gobernará ese país, afectado por la corrupción y problemas económicos, hasta 2013.
¿Se considera un izquierdista?
No, siempre he dicho que soy centrista, como el hoyo de un poncho, por encima de los partidos políticos. Este fue un elemento decisivo en nuestro triunfo. (Como sacerdote y obispo) He adoptado una postura preferencial por los pobres durante los últimos 30 años, pero no es posible convertir una alternativa pastoral en una opción político-ideológica.
Durante la campaña electoral se mostró interesado en distanciarse del presidente de Venezuela. ¿Por qué?
En Paraguay diseñaremos nuestro propio proyecto político. Cada país tiene la independencia para desarrollar su propio modelo; no emularemos a Venezuela, Nicaragua, Bolivia o Ecuador.
Pero usted parece estar siguiendo el liderazgo de Venezuela, Bolivia y Ecuador al pedir la elección de una asamblea que redactaría el borrador de una nueva Constitución para su país...
La sociedad paraguaya quiere una nueva Constitución. Viajamos por todo el país escuchando las necesidades de las personas, y una de las demandas más importantes se relacionaba con reescribir la Constitución de 1992, (la cual) tiene muchas fallas. Es tiempo de convocar una nueva asamblea constituyente para modernizar nuestras instituciones democráticas.
¿Qué significa para usted el llamado socialismo del siglo XXI de Chávez?
Es todavía un proyecto por definir. Si el socialismo del siglo XXI promueve la justicia social, la igualdad y la armonía, podría ser un proyecto viable.
Usted ha criticado a los EEUU por apoyar a las dictaduras en el pasado. ¿Cómo ve usted su relación con los EEUU?
Queremos mejorar nuestras relaciones. He sido invitado por la administración de Bush a visitar los EEUU muy pronto. Esta será una oportunidad para encontrar nuevas maneras de cooperación.
Brasil quiere crear un Consejo de Defensa Sudamericano que desarrollaría políticas militares regionales sin la participación de los EEUU. ¿Usted apoya este plan?
Lo estamos estudiando. Tenemos que ver qué es lo mejor para Sudamérica y tener más conversaciones sobre temas de seguridad regional. Hemos aceptado analizar este Consejo propuesto, pero no como una opción para reemplazar a la OEA u otras organizaciones internacionales que pueden ayudar a reforzar la seguridad.
El Vaticano rechazó su renuncia al sacerdocio hace dos años debido a que usted emprendió un compromiso de vida con el clero el día de su ordenación. ¿Mantendrá sus votos sacerdotales de castidad, pobreza y obediencia?
Ya no. Mi renuncia al sacerdocio significa que he dejado la opción pastoral y que he recuperado todos mis derechos sociales, políticos y económicos.