lunes, 25 de agosto de 2008

"Le están atribuyendo un poder a los medios que no lo tienen"

El prestigioso semiólogo Eliseo Verón analizó el rol de los medios en democracia, la relación del gobierno con el periodismo, la influencia en la construcción de la opinión pública y el papel que juegan tanto los diarios como la TV.
Por Daniel Villarreal, villarreal@lacapitalmdq.com.ar
La relación de políticos y gobernantes con el periodismo, sumado a intereses particulares, en ocasiones conllevan a la utilización acciones o presiones que apuntan directamente a influenciar a la población.
Ante esta situación, diversos interrogantes abren el debate: ¿Cuál es el papel que juegan los medios de comunicación en un sistema democrático?, ¿quiénes marcan la agenda de los temas de actualidad?, ¿la opinión pública se puede construir? o ¿cuál es el rol de los diarios y la televisión?
Para el semiólogo Eliseo Verón son cuestionamientos que no alcanzan sólo con una respuesta. Se trata de aspectos que deben abordarse sobre cada acontecimiento en particular, en base al contexto y la coyuntura.
Pero trazando un análisis inmediato de la actualidad nacional, considera que tanto el ex presidente Néstor Kirchner como la jefa de Estado, Cristina Fernández, "por desconfianza, le atribuyen un poder muy grande a los medios".
Cabe señalar que recientemente el prestigioso especialista de nivel internacional visitó Mar del Plata, donde brindó una conferencia en el marco del ciclo Café Cultura Nación que tuvo lugar en el teatro Auditorium.
Previo a ese debate abierto -ante una platea colmada-, Eliseo Verón dialogó con La Capital.
- Se sabe que la comunicación social es dinámica, pero siempre se mantiene vigente el debate sobre su rol ante la comunidad. ¿Los medios influencian o construyen la opinión pública?
- No creo que se construya enteramente desde los medios. Considero que los medios alimentan lo que después va a sufrir transformaciones y diferentes tipos de procesos en las personas que generarán una opinión. Los medios no determinan nunca nada, directamente. Sí generan una alimentación permanente de elementos, de temas o figuras que después la gente trabaja para llegar a una opinión. Me parece que no hay una relación lineal, sino que es más complicado.
- ¿Pero sí hay un rol protagónico en este proceso?
- Hay un rol protagónico muy importante de los medios en las sociedades democráticas de los últimos 50 años.
- En los últimos tiempos, los gobiernos hicieron hincapié en los riesgos que corre la institucionalidad de la Nación ante diversas situaciones. ¿Qué papel tienen los medios periodísticos frente a esos casos?
- Me parece que no se puede generalizar porque la influencia de los medios depende mucho de cada coyuntura en particular. Hay situaciones en las cuales la televisión puede jugar un papel muy importante y otras en las que tiene un rol pequeño o, incluso, ninguno. Por ejemplo: la primera elección presidencial de Lula en Brasil -octubre de 2002- y la de Néstor Kirchner en Argentina -un año después-. Hubo dos comicios en dos países vecinos. En Brasil, la TV jugó un rol muy importante, mientras que en Argentina no determinó nada porque las cosas no sucedieron como consecuencia de la pantalla. Es muy variable y no se puede generalizar.
- Depende de cada hecho o acontecimiento en cuestión…
- Y del contexto. En casos electorales en los que hay un cierto equilibrio sin fuertes diferencias entre dos candidatos la TV puede ser muy importante dado que puede balancear hacia uno de los lados en pugna. Sin embargo, en otras circunstancias la elección puede estar determinada por factores socioeconómicos y no por ese medio.

La prensa escrita
- ¿Y cuál es el rol de la prensa gráfica, teniendo en cuenta que los actores políticos actuales hacen referencia constante a los titulares de los diarios?
- Creo que los medios gráficos siempre marcaron la creación de agenda en la historia del periodismo. El problema que se plantea hoy es la cuestión de la crisis de los diarios y hasta la discusión sobre su posible desaparición.
- El avance de internet y los medios digitales por sobre el papel…
- Nadie va a asegurar en cuánto tiempo podría suceder eso, pero hay mucha gente que esto lo está planteando y hace ya varios años que se convirtió en una discusión muy complicada. Es verdad que en el largo plazo hay un descenso bastante regular de los grandes diarios, no estoy hablando de la prensa gráfica en general, sino de un género específico.
- De hecho, los principales diarios del mundo se están reestructurando…
- Están tratando de hacer frente a la situación. Cabe recordar que en la modernidad del siglo XX los diarios jugaron un papel de agenda. Es decir de organización de temas sobre los cuales la sociedad discute. En ese sentido la televisión siempre fue un poco detrás y repetía lo que los diarios habían analizado a la mañana. Si bien hay mucha gente que no está de acuerdo, la eventual desaparición de los diarios se está discutiendo mucho y fue el debate central en el último congreso de Suecia.
- Pero, a pesar de todo, siguen marcando el rumbo de la agenda de los temas de actualidad.
-Yo creo que sí. A nivel de la información todavía juegan ese papel.

Interacción con el poder político
- Cómo analiza la relación del Gobierno con el periodismo?
- Tomando el conjunto del período propiamente kirchnerista, es un gobierno que se ha caracterizado por una desconfianza permanente con respecto a los medios. Lo cual es extraño y no es fácil comprender debido a que si uno tiene tanta desconfianza es porque les atribuye un poder muy grande. Y eso es bastante discutible y no es un tema que se pueda cerrar con un estereotipo. Más allá de los últimos cambios de actitud de la presidenta Cristina Fernández, en general el ex presidente Néstor Kirchner se ha caracterizado por una especie de actitud en la que los medios están en contra de él. Esto ha pasado en los sistemas democráticos de muchos países, pero es paradójico porque le están atribuyendo un poder a los medios que para mí no lo tienen hasta ese grado, o no es tan grande como para que se los pueda acusar de desestabilizar o complotar.
- Justamente le otorgó ese poder cuando el entonces presidente Néstor Kirchner tenía el índice de adhesión y popularidad más alto…
- Es algo que nunca se termina de entender. Por eso ahora vamos a ver con la Presidenta si hay un cambio de actitud en el mediano y largo plazo.
- ¿Y cómo observa esta relación ahora, con Cristina Fernández de Kirchner?
- Ella empezó como su marido y, además, lanzando una serie de acusaciones. Ahora pareciera que alguien le dijo que había que operar de otra manera. Recientemente hubo cambio de actitud, comenzó a dar conferencias de prensa e hizo discursos en televisión. Esto es relativamente nuevo, pero vamos a ver si dura.
- ¿Habrá que ver si es un cambio de fondo o de forma?
- Exactamente.
- Se sabe que los diferentes gobiernos han ejercido presiones a los medios, pero es la publicidad oficial el elemento más firme para inducir. ¿Cuál es la situación actual, según su parecer?
- Eso es también un tema común, no solamente en la Argentina. Por ejemplo, en Francia el presidente (Nicolás) Sarkozy no es alguien que tenga desconfianza en los medios pero los quiere controlar fuertemente. Es una persona muy mediática tratando de estar todo el tiempo en todos lados permanentemente. Allí hay un problema relativo al nombramiento del presidente de la televisión oficial, dado que Sarkozy lo quiere designar él personalmente, lo cual es un intento bastante flagrante de querer tener un control muy cercano de la TV oficial. Creo que es una tentación del poder político en ese sentido, producto del mismo mito de creer que los medios tienen un poder muy importante. Para mí lo tienen, pero se trata de un poder complicado que se puede desestabilizar rápidamente, que supone un equilibrio que no es fácil de lograr. No es simple.
- Eso es subestimar también a la opinión pública…
- Además es subestimar a la población en su capacidad de opinión.
- Volviendo a la televisión, ¿usted descree que el show de la pantalla atentó contra la retórica y el nivel político?
- Si detrás hay una hipótesis, sí. Por ejemplo en el conflicto del campo muchos sostenían que los medios estaban en contra de la política que quería instalar el gobierno.

La nueva crisis de la universidad
En su amena y extensa charla con La Capital, Eliseo Verón, quien también posee una destacada trayectoria en la docencia -con cargos universitarios en Buenos Aires y en París- aprovechó la ocasión para referirse sobre lo que considera el nuevo desafío de las casas de altos estudios: "La crisis que genera la influencia del mercado".
"Creo que hay un verdadero problema en general, que no se da solamente en la Argentina, es algo así como una crisis de la universidad", comentó.
Sin embargo, explicó que "esto en Europa se siente mucho por todas las cosas que se pusieron en marcha para homogenizar los estudios y carreras. Sucede que hay un tema fuerte de presión de ciertos sectores de la sociedad para la adaptación de la universidad al mercado de trabajo y eso está merodeando en todos lados, también en nuestro país".
Según Verón, "desde cierto punto de vista uno debe pensar que la universidad debe ser una entidad autónoma con respecto a los distintos poderes de la sociedad para generar libremente su reflexión".
"Pero yo creo que hay un verdadero problema que se está empezando a sentir y que en la situación actual de mercado global hay muy fuertes presiones de adaptación de la las casas de altos estudios al mercado -continuó-. Lo cual no digo que no tenga que estar ajena, pero no puede ser la prioridad".
"Por lo pronto -agregó- la universidad debe intentar buscar su camino propio y no por la imposición de algún poder o de algún lobby que esté operando en esa dirección".
Si bien el especialista señaló que él no cuenta con una solución inmediata, opinó que "ahora es el momento de iniciar una reflexión sobre ¿qué es la universidad en este mundo globalizado?, ¿cuál es su misión? y ¿qué es lo que hay que hacer?".
Consultado por este diario sobre la singular convocatoria al debate, concluyó que "no sé si se va a poder concretar, pero el debate habría que hacerlo. Urge porque la universidad se ha ido quedando aislada, se fue cerrando sobre sí misma. Y eso también es un problema".

Fuente: Diario La Capital