Con motivo de conmemorarse un nuevo aniversario del nacimiento de Miguel Bru, sus familiares, amigos y amigas se reunirán ésta tarde frente a la comisaría 9na de nuestra ciudad cita en calle 5 y 59, lugar donde hace casi 15 años le quitaron la vida.
La Asociación Miguel Bru convoca a toda persona que quiera acompañar a su familia a presentarse en dicha dependencia a las 19.30hs.Hoy, 16 de julio de 2008, Miguel Bru cumpliría 38 años. El 17 de agosto de 1993 personal de la comisaría 9na de La Plata lo torturó hasta matarlo para luego desaparecerlo. Tenía 23 años.
Miguel por su gente
Silvina, su hermana: “¿Porqué a nosotros que éramos flores nos tiraron mierda? Cuanta necesidad de verte, de tocarte, de tenerte. Cuanto silencio en casa, cuando dolor en mi alma. Cuantas ganas de que estés, de hablarte y que me hables”…
Alberto Mendoza Padilla, amigo: ¿Qué estaríamos haciendo Miguel hoy, después de 15 años? A veces uno para la pelota y se lo pregunta. Seguramente nos juntaríamos a comer un asado, a improvisar un picadito, compartir algún recital y colgarnos hasta la madrugada hablando de política y fútbol. Pero cuando se pone nuevamente en movimiento la pelota una inmensa nostalgia y angustia ahoga los recuerdos y los sueños. Feliz cumple Miguel. Aca estamos y seguiremos estando con Rosa y los chicos/as buscándote y luchando para que a nadie le pase lo que te pasó a vos. Hasta siempre amigo.
Kike Núñez, amigo: “Un tipo piola, muy abierto, espontáneo, sincero para decir las cosas, muy natural”
Carolina, su novia: “Lo que mas le gustaban era los perros, el rock and roll, Boca, las marchas”.
Cristian Alarcón, amigo y fundador de la Asociación Miguel Brú (AMB): “Miguel era parte de una gran banda que sabía pasarla bien, aunque golpeada, solía caminar en zigzag en grandes patios llenos de rock cuando éramos universitarios y estudiábamos periodismo en lo que llamábamos la Escuelita. Solíamos escaparnos irresponsablemente de las clases aburridas para seguir el ritmo de la ciudad donde en esa época los pibes no querían dormirse y todo devenía en festejo, ruidos de baterías punkies, cierta nube de precoz desesperanza mezclada con la candidez y la virginidad más desenfadada que haya conocido”.
Laura Sottile, integrante AMB: Me lo crucé en algunos recitales de bandas punk en bares de La Plata , 1993, el año que ingresé a la Facultad , flaco, compartiendo una birra, siempre con sus dos perros, Dago y Magui. Después desapareció. Un golpe fuertísimo, y muy difícil de digerir. ¿Dónde está?, una pregunta que se convirtió en certeza. Ser concientes que la policía lo había desaparecido. Los pasillos de la Facultad , y la vida de todos, se transformaron. Las marchas con Dago y Magui entre nosotros, el jury a Vara, el ansiado juicio y la perpetua a los canas, la búsqueda constante. “¿Dónde está Miguel?”. Un camino, una herramienta para ayudar a otros, la certeza de que siempre vamos a acompañar a tu familia, de que siempre te vamos a buscar. Y también de que te encontramos, todos los días, a través de la maravillosa tenacidad de Rosa y mis compañeros, y del trabajo que hacemos desde la Asociación día a día. Para que no vuelva a pasar.
Luciana Burgos, integrante AMB: “Yo no conocí a Miguel, pero muchos dicen que él está vivo en Rosa. Y si es así, entonces Miguel era un tipo genial, especial por su humanidad, por su espíritu de lucha, por su manera de sorprender todos los días. Un loco lindo, como loca linda es su mamá”.
Lucas Mac Guire, integrante AMB: No lo conocí en persona, pero puse en nombre de Miguel el significante de otros miles, y en la búsqueda incansable de su madre, la lucha que todos nos debemos por una sociedad justa…