viernes, 28 de marzo de 2008

¿Recién se dan cuenta?

La televisión pública investiga: "Los trabajadores rurales son los peor pagos", fue el informe emitido en el noticiero central. Con entrevistas a la viceministra de Trabajo, Noemí Rial y al secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), Gerónimo Venegas. En sintonía con el informe publicado ayer por el INDEC, Rial señaló que en el campo "el trabajo en negro alcanza a un 50 por ciento" y que en ese sector de la producción "la mayoría no se puede jubilar", se registra "el mayor índice de analfabetismo", y hay "una altísima cantidad de niños trabajando"."En el campo el trabajo no registrado alcanza altos índices, alrededor del 50 por ciento, especialmente en las regiones del noreste y noroeste en temporada de zafra", señaló Rial a Télam al reseñar el resultado de un operativo de inspecciones realizado por el ministerio de Trabajo en las economías regionales.
Explicó que el operativo, que se inició a principios de este año, se efectuó "en Misiones, en los sectores de tabaco y té, en Catamarca, con el olivo; en Tucumán, con la caña de azúcar; en Cuyo, con la vitivinicultura; Río Negro, con la pera y la manzana", entre otras regiones.
Rial calificó como "grave" el tema de las condiciones ambientales en que se desenvuelven estos trabajadores, en especial los de temporada, ya que "se trabaja al aire libre, sin baños. duermen en el campo a cielo abierto, y como muchas veces se ven incentivados por el cobro a destajo, las jornadas son de 12, 14 o más horas".
"Como consecuencia de esta situación irregular, se da la paradoja que aunque han trabajado desde muy jóvenes, incluso desde niños, no pueden acreditar 30 años de labor, cuando lo han hecho toda la vida, y no se pueden jubilar", puntualizó.La viceministra de Trabajo señaló que de este modo se ven enfrentados con una situación "muy triste, porque a los 60 años muchos tienen un desgaste físico muy alto, y sin aportes suficientes como para poder jubilarse".
Además, "en el sector no registrado de los trabajadores del campo se da uno de los mayores índices de analfabetismo: es común ver en las escuelas rurales personas de 50 ó 60 años que están aprendiendo a leer y escribir".
En ese punto, Rial destacó las campañas de alfabetización que lleva adelante en el interior la UATRE.Además, según los datos de los operativos, "hay una altísima cantidad de niños trabajando en el campo, muchas veces colaborando con sus familias, y muchas veces llevados por capataces, con argumentos increíbles a favor del trabajo infantil".
"Tenemos confeccionado un mapa de trabajo, de acuerdo a las distintas zafras, donde se marca notoriamente la presencia infantil", manifestó la viceministra de Trabajo.
En noviembre del 2002 en las Señales dimos cuenta de que en el país había unos 180 mil niños que trabajaban en distintos quehaceres rurales, según nos contó Gustavo Echegaray de la UATRE: "El trabajo infantil rural es un flagelo que cercena el derecho del niño a formarse y educarse. Un chico que trabaja tiene condenado su futuro" y señaló que existen "unos 180 mil niños trabajadores en el campo, cuando la escuela es un derecho humano inalienable".
También pidió a los gobiernos "que fortalezcan la inspección y la creación de nuevos mecanismos para descubrir los lugares donde se explote a los pequeños y tender a la reinserción de los niños trabajadores en el sistema educativo formal".
El año pasado los obreros de la firma Campo Grande, Mendoza, uno de los más grandes exportadores de ajo, denunciaron sobreexplotación y trabajo en negro. Por día trabajan entre 8 a 15 horas corridas, según la demanda, sin descanso cobrando $500 aproximadamente la quincena. Jubilación, vacaciones, obra social, aguinaldo y feriados son derechos desconocidos por los trabajadores del sector. El régimen laboral es deplorable por cada caja de 10 kg. de ajo que embalan les pagan $2,29, la empresa coloca a 18 dólares la caja en el mercado externo. "Hay compañeros que se están por jubilar que van a la AFIP a buscar sus aportes y se encuentran que no están, no existen, dónde está la plata de nuestros aportes".