domingo, 27 de enero de 2008

Sandra Cabrera 4 años de impunidad

Porque en el fondo, uno ama este mundo a partir
de la certeza de que este mundo, triste mundo
convertido en campo de concentración, contiene otro mundo posible.
O sea, que el horror está embarazado de maravilla.
Eduardo Galeano

El 27 de enero de 2004 un balazo en la nuca acabó con la vida de Sandra Cabrera, secretaria general de la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (AMMAR Rosario). No solo se debe repudiar el hecho sino también la inacción de la justicia que en estos años no avanzo en la búsqueda del responsable del brutal crimen y con esto preparó el terreno para que el asesino se encuentre en libertad.
En la lectura del comunicado (que se puede escuchar completo más abajo) sostuvieron que "Las mujeres de AMMAR sentimos que la Cámara de Apelaciones en lo Penal integrada por Ernesto Pangia, Alberto Bernardini y Eduardo Sorrentino; el actual juez en la causa, Alfredo Ivaldi Artacho; y el ex gobernador Jorge Obeid junto al poder policial, se burlaron de nosotras".
El poder político nada se hizo acerca de la derogación de los artículos del código de faltas de la provincia relacionados a la prostitución, con esto, el hostigamiento policial a las trabajadoras y los trabajadores sexuales continúa.

Cronología de los hechos

2000. La trabajadora sexual Sandra Cabrera realiza su primera denuncia pública a raíz de una paliza que le dan dueños de prostíbulos y patovicas de la zona Terminal de Rosario.

2001. Se forma la Asociación de Mujeres Meretrices de Rosario (AMMAR), con Sandra Cabrera como secretaria general.

2003. AMMAR lanza una campaña en todo el país por la derogación de los Códigos Contravencionales que criminalizan el trabajo sexual. En Rosario, los artículos 83, 97 y 93 (prostitución escandalosa, travestismo y ofensa al pudor) del Código de Faltas son utilizados para detener, hostigar y cobrar coimas a las trabajadoras sexuales.

Marzo de 2003. Una patrulla se lleva detenida a una integrante de AMMAR y a dos travestis que aguardan clientes en su parada habitual. Acompañadas por Sandra Cabrera denuncian al Jefe de la Seccional 12 de la Policía por el "trato humillante" recibido.

Abril de 2003. Sandra Cabrera cuenta a los medios de comunicación que se reunió con personal del ministerio de Gobierno para solicitar que las trabajadoras sexuales “no seamos detenidas en días de semana, durante el ciclo lectivo, para poder enviar a nuestros hijos al colegio".

Abril de 2003. Sandra Cabrera se entrevista con el vicegobernador de Santa Fe, Marcelo Muniagurria para solicitarle que apoye el proyecto de ley presentado por el diputado Eduardo Di Polina del Partido Socialista (PS), que deroga los artículos del Código de Faltas que criminalizan el trabajo sexual. El vicegobernador se compromete a conseguir entrevistas con el ministro de Gobierno, pero dice que él no tiene poder sobre la policía.

10 de septiembre de 2003. AMMAR Rosario denuncia en los Tribunales de la Provincia de Santa Fe a los Jefes de la División Moralidad Pública de la policía por recibir dinero de boliches para impedir el trabajo de las mujeres en la calle y sacar del mercado a las competidoras, por amparar lugares de explotación sexual infantil y por cobro de coimas a las trabajadoras sexuales de la calle para no llevarlas presas. A raíz de estas denuncias son desplazados de sus cargos el jefe Javier Pinati y el subjefe Walter Miranda. La denuncia es firmada por tres integrantes de AMMAR Rosario, entre ellas Sandra Cabrera.

Fines de Septiembre de 2003. AMMAR Rosario se reúne con el ministro de Gobierno, Carlos Carranza, para denunciar que continúa el hostigamiento policial.

9 de Octubre de 2003. Se recibe en la sede de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), donde funciona AMMAR Rosario, una amenaza telefónica: "Decile a Sandra que a la piba la va a encontrar muerta antes de mañana". La piba es la hija de Sandra Cabrera, de 8 años. Desde ese día, la casa de la dirigente de Ammar es custodiada por la sección Seguridad Personal de la policía. Ese mismo mes, una denuncia anónima presentada en el juzgado de Menores Nº 2 señala que "Sandra Cabrera manda a su hija a mendigar y que no la envía a la escuela". Una asistente social corrobora que la denuncia no tiene asidero.

17, 19 y 24 de Octubre de 2003. Tres trabajadoras sexuales son golpeadas con ferocidad en distintos puntos de Rosario por hombres de civil que se dan a la fuga y que la policía nunca encuentra. Sandra lo denuncia públicamente.

Fines de Octubre de 2003. Sandra vuelve a ser amenazada. A pesar de contar con custodia policial en la puerta, dos individuos entran a la casa, la golpean y le ponen un revólver en la cabeza a su perro mientras le dicen “dejate de joder”. En un comunicado emitido por AMMAR y la CTA Rosario luego de este episodio, se señala: “Lamentablemente estas amenazas se vienen sucediendo en todo el país para que las compañeras de AMMAR dejen de luchar por la derogación del artículo que penaliza su trabajo en esa provincia. Esta lucha se enmarca en la campaña Nacional que llevan adelante todas las compañeras de AMMAR, para que cesen los maltratos y la discriminación de que son víctimas". Aquel comunicado finalizaba: "Es por todo esto que hacemos responsable a las autoridades de la provincia de la integridad física de nuestra compañera Sandra Cabrera y su hija”.

9 de enero de 2004. Por orden del subsecretario de Seguridad, Alejandro Rossi se retira la custodia policial de la casa de Sandra. Rossi argumenta: “No se puede hacer una custodia personal sobre una prostituta callejera, es muy difícil".

23 de enero de 2004. Sandra Cabrera acompaña a la meretriz Stella Maris Langoni a realizar una denuncia en la Fiscalía Nº 1 de Rosario contra la sección Moralidad Pública de la Policía. Longoni denuncia que fue detenida días antes por agentes de Moralidad Pública junto a otras compañeras en San Lorenzo y Alsina, a pesar de haber pagado a un policía de esa dependencia la cuota semanal de 50 pesos con el objetivo de no tener problemas. Sandra denuncia ante los medios la situación, que sale publicada con una foto de ella el día 24 de enero de 2004.

27 de enero de 2004. A los 32 años, la secretaria general de AMMAR Rosario, Sandra Cabrera, es asesinada de un balazo en la nuca a pocas cuadras de su casa y de su parada en la zona de la Terminal. Habían pasado apenas tres días de la última denuncia.

28 de enero de 2004. La investigación del asesinato recae en el juez Carlos Carbone del Juzgado Nro. 9. AMMAR no puede ser querellante de la causa, porque el Código Procesal Penal santafesino impide que los representantes de la víctima actúen como querellantes, ya que esa figura es privativa del Estado.

30 de enero de 2004. Como respuesta al crimen de Sandra, el gobernador Jorge Obeid disuelve la sección policial Moralidad Pública y se compromete a derogar los artículos del Código de Faltas provincial que penalizan la prostitución, tal como AMMAR reclama.

Marzo de 2004. Desestiman crear una Comisión Investigadora en la Cámara de Diputados para investigar la muerte de Sandra y finalmente crean una comisión simbólica que no ejerce ninguna presión y queda paralizada a los sesenta días.

10 de junio de 2004. Luego de tomar 116 declaraciones testimoniales, 25 informativas y la indagatoria al policía federal de la División Drogas Peligrosas Diego Victor Parvluczyk (que no sólo se contradijo, sino que fue visto por testigos con Cabrera en la madrugada del 27 de enero), el juez Carlos Carbone considera que hay elementos para llevarlo a juicio y dicta el procesamiento del policía Diego Parvluczyk por el delito de “homicidio calificado con alevosía”.

7 de noviembre de 2004. La Cámara de Apelaciones en lo Penal, integrada por Ernesto Pangia, Alberto Bernardini y Eduardo Sorrentino, deja sin efecto el procesamiento por considerar que los elementos de prueba “no son suficientes”. Los camaristas argumentan que los testimonios tomados por el juez Carbone a las principales testigos, todas trabajadoras sexuales, no son válidos porque provienen de “personas con actividades callejeras que transcurren las madrugadas con un itinerario errante”, entre otras valoraciones negativas hacia las compañeras de Sandra. Diego Victor Parvluczyk sigue imputado, pero queda libre.

10 de noviembre de 2004. AMMAR convoca a una conferencia de prensa en la sede de ATE Rosario, donde repudia la decisión de la Cámara de Apelaciones de liberar al único imputado. Claudia Lucero, elegida secretaria general de AMMAR Rosario luego del asesinato de Sandra, afirma: “Detrás de Parvluczyk hay autores intelectuales que no están siendo investigados. Tres días antes de su asesinato Sandra denunció con nombre y apellido a un policía que cobraba coimas a compañeras. Está claro: la policía puede matar con impunidad”. Además, AMMAR denuncia que volvieron los pedidos de coimas a las trabajadoras sexuales en la zona de la Terminal, donde fue asesinada Sandra.

12 de Noviembre de 2004. El abogado defensor de Diego Parvluczyk pide la recusación del juez Carlos Carbone por “imparcialidad”. La Cámara de Apelaciones da lugar al pedido y Carbone es separado de la causa.

Diciembre de 2004. La causa por el asesinato de Sandra Cabrera queda en manos del juez de instrucción Alfredo Ivaldi Artacho, quien se escuda en la “falta de infraestructura” para no avanzar en la investigación. La causa queda congelada.

24 de octubre de 2006. La Cámara de Apelaciones da lugar al pedido del imputado Diego Parvluczyk y reduce hasta el 14 de junio de 2007 la prorroga para la investigación del homicidio de Sandra Cabrera.

Abril de 2007. El gobernador Jorge Obeid envía a la Legislatura un proyecto para modificar el Código de Faltas donde reemplaza “moralidad” por “tranquilidad pública” requiere la denuncia de un tercero para aplicar la sanción. Pero impone arresto o multa a quienes ejerzan la prostitución en la calle.

26 de Abril de 2007. AMMAR Rosario denuncia que Obeid no sólo no cumplió con su compromiso de derogar el Código de Faltas, sino que presenta un proyecto que “mantiene la criminalización del trabajo sexual” y además “persigue a toda persona que se organiza y manifiesta”.

22 de noviembre de 2007. Diego Parvluczyk es sobreseído. El juez de instrucción Alfredo Ivaldi Artacho argumenta que “no se incorporaron nuevas pruebas en la prórroga del plazo investigativo planteado una vez que el uniformado recibió la falta de mérito”. Aunque formalmente la causa no está cerrada, la investigación está detenida de hecho desde diciembre de 2004.



Cronología: CTA Rosario
Foto: María Petraccaro