Hace unos días le remití otra carta a su correo (sin esperanza de verla publicada).
Estimado Nelson
Ya van más de 15 días del comienzo del cese de actividades de los trabajadores de Perfil en reclamo de mejoras salariales. El diario lejos de poner en conocimiento a sus lectores acerca de este problema, lo ignora, llena sus páginas con editores firmando muchas notas y cables de agencia. Me llama fuertemente la atención que se ignore este tema en el Correo. Todas las semanas debo aportar obligadamente al fideicomiso. Sintiéndome ante esto un "socio" de la empresa lo insto Doctor a llevar a sus páginas noticias sobre el desarrollo de este conflicto.
Cordiales saludos
Claudio Andrés De Luca
Mi carta no se publicó pero si una donde los trabajadores agradecen el apoyo de distintos periodistas. La siguiente carta debía haber salido en la doble página de Ombudsman de Perfil, el Dr. Nelson Castro, pero esto no ocurrió.
Estimado Nelson Castro:
Cuando salga esta carta, los trabajadores de la Editorial Perfil , Perfil.com y diario Perfil estaremos cumpliendo veinte días de retención de tareas en reclamo de aumentos salariales y condiciones dignas de trabajo. Nuestro pedido es el mismo del primer día: un aumento de 500 pesos retroactivos al mes de enero y un piso salarial de 1.500, muy por debajo de lo que cobran, por tareas similares, colegas de otros medios.
En la actualidad, el sueldo de muchos periodistas de Perfil ronda los 900 pesos, cifra que está por debajo de la línea de pobreza establecida por el INDEC. Buena parte de las otras categorías no supera la Canasta Básica Familiar. Ante esta situación la Asamblea de Trabajadores de Perfil comenzó, en noviembre de 2006, su pedido de aumento salarial. Todavía no tenemos respuestas satisfactorias.
Por eso, desde hace tres semanas, el sitio Perfil.com, Diario Perfil, las revistas semanales Caras, Noticias, Fortuna, Semana, Semanario, Mía, Jocker y Luz y las mensuales Hombre, Parabrisas, Súper Campo, Luna Teen y Weekend están siendo producidos por un reducido grupo de editores y por personal contratado exclusivamente para esta tarea.
Aunque Perfil tiene planificada una facturación anual, sólo en Argentina, de más de 120 millones de pesos, sigue aduciendo que no cuenta con recursos para acceder a pagar los aumentos, en gran medida debido a la ausencia de pauta publicitaria oficial. No somos necios: comprendemos las dificultades empresariales, pero las necesidades básicas son impostergables.
Considerando el proceso inflacionario actual, en las empresas periodísticas argentinas la tendencia general es dar a sus trabajadores ajustes salariales de 500 pesos, sin la necesidad de llegar a situaciones extremas que comprometan la calidad de las publicaciones. Llevar a cabo un paro de esta magnitud es un sacrificio que sentimos todos los días. Queremos volver a trabajar porque lo hacemos con alegría, orgullo y profesionalismo. Pero no podemos hacerlo con la angustia de no poder pagar el alquiler y comprometer la crianza de nuestros hijos. Nuestro reclamo es justo. Por eso informamos a los lectores la situación penosa en que nos encontramos, y que nos obligó a tomar esta medida Asamblea de Trabajadores del Grupo Perfil.
Fuente: http://trabajadoresdeperfil.wordpress.com/
